El idioma es el principal medio para transmitir el pensamiento humano. Es una capacidad individual, pero a la vez es el producto de un conglomerado humano transmitido a través del tiempo. Es decir, es parte de una cultura. En términos metafóricos, el idioma es el alma de un pueblo. En ese sentido, cuando se habla de los pueblos indígenas y del Desarrollo con Identidad, el idioma juega un papel esencial, pues es a través de éste que se nombra e interpreta la realidad; es el medio a través del cual un pueblo transmite su conocimiento de una generación a otra.
Desafortunadamente, los pueblos indígenas de América Latina han venido experimentando una pérdida alarmante de sus idiomas, quizá acentuado en las últimas décadas. En aproximadamente 800 distintos pueblos que habitan la región se hablan alrededor de 560 idiomas indígenas. Por otro lado, debido a la escasa cobertura de la educación intercultural bilingüe (EIB), los sistemas educativos convencionales han tenido un impacto en la pérdida de los idiomas indígenas. Un estudio de 2015 determinó que sólo un tercio de los estudiantes indígenas seguía hablando su idioma una vez completada la primaria; este porcentaje bajaba al 5% para aquellos que terminaban el bachillerato.
Idiomas indígenas en Guatemala
La situación de los idiomas indígenas de Guatemala es similar al resto de la región. Un estudio realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) Pueblos indígenas en Guatemala: desafíos demográficos, lingüísticos y socioeconómicos: análisis comparativo de los censos 2002 vs 2018 (iadb.org), basado en los datos de los dos últimos censos de población, encontró una importante pérdida de vitalidad para varios idiomas indígenas. Entre otros aspectos, la vitalidad se mide por el número absoluto de hablantes, la proporción de hablantes y la transmisión intergeneracional del idioma. Los datos muestran cómo, a medida que se disminuye en los quinquenios de edad, va disminuyendo la proporción de hablantes.
La siguiente tabla compara los dos extremos de los grupos etarios. Allí, el grupo etario de mayor edad presenta proporciones altas de hablantes. Por otro lado, en el grupo etario de menor edad las proporciones de hablantes bajan de manera importante para varias de las comunidades lingüísticas.
En estos contextos de alta pérdida de vitalidad de los idiomas, el papel de las herramientas tecnológicas y digitales es muy importante para la enseñanza. Aunque estas herramientas ya se usaban mucho antes de la pandemia del Covid-19, su uso se acentuó significativamente a raíz de las necesidades de distanciamiento. Sin embargo, las desigualdades presentes en el mundo más allá del acceso a internet se replicaron también en el mundo digital. Por ejemplo, en cuanto a infraestructura y calidad de servicios públicos.
Un estudio llevado a cabo por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), encontró que la enseñanza para estudiantes indígenas se vio muy perjudicada durante la pandemia. A diferencia de la población con acceso a internet y dispositivos digitales, mucha población estudiantil indígena no tuvo la misma oportunidad. En el mejor de los casos, se recurrió a la radio.
La relación entre las aplicaciones digitales y la educación intercultural bilingüe
Uno de los medios que se ha venido desarrollando para el aprendizaje de idiomas son las aplicaciones digitales. Es decir, las apps que pueden utilizarse mediante computadoras o teléfonos móviles. Una de las ventajas de estos medios es que permiten el aprendizaje casi en cualquier momento y en cualquier lugar. De esta forma, reducen la dependencia de los formatos de aprendizaje convencional, con la presencia de docentes en el espacio físico de un aula. Si bien existen apps para el aprendizaje de idiomas mayoritarios (el inglés es el más emblemático), su uso para el aprendizaje de idiomas indígenas es relativamente reciente.
Para que estas apps cumplan su objetivo deben tener ciertas características:
- Conexión curricular
- Autenticidad
- Retroalimentación
- Diferenciación
- Rendimiento
- Capacidad para compartir
- Amigabilidad
- Diseño atractivo
En esta línea de acción, el BID ha venido colaborando con el Ministerio de Educación (MINEDUC) de Guatemala, a través de la Dirección General de Educación Bilingüe. Juntos han desarrollado las aplicaciones Qyolb’il y Tzijob’al, en los idiomas mayas Mam y Tzutujil, respectivamente. Este esfuerzo se suma a otros cinco idiomas mayas que ya el Ministerio ha venido trabajando. Estas herramientas fueron diseñadas para estudiantes de primer grado de primaria, basados en el texto Leo y Escribo.
Las aplicaciones estarán disponibles mediante descargas en teléfonos móviles. Se busca que, a través de estas herramientas, se fortalezca la educación intercultural bilingüe en el país y se contribuya a la vitalidad de los idiomas indígenas.
Asimismo, desde una perspectiva regional, el BID y la Organización de Estados Iberoamericanos están por lanzar una plataforma para el aprendizaje de idiomas originarios en la región. “Lenguas: Una Plataforma para el Aprendizaje de Lenguas Indígenas en América Latina y el Caribe”se lanzará en junio de 2024 en Belém, Brasil, durante un evento de diálogo regional con ministros y autoridades educativas de la región “Aprendizajes de la Amazonía: Estrategias innovadoras para transformar la educación en América Latina y el Caribe”.
Encuentra a continuación las cinco aplicaciones que ya están disponibles:
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