El impacto del COVID-19 en el mercado laboral no tiene precedentes. A mayo del 2020, se estimaba una pérdida de más de 29 millones de empleos en América Latina y el Caribe. En este contexto, los servicios públicos de empleo (SPE) pueden ayudar a proteger los empleos existentes y fomentar la creación de nuevos empleos, apoyando a buscadores de empleo y a empresas y ofreciendo una valiosa fuente de información para la toma de decisiones. ¿Qué medidas han tomado los SPE para hacer frente a esta crisis? ¿Cómo están apoyando a quienes han perdido su empleo y se encuentran con un mercado de trabajo en plena transformación?
Los SPE ante la crisis del coronavirus
Con el fin de conocer e intercambiar información sobre las principales acciones que han emprendido los SPE a nivel mundial, el BID junto con la Organización Internacional del Trabajo, la Asociación Mundial de Servicios Públicos de Empleo, y SOCIEAUX+ desarrollaron una encuesta conjunta que fue implementada de manera virtual en abril del 2020 en 72 países, 16 de ellos de la región. A continuación, presentamos los principales resultados:
- Medidas de prevención y apoyo a la economía
En esta sección se indagó sobre el contexto de medidas implementadas por los gobiernos en los que los SPE operan. Los resultados mostraron que, a nivel mundial, se dio un gran impulso al fomento del teletrabajo y la flexibilización de la legislación laboral: 87% de los países implementó medidas para facilitar el teletrabajo, 83% relajó su regulación laboral y 68% impulsó medidas para la protección de los ingresos de trabajadores independientes e informales. En el caso específico de la región, el 87% de los países asumió medidas para la protección los ingresos de estos colectivos y el 93% relajó su regulación laboral, mientras que solo el 75% impulsó el teletrabajo (quizás debido a las limitaciones que enfrentan nuestros países para expandir esta modalidad, así como la falta de normatividad existente en varios países).
- Continuidad de operación de los SPE
Los SPE a nivel mundial presentaron una respuesta ágil que permitió la continuidad de sus servicios. 84% de los SPE mantuvieron funcionando, de manera virtual, los servicios prestados a buscadores de empleo y empleadores. Para el caso de la región, 68% de los SPE mantuvieron los servicios de registro de buscadores y de vacantes por vía web y 75% cuenta con servicios de información por ese medio.
- Organización de los servicios prestados por los SPE
Para garantizar su operatividad, los SPE debieron asumir rápidamente un modelo de trabajo remoto. El porcentaje de SPE que implementan teletrabajo pasó de 44% antes de la pandemia a 72% en el mes de abril. En la región el salto fue aún mayor, de 31% a 68%.
Innovación en Europa y Estados Unidos
En un seminario virtual reciente de la Red SEALC pudimos conocer con mayor detalle la experiencia de los SPE de la Unión Europea y de Estados Unidos en el manejo de la crisis. El SPE de Suecia, por ejemplo, desarrolló una herramienta digital para entrevistas rápidas para facilitar la contratación, y los SPE de Portugal y Holanda desarrollaron programas de formación a distancia para buscadores de empleo. Otros SPE de Europa han automatizado el registro y el otorgamiento de beneficios por desempleo y han implementado chatbots para atender las consultas de los buscadores de empleo. De cara a la fase de reapertura, los SPE europeos están priorizando la identificación de las necesidades de formación de los desempleados provenientes de los sectores más golpeados (como son el turismo y la recreación, en donde la Comisión Europea estima un recorte de cerca de 70% de la fuerza laboral).
En Estados Unidos, en donde las solicitudes de seguro de desempleo alcanzaron un acumulado de 32,5 millones en los 6 primeros meses del 2020, los SPE también han implementado distintas medidas para cubrir las necesidades de sus beneficiarios. Entre ellas destaca el aumento por 13 semanas adicionales a los pagos del seguro de desempleo y la aceleración de programas dirigidos a pequeños negocios y autoempleados. También se han implementado ferias de empleo virtuales y de atención en vehículos (drive–through), y se han creado mecanismos específicos para el reclutamiento de trabajadores esenciales. Además, varios SPE del país ya están trabajando en la creación de estrategias y planes para la fase de recuperación post COVID.
Retos actuales y futuros
El actual panorama representa un reto sin precedentes para los SPE. No solo deben hacer frente a un desempleo masivo, sino que además deben proveer acompañamiento a las transiciones profesionales y sectoriales de las personas en un contexto sumamente incierto y volátil. Como vimos en la encuesta y en el seminario virtual, los SPE también son conscientes que deben contribuir a prevenir los riesgos de aumento de la desigualdad, de exclusión del mercado laboral y de pobreza, manteniendo en muchos casos una reducida plantilla de personal y de recursos. Así, la situación actual también representa una oportunidad de mejora para los SPE, especialmente para aumentar su flexibilidad y su capacidad de respuesta, fortaleciendo los nuevos modos de trabajo y de gestión y continuando y acelerando las acciones emprendidas para garantizar el rendimiento de los servicios. De esta forma los SPE podrán contribuir de manera activa a los procesos de recuperación económica a nivel mundial.
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