Pocos eventos internacionales logran capturar la atención de la mitad de la población mundial. Uno de ellos acaba de comenzar: la Copa Mundial de fútbol masculino. En 2018, el torneo sumó más de 3570 millones de espectadores y se espera que, este año, la audiencia sea aún más grande. Sabemos que en el deporte siempre hay ganadores y perdedores. Sin embargo, estudios demuestran que hay un grupo que siempre termina perdiendo, más allá de lo que pasa en la cancha – las mujeres víctimas de violencia doméstica.
Cuando hay partidos, hay picos de violencia basada en género
En Latinoamérica, datos señalan que los casos de violencia íntima de pareja aumentan cuando hay partidos de fútbol. Un ejemplo de esto es un estudio realizado en Brasil, que reportó un incremento de 23,7% en las denuncias de amenazas contra mujeres en días de partidos en la Competencia Brasileña de Fútbol de 2015 a 2018. Las denuncias por lesión llegaron a crecer un 25,9% cuando los equipos jugaban en sus propias ciudades, siendo parejas y exparejas los principales agresores. Números similares se reportan en otros países de la región, con cifras de aumento de hasta un 30% en las denuncias de violencia basada en género en días de partidos de los equipos nacionales o de los equipos locales principales.
¿Qué pasa con un mundial de fútbol?
Desafortunadamente, el evento más grande de fútbol, tampoco se escapa a esta realidad. En Colombia, se observó un incremento de un 25% en los registros de violencia doméstica en los días en los que la selección colombiana tuvo partidos en el mundial de 2018, y un 38% en el mundial de 2014. Esta relación también se ha detectado fuera de América Latina y el Caribe y hasta en otros deportes. En Inglaterra, evaluando los torneos de fútbol de 2002, 2006 y 2010, se identificó un aumento de un 26% en los casos en días de empate o victorias, tristemente superado por un aumento de 38% en días de derrota. Un estudio en Estados Unidos publicado en el 2011 calculó que la violencia íntima de pareja subió en promedio un 10% en días y cuidades en que sus equipos de fútbol americano perdían de forma inesperada.
¿Por qué aumenta la violencia durante los partidos de fútbol?
Pero ¿por qué sucede esto y cómo podemos prevenirlo? Es claro que el deporte en sí mismo no es el problema. Comprender los comportamientos y patrones observados alrededor de estos eventos deportivos nos ayuda a entender las razones detrás de este aumento en la violencia.
Consumo de alcohol
Primero, el exceso de ingesta de bebidas alcohólicas puede ser un factor importante para comprender las tendencias observadas. En Inglaterra, un estudio de 2012 a 2019 muestra que días con partidos más tempranos están asociados a más casos de violencia, bajo la hipótesis de que agresores pasan más tiempo consumiendo alcohol. Se observó una reducción de un 5% de las denuncias durante los partidos, las cuales llegan a su pico 10 a 12 horas luego de que se terminan, y aumentan un 40% los fines de semana. Sin dudas, el consumo de excesivo de alcohol en días de partidos juega un rol agravante en el aumento de la violencia sobre todo contra mujeres, parejas y niños. Sin embargo, las raíces de este fenómeno son mucho más profundas.
Viejos patrones de masculinidades
Estudios de la Organización Mundial de la Salud muestran que Una de cada tres mujeres en el mundo ha sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja. Los patrones de violencia sexual y basada en género están estrechamente relacionados con las normas sociales y de género, especialmente aquellas que respaldan normas de masculinidad hegemónica. Es decir, normas que enfatizan el dominio de los hombres sobre las mujeres y la utilización de violencia como método de ejercer ese control o forma de canalizar y proyectar frustraciones y/o alegrías de los agresores. Lo que nos ayuda a entender la complejidad y persistencia de los episodios observados.
Cómo podemos prevenir la violencia basada en género durante el mundial de fútbol
Estar consciente de esta realidad es un primer y muy importante paso para prevenirla. Sin embargo, no es suficiente. La violencia sexual y basada en género es una violación de los derechos humanos y es criminalizada en al menos 158 países. Además de la adecuada atención a las víctimas y criminalización de perpetuadores, existen al menos otros dos frentes de actuación, enfocados en la prevención.
- Campañas de sensibilización: La primera, se observó en ediciones pasadas de la copa mundial y de forma local en los países, está basada en campañas de sensibilización sobre el aumento de los casos durante los partidos. Las campañas #StandUpWorldCup de la ONG Tender y la campaña “The Not-So-Beautiful Game” (El juego no tan bonito) del Centro Nacional por la Violencia Domestica del Reino Unido se volvieron virales en 2014 y 2018, consecutivamente. En Latinoamérica, se lanzó la campaña “Métele un Gol al Machismo” de la Fundación Justicia y Género junto a Oxfam en 2018, que contó con financiamiento del Ministerio Holandés de Asuntos Exteriores. Hay otras iniciativas de equipos locales en diversos países que enfocan en la prevención de la violencia contra las mujeres, pero pocos reconociendo la correlación entre el deporte y el aumento de los casos. (insert video campaña)
- Acciones a largo plazo: El segundo frente de actuación apunta a cambiar comportamientos es en el largo plazo. Si en la raíz del problema están las normas de género y la canalización de las frustraciones masculinas en sus parejas (o exparejas), cambiar estas dinámica y comportamientos tiene que ser una prioridad. Hay iniciativas en la región que vienen trabajando de forma innovadora para crear un canal de comunicación con hombres y ayudarles a manejar emociones y sentimientos. Un ejemplo es “Hablemos Entre Patas” en Perú, una iniciativa digital que funciona a través de WhatsApp, orientada a hombres que buscan reducir conflictos y tensiones con sus parejas. Este proyecto es una colaboración del BID con Innovations for Poverty Action (IPA) y el International Rescue Committee (IRC). En Bogotá, Colombia, hay una iniciativa similar llamada “Línea Calma”, por la cual hombres pueden llamar a un número cuando necesiten ayuda para transitar sus emociones, ¨calmarse¨, y obtener acompañamiento psicológico y educativo, si lo necesitan.
Un partido de más de dos tiempos
Más iniciativas surgen cada año con instituciones, gobiernos y organizaciones de la sociedad civil. Cada vez hay más consciencia de la gravedad de la situación y de los números de violencia doméstica en todo el mundo. Involucrarse, estar informado y compartir estas informaciones con amigos y parientes es necesario para que juntos podamos prevenirlo y proteger a las víctimas. En este mundial que comienza, esperamos celebrar y emocionarnos con cada partido, pero con nuestra atención enfocada en la prevención de la violencia basada en género. A fin de cuentas, todos y todas tenemos derecho a vibrar con las victorias y llorar las pérdidas de nuestros equipos. Dejemos a los ganadores y perdedores en las canchas, y protejamos la seguridad de todos y todas en nuestros hogares.
MICHAEL GRAHAM Dice
Very interesting and yet Europeans are trying to force the Qatari government to sell alcohol in the world cup stadia during this current 2022 World Cup games. Are these European nations aware of this evidence presented here?