En más de una ocasión hemos comentado cómo influye negativamente la pobreza tanto en el desarrollo infantil temprano, como en el desarrollo cerebral. La estimulación, las palabras escuchadas y las relaciones significativas a las que están expuestos los más pequeños tienen consecuencias a largo plazo, pero varían notablemente según el nivel socioeconómico de las familias. Si queremos mejorar el desarrollo infantil, debemos reducir la pobreza. ¿Podemos lograrlo con transferencias monetarias mensuales?
A partir del mes de julio de 2021, Estados Unidos se une a muchos otros países de alto ingreso que ofrecen una renta garantizada a las familias con niños menores de 17 años entre sus integrantes. Los expertos estiman que los pagos reducirán la pobreza infantil a casi la mitad, un logro sin precedentes.
Lo que sabemos sobre el “Child Tax Credit” (Crédito Fiscal por Hijo) de los Estados Unidos
- La posibilidad de recibir este pago mensual y su monto varían de acuerdo con el ingreso anual de los padres y las edades de los hijos. Con estas variables en mente, los montos totales de julio a fin de año van de USD 2,000 a USD 3,600 fraccionados mensualmente.
- Las familias que pagaron impuestos en 2020 no deben hacer nada para recibir este crédito. El monto mensual será depositado directamente en su cuenta bancaria.
- Los pagos están asociados al programa nacional que responde a la pandemia por lo que solo están confirmados por un año.
- De los 74 millones de niños menores de 18 años del país, casi nueve de cada diez tendrán derecho a que sus familias reciban estos pagos mensuales.
- Estos pagos del Departamento del Tesoro de Estados Unidos marcan un hito en la política social del país e intensifican el debate sobre si hacer de estos subsidios una parte permanente de la red de protección social estadounidense.
Si estos puntos te suenan familiares es porque los países de América Latina y el Caribe vienen realizando transferencias monetarias desde hace décadas. La diferencia principal es que en los países de la región los montos son condicionados, es decir, si la familia recibe el monto, es porque cumple con ciertos requisitos mensuales como llevar a sus hijos a la escuela, a sus controles médicos periódicos, etc. En este caso, las transferencias estadounidenses no están atadas a condiciones.
¿Qué lecciones podemos transmitir a Estados Unidos?
- Las condicionalidades -en determinados contextos -son
- Además, la región ya está pensando en condicionalidades de oferta de servicios para mejorar las pautas de crianza en la primera infancia. En Jamaica, el programa de Transferencias Monetarias Condicionadas, PATH, ha sido pionero globalmente en este tipo de condicionalidades
- La Asignación Universal por Hijo en Argentina, en 2010, fue una política que implicó extender el sistema de asignaciones familiares preexistente, limitado a los hijos de los trabajadores registrados en la seguridad social, a los hogares encabezados por desocupados y trabajadores informales de bajos ingresos, encaminándose así a la universalización del sistema de protección social. El nuevo régimen incluyó corresponsabilidades en materia de salud y educación por parte de los niños y adolescentes receptores.
Desde ya, el gobierno estadounidense se enfrenta con retos como hacer llegar los pagos a millones de familias de difícil acceso o que no están bancarizadas. Esto podría socavar sus objetivos de lucha contra la pobreza. Muchos de los que se oponen a la iniciativa estarán atentos a los fallos en la entrega, a los ejemplos de despilfarro o a los signos de que el dinero erosiona el deseo de algunos padres de trabajar.
¿En tu país existe este tipo de subsidio? ¿Crees que podrían eliminar la pobreza sean o no los pagos condicionados? Nos gustaría saber tu opinión en la sección de comentarios más abajo.
María Leonor Molina Molina dice
Soy trabajadora social de formación, especialista en Administración Pública y Magíster en Planeación para el Desarrollo.
Las Transferencias Monetarias Condicionadas, PATH pueden mejorar el desarrollo de un bebé por la posibilidad de consumo de alimentos de mejor calidad y por el condicionamiento a los padres para que el bebé sea mejor atendido. Sin embargo, las instituciones con responsabilidad de apoyar y hacer seguimiento, a los cuidados y atención a partir de los programas con frecuencia olvidan que no basta ser alimentado y atendido sí para esta atención no mejora la calidad de esta atención. con esto quiere decir que las familias (padre y madre) han desarrollado sus vidas en ambientes de desprotección, mal tratos, conflictos ente sus padres. Por ello requieren recibir pedagogía para brindar afecto con respeto y una visión de vida en desarrollo integral. En Colombia he prestado servicios profesionales en el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y he recomendado esta pedagogía pero las políticas públicas han cambiado y esta pedagogía no ha sido implementada directamente, sino que por contrato con ONG’s la competencia ha sido transferida a estas.
Pensar en que los bebés tengan un desarrollo cerebral para una vida saludable se deben transformar las visiones sobre las transferencias que incidan en políticas públicas efectivas.
María Morillo dice
Interesante el artículo, creo que en lugar de ponerles condiciones para recibir dicho incentivo monetario a las familias, y para no quitarles el deseo a los padres a trabajar, se les debería dar tareas a desarrollar en beneficio de su comunidad y así ser merecedores del incentivo económico, hay distintas tareas que realizar en la comunidad.
Roberto Mejias dice
Buena tarde, en Chile desde hace meses y a raíz de la pandemia, el gobierno entrega un Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) universal, a pesar de su nombre no es universal, sino que tienes que cumplir requisitos de ingreso per cápita máximo. Este se materializó para frenar en parte las iniciativas del parlamento de retiros de fondos de pensiones de las cuentas individuales de los trabajadores.
Considero que las transferencias monetarias son una buena herramienta para la superación de la pobreza y estas debieran tener un carácter permanente y no sólo debido a la contingencia sanitaria. En la región la distribución de la riqueza es dispar, por lo que el acceso a bienes y servicios para los estratos socioeconómicos desfavorecidos siempre es más complejo. Condicionadas o no las transferencias, creo que debieran ser sin condiciones ya que en general una mejor calidad de vida (en este caso a través del ingreso) genera un virtuosismo social que da paso a mejores condiciones socioeconómicas en las familias que hoy están preocupadas de sobrevivir y llevar el pan a la mesa cada día, lo que en si mismo genera un estrés permanente. bajar la incertidumbre del ingreso futuro es un buen argumento para mantener las transferencias monetarias a las familias.
Roberto Rosado dice
En Perú, el 17 de setiembre de 2021 se cumplieron 16 años de creación del programa Juntos, del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), que transfiere 200 soles cada dos meses a más de 600 mil familias en situación de pobreza, con la condición de que lleven a sus hijos a los centros de salud para la prevención de la anemia, asistan a la escuela, entre otros compromisos en salud y educación, para potenciar el capital humano de estas familias, y se rompa el ciclo de pobreza intergeneracional.
El programa Juntos del Midis ha contribuido en reducir la pobreza en el Perú, y tiene como meta que las atenciones sean más tempranas, es decir, llevar el control de salud de las gestantes y niños menores de tres años de edad.
Muchos hijos de estas familias terminaron la educación escolar con buenas calificaciones, y accedieron al programa Beca 18 para acceder a universidades privadas.
Esperemos pronto ver a profesionales surgidos de los hogares de Juntos y que ocupen cargos de liderazgo en el sector público y privado, para que contribuyan a seguir impulsando nuevas estrategias de políticas para reducir la pobreza en el Perú.