El filósofo español Jorge Santayana dijo una vez, “Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo”. Esa es una de las razones por las cuales nos esforzamos en extraer lecciones aprendidas de los proyectos de infraestructura que implementamos.
Desde el Departamento de Infraestructura y Energía del BID, en coordinación con la División de Gestión del Conocimiento, iniciamos hace poco más de un año la publicación “Infraestructura para el desarrollo”, una serie de casos de estudio que permiten compartir aprendizajes sobre lo que ha funcionado y lo que no a la hora de fortalecer la infraestructura y mejorar vidas en América Latina y el Caribe. Se trata de un esfuerzo para abrir conocimiento que en el pasado se quedaba sólo en la mente de las personas que habían interactuado directamente con el proyecto. Puedes encontrar algunas de las experiencias y lecciones aprendidas de estos estudios de caso en esta entrada de blog.
A partir de los casos de infraestructura documentados hasta ahora, donde se tratan proyectos totalmente distintos –en siete países diferentes y abordando temas tan variados como agua, agricultura, energía, saneamiento, residuos sólidos o transporte público–, pudimos extraer a nivel macro y de manera transversal tres lecciones aprendidas de proyectos de infraestructura, que se desarrollan, documentan y ejemplifican en nuestra reciente publicación. A través de este proceso, aprendimos que el éxito de un proyecto de infraestructura depende de:
1Promover un sentimiento de pertenencia a través de una comunicación fluida entre todos los involucrados
Cada uno de los proyectos de infraestructura está diseñado para promover el crecimiento y desarrollo en ALC proporcionando beneficios socioeconómicos a los habitantes de la región que permitan mejorar sus condiciones de vida. Sin embargo, muchas veces los beneficios no son bien explicados a los usuarios o no se logran obtener porque para ello se requiere de un cambio en la conducta de las personas, quienes pueden resistir el cambio. Esta resistencia al cambio es muy común entre los proyectos de infraestructura y se presenta de muchas maneras: unas veces entre los beneficiarios; otras dentro del mismo equipo de operación y otras entre los grupos de interés involucrados.
Quizá una de las lecciones más importantes de éxito que podemos recoger de todos estos casos de estudio analizados es la necesidad de crear un sentido de pertenencia y de responsabilidad entre los beneficiarios y/o actores principales. Sin duda, una comunicación constante y transparente con los involucrados es la acción mayormente implementada y con resultados significativos en los proyectos analizados. Esta comunicación se presenta de muchas maneras como, por ejemplo, campañas comunicacionales, visitas a hogares o reuniones con grupos de interés, entre otras. Sin embargo, el tipo de comunicación empleado depende del proyecto y de lo que se busca lograr.
2 Asegurar que el diseño de una solución atienda adecuadamente las necesidades del beneficiario antes de comenzar a ejecutar
En muchos casos, los retos que se presentan durante la etapa de ejecución son consecuencia de temas sin resolver en la etapa de diseño de los proyectos. Si bien, algunos de los problemas que afectan a la planeación son difíciles de controlar, como el aumento en los precios de los materiales, la caída del precio del petróleo o la apreciación de la moneda local frente al dólar, muchos otros pueden ser evitados con una preparación adecuada en las fases iniciales del proyecto. Por ello, es crucial analizar en profundidad el contexto de la problemática al momento de diseñar las soluciones.
Lo que nos muestran las fallas de planeamiento y diseño es que los detalles importan y estos en general se obtienen escuchando de cerca a la población afectada y a los expertos. Para esto, se debe lograr un diseño que incorpore las perspectivas de las partes interesadas desde el inicio del proyecto para anticipar sus reacciones a ciertos componentes del proyecto. Así como también permita que dichas partes validen la solución antes de su implementación; ellos mejor que nadie entienden la problemática y ayudan a entender cómo cubrir de manera eficaz sus necesidades.
3 Contar con organismos ejecutores bien capacitados y establecer colaboración de alto nivel
Uno de los aspectos clave en el éxito de los proyectos es contar con un socio de implementación que tenga una sólida capacidad institucional y de respuesta, así como un alto desempeño. Cuando el BID financia un programa, el prestatario designa al organismo ejecutor responsable de la implementación del proyecto. Previo a la aprobación de estos préstamos, se lleva a cabo un análisis de capacidad institucional para identificar las debilidades y fortalezas del organismo ejecutor. Este ejercicio permite acordar un plan de acción detallado para fortalecer institucionalmente al organismo y reducir cualquier riesgo durante la ejecución del programa.
Los casos de infraestructura documentados en esta serie nos muestran que ningún proyecto está exento de imprevistos, esto, sumado a la complejidad de los mismos significa que se necesita una estructura que garantice un soporte adecuado para la toma de decisiones, una capacidad de coordinación proactiva y reactiva y sistemas de seguimiento robustos que contribuyan efectivamente a la toma de decisiones.
Desde el Departamento de Infraestructura y Energía del BID, te invitamos a leer los principales retos y lecciones aprendidas a partir de proyectos de infraestructura en América Latina y el Caribe.
Además, te animamos a visitar cada uno de los casos publicados en los dos primeros volúmenes de la iniciativa “Infraestructura para el Desarrollo”.
Infraestructura para el desarrollo – Vol. 1, No. 1: Cómo innovar en el campo boliviano
Infraestructura para el desarrollo – Vol. 1, No. 2: Cómo encender la luz en Haití
Infraestructura para el desarrollo – Vol. 1, No. 3: Cómo mejorar la gestión de residuos en Belice
Infraestructura para el desarrollo – Vol. 1, No. 4: Cómo movilizar San Salvador
Infraestructura para el desarrollo – Vol. 2, No. 1: Cómo limpiar la matriz energética de Ecuador
Infraestructura para el desarrollo – Vol. 2, No. 2: Cómo mejorar la gestión del agua en Haití
Infraestructura para el desarrollo-Vol. 2, No. 3: Cómo renovar la electricidad en Costa Rica
Infraestructura para el desarrollo-Vol. 2, No. 4: Cómo sanear la Bahía de Montevideo
Por: Tomás Serebrisky y Ancor Suárez Alemán del Departamento de Infraestructura y Energía del Banco Interamericano de Desarrollo y Benedicte de Waziers, consultora externa
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