Entrada por Emma Naslund-Hadley y Juan Manuel Hernández-Agramonte
Las imágenes son poderosas, incluso las mentales. Si no nos podemos imaginar a nosotros mismos haciendo algo, las probabilidades de que lo hagamos disminuyen. La investigación internacional que pide a los estudiantes que dibujen matemáticos y científicos, revela que tanto los niños como las niñas tienden a imaginarlos como hombres y blancos.
Si las niñas no pueden imaginarse a sí mismas en matemáticas y ciencias, no es sorprendente que estén ingresando a las carreras y profesiones de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés) a tasas dramáticamente más bajas que sus pares masculinos en América Latina y el Caribe (ALC). Aunque no hay datos de ALC disponibles sobre mujeres y niñas de color en STEM, los datos internacionales sugieren que es probable que estén aún menos representadas que sus pares, las mujeres y niñas blancas.
Para promover una imagen diversa de quién puede ser científico y matemático, el BID se asoció con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la Fundación Carvajal, Plaza Sésamo e Innovation for Poverty Action (IPA). Dado que los estereotipos de género y STEM comienzan temprano, diseñamos y probamos un enfoque de sensibilización racial y de género entre 5.629 preescolares en Cali, Colombia. El enfoque, llamado Pequeñas Aventureras, capacita a los educadores en el uso de herramientas multimedia para fomentar el compromiso, el disfrute y el sentido de pertenencia de las niñas con las matemáticas y las ciencias.
Descubrimos que los padres afrodescendientes tienen más estereotipos de género que los padres blancos sobre si los niños tienen más talento en STEM que las niñas. Estos estereotipos de los padres son preocupantes en vista que varios estudios muestran un vínculo con el desarrollo de estereotipos similares en los niños. Los estereotipos de los padres se convierten en profecías autocumplidas.
La transmisión de estereotipos ya es evidente en las preferencias de los padres por los juguetes para sus hijos. Aunque a las niñas en edad preescolar les gustan los juguetes STEM tanto como a los niños, los padres de niñas prefieren darles los juguetes que no son STEM. Por su parte, los padres de los niños blancos tienen una preferencia más fuerte por conseguir juguetes STEM para sus hijos. En el otro extremo del espectro, los padres de las niñas afrodescendientes tienen la preferencia más baja (una diferencia de 23 puntos porcentuales con respecto a los padres de niños blancos) por los juguetes STEM para sus hijas. No es sorprendente entonces, que las niñas afrodescendientes en nuestro estudio crean que los juguetes STEM son solo para niños.
Irónicamente, a pesar de los estereotipos STEM raciales y de género de los padres, las niñas afrodescendientes en nuestro estudio afirman que disfrutan los juegos de matemáticas, y también tienen mejor desempeño en matemáticas que los niños afrodescendientes (una diferencia de 0.17 desviaciones estándar, que es equivalente a cerca de medio año escolar). Aunque los estereotipos de los padres aún no se han traducido en un aprendizaje inferior, nuestros datos muestran que los estereotipos de STEM raciales y de género de los padres se contagian a sus hijas. Es decir, los estereotipos comparativamente más altos de los padres afrodescendientes están asociados con menores preferencias STEM de las niñas afrodescendientes en nuestro estudio.
Los hallazgos iniciales de Pequeñas Aventureras indican que el enfoque de este programa disminuye los estereotipos STEM raciales y de género de educadores y alumnos en edad preescolar. Estén atentos ya que pronto publicaremos resultados detallados de la evaluación experimental. Mientras tanto, en celebración del Día Internacional de la Mujer Afro-Latina, Afrocaribeña y de la Diáspora Africana, te invitamos a reflexionar sobre lo que puedes hacer para combatir los estereotipos relacionados con que las mujeres y niñas afrodescendientes no pertenecen a STEM, y ayudar a luchar contra el poder de esas imágenes sesgadas de larga data.
¿Cómo podemos nosotros, como padres y educadores, integrar STEM en el juego de las niñas afrodescendientes hasta que tengan la edad suficiente para elegir sus propios intereses? ¿Cómo podemos nosotros, como responsables de la política educativa, ayudar a las niñas afrodescendienes a adoptar STEM? Cuéntanos en la sección de comentarios o en Twitter a través de @BIDeducacion #EnfoqueEducacion.
Juan Manuel Hernández-Agramonte es Director Regional para Paraguay, Perú y Bolivia en Innovation for Poverty Action (IPA). Realiza actividades de divulgación de políticas, desarrollo de proyectos, supervisión de evaluación y gestión de oficinas. Antes de trabajar para IPA, fue Gerente de Políticas para J-PAL, donde trabajó en el desarrollo de iniciativas gubernamentales para incorporar evidencia en las decisiones de política. Uno de los principales proyectos que dirigió fue la creación del Laboratorio de Educación del Ministerio de Educación del Perú (EduLAB, ahora conocido como MineduLAB) del cual fue coordinador. También ha trabajado como Coordinador de Investigación para IPA en Honduras, Perú y Paraguay y en UNICEF, OIM y OIT. Tiene una Maestría en Estudios de Desarrollo Internacional de la Universidad de Amsterdam y una Licenciatura en Sociología de la Universidad Complutense de Madrid.
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