Bosques, manglares, ríos, especies marinas, jaguares, flamencos, colibríes y una gran variedad de especies habitan nuestra región. Desde la Antártica Chilena hasta Baja California, América Latina y el Caribe alberga la mayor cantidad de diversidad de especies y ecosistemas del planeta. Hablamos de más del 40% de la biodiversidad del mundo; casi un tercio del agua dulce del planeta, el 26% de manglares y el 57% de los bosques primarios del mundo. Incluso, seis de los países que mayor riqueza natural tienen están en nuestra región: Brasil, Colombia, Ecuador, México, Perú y Venezuela.
Sí, Latinoamérica es mega diversa y rica en naturaleza, lo cual nos ofrece una enorme oportunidad para hacer frente al cambio climático y trabajar por el desarrollo sostenible de la región. Sin embargo, la naturaleza está en riesgo, ¿lo sabías? Las actividades humanas, la deforestación y emisión de productos y químicos que dañan la naturaleza, aumentan la pérdida de recursos y afectan casi al 40% de la población mundial.
¿Y entonces qué podemos hacer?
Es cierto que la pérdida de biodiversidad es una amenaza para la economía y la sociedad, ¡la mitad del PBI mundial depende de la naturaleza! Pero existen mecanismos y acciones positivas para la naturaleza que nos ayudarían a combatir el cambio climático. Es sencillo, si preservamos nuestras especies, bosques y ecosistemas y revertimos la deforestación y la destrucción de los ecosistemas, podremos obtener grandes beneficios sociales, económicos y climáticos, avanzando hacia una transición ecológica justa.
¿Cómo puede la naturaleza ayudarnos?
Por un lado, la biodiversidad de la región nos ofrece un valioso recurso de secuestro de carbono. Nuestros manglares y bosques almacenan más de 100 gigatoneladas de carbono, casi 10 veces lo que China produce en un año. Expandir y cuidar estos bosques y manglares permitiría contribuir con el 37% de reducciones netas de CO2 requeridas al 2030 para limitar el calentamiento global por debajo de los 2ºC.
Para restaurar y proteger la naturaleza es necesario repensar el uso de la tierra para producir alimentos e incrementar la inversión en soluciones basadas en la naturaleza. Cada dólar invertido en la restauración de ecosistemas genera hasta 30 dólares en beneficios económicos. Las transacciones positivas para la naturaleza podrían generar 10 mil millones de dólares en valor empresarial al año en el mundo -cifra equivalente a la inversión de Microsoft a ChatGPT hace unos días-, y crear unos 395 millones de puestos de trabajo de aquí a 2030. ¿Les queda todavía alguna duda de por qué debemos promover las acciones positivas para la naturaleza?
¿Qué hacemos desde el BID?
Como banco multilateral jugamos un papel fundamental, ya que además de ser garantes, aportamos nuestra experiencia y conocimiento en el diseño de fondos fiduciarios para la conservación, el apoyo a las Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (NDC) y la implementación de las Estrategias y Planes de Acción Nacionales en materia de Biodiversidad (EPANB). También tenemos un rol de intermediario entre los sectores público y privado.
Desde el Banco Interamericano de Desarrollo continuamos avanzando para apoyar el diseño de planes de conservación y mecanismos positivos para la naturaleza a través de tres ejes:
- Apoyamos a los países en la implementación del Marco Global de Biodiversidad:
Estamos comprometidos en apoyar las metas de la agenda climática y la preservación de biodiversidad. Utilizamos recursos concesionales para apoyar a los países en la integración de la biodiversidad en los planes de gobierno, así como con el apoyo en la valoración de la naturaleza para la planificación financiera y el diseño de escenarios económicos, por ejemplo con el apoyo a la creación del comité de capital natural en Chile. Aliados como Francia y Reino Unido han sido fundamentales en la creación del Programa del Natural Capital Lab que provee estos recursos.
- Aumentamos la financiación verde, buscando integrar la naturaleza en las operaciones donde puede tener un rol de apoyo, a la vez que seguimos avanzando en el desarrollo de nuestra meta de financiación verde, integrando las dimensiones de biodiversidad en nuestras operaciones y proyectos. También estamos iniciando el proceso de revisión del portafolio de riesgos de pérdida de biodiversidad en la región, el cual nos ayudará para tomar acción en el futuro. En este sentido, también trabajamos junto con otros bancos multilaterales en la definición de financiación positiva para la naturaleza y la metodología para hacer seguimiento a la misma. Como parte de nuestro trabajo de integración de naturaleza, colideramos el grupo de naturaleza junto con otros Bancos Multilaterales de Desarrollo, trabajando así en acciones vinculados con la “Declaración Conjunta de la Naturaleza, las Personas, y el Planeta”.
- Generamos instrumentos financieros novedosos. Promovemos herramientas como las garantías basadas en políticas para apoyar conversiones de deuda por naturaleza para financiar la conservación y restauración, junto con las reformas políticas asociadas.Asimismo, continuaremos apoyando iniciativas financieras innovadoras con BID Invest y BID Lab, como lo son los bonos de sostenibilidad, la financiación temprana, clases de activos naturales, la tokenización de activos naturales, los bancos de hábitats de biodiversidad, los créditos de biodiversidad y las plataformas digitales
Reunión Anual 2023
Del 15 al 18 de marzo, el BID celebró su Reunión Anual, una destacada ocasión para el diálogo entre nuestros Gobernadores, los Ministros de Finanzas, Economía, Planificación, Presidentes de Bancos Centrales u otras estimadas autoridades de los países miembros. El evento también acogió a representantes de instituciones financieras multilaterales, organizaciones de desarrollo y bancos privados.
Le invitamos a ver la sesión dedicada a la biodiversidad, en la que expertos deliberaron sobre la importancia de la biodiversidad y el capital natural en diversos ecosistemas y países de América Latina y el Caribe.
Vea la sesión completa aquí:
Leave a Reply