Como un aliado para el crecimiento económico sostenible e inclusivo de América Latina y el Caribe, el BID reconoce que la búsqueda de la recuperación económica a través de la creación de empleo y la generación de ingresos debe ir acompañada de la protección de los recursos naturales y las comunidades, incluyendo la protección de los derechos fundamentales de los trabajadores. A medida que la región se enfoca en la recuperación, se vuelve aún más importante garantizar que nuestros proyectos promuevan buenos entornos de trabajo. Contar con condiciones que fomenten una relación sólida entre el trabajador y el empleador es clave para la sostenibilidad de cualquier iniciativa y fundamental para nuestra misión de mejorar vidas.
En las últimas décadas, los riesgos e impactos laborales, como el acoso en el lugar de trabajo, las condiciones laborales precarias de los migrantes, el trabajo infantil y forzoso, y la salud y seguridad en el trabajo, han pasado a un primer plano en materia de cooperación para el desarrollo. La pandemia del COVID-19 ha expuesto aún más estos factores de riesgo en las cadenas de suministro globales. El nuevo Marco de Política Ambiental y Social (MPAS) del BID aborda directamente las condiciones de la fuerza laboral involucrada en los proyectos del BID, incluidos los trabajadores de tiempo completo, medio tiempo, temporales, estacionales y migrantes.
La Norma de Desempeño Ambiental y Social 2 (NDAS 2) promueve el trato justo, la no discriminación y la igualdad de oportunidades para todos, y apoya a los clientes del BID en sus compromisos para erradicar el trabajo infantil y forzoso, promover condiciones de trabajo seguras y saludables, y proteger la salud de los trabajadores. La NDAS 2 apoya los principios de libertad de asociación y negociación colectiva y brinda orientación sobre cómo establecer, mantener y mejorar las relaciones entre trabajadores y empleadores en proyectos financiados por el BID.
A continuación te compartimos tres cosas que debes saber sobre cómo el BID gestiona los riesgos e impactos laborales, con base en su Norma de Desempeño Ambiental y Social 2.
1. Respetamos la legislación nacional y defendemos los derechos laborales internacionales
De todos las normas de desempeño del MPAS, esta es la que está más alineada con los marcos legales nacionales de nuestros países miembros y con las obligaciones bajo el derecho internacional. La NDAS 2 se basa en varias de las convenciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y las Naciones Unidas (ONU) y acoge sus definiciones adoptadas internacionalmente.
Muchos de los principios y requisitos establecidos en estos convenios y estándares internacionales ya se han incorporado a la legislación nacional de los países de nuestra región, por lo que el cumplimiento de la legislación nacional a menudo resultará en la alineación con muchos aspectos de la NDAS 2. Por ejemplo, en muchos de los países miembros del BID ya es un requisito establecido por las leyes laborales nacionales contar con mecanismos de reclamación para los trabajadores. La NDAS 2 requiere además que estos permitan la denuncia y reparación seguras y confidenciales de las quejas relacionadas con la violencia sexual y de género.
2. Estamos comprometidos con la prevención del trabajo infantil y el trabajo forzoso
La NDAS 2 establece la edad mínima para trabajar en un proyecto del BID en 15 años, a menos que la legislación nacional especifique una edad mayor. Los niños que superan la edad mínima no pueden ser empleados ni contratados de ninguna manera que constituya una explotación económica, pueda ser peligrosa, interfiera con su educación o sea nociva para su salud o su desarrollo. La NDAS 2 requiere que el prestatario tome medidas proactivas y constantes para prevenir el uso de mano de obra infantil en el trabajo directo y contratado en el proyecto y en su cadena de suministro principal.
De manera similar, la NDAS 2 requiere que el prestatario tome medidas rápidas para evitar casos de trabajo forzoso, incluida la trata de personas y otros tintes de esclavitud moderna, como el trabajo en condiciones de servidumbre. Imagina por un momento que visitas un proyecto y hablas con un guardia que es empleado de una empresa de seguridad privada que brinda servicios directos al proyecto de manera continua. El guardia te dice que fue contratado a través de un intermediario y que tuvo que entregar su pasaporte para que fuese guardado de manera segura. No sabe cómo recuperarlo y le han dicho que no debe abandonar el lugar de alojamiento de los trabajadores hasta que haya saldado sus deudas con el reclutador.
La NDAS 2 brinda protección a los trabajadores para evitar estas situaciones. El prestatario debe tomar acciones para asegurar que todos los trabajadores tengan libre acceso a sus documentos, aun cuando estén siendo guardados para mantenerlos seguros. También debe existir un proceso para garantizar que los terceros que participen en la contratación no creen situaciones que puedan conducir al trabajo forzoso, incluyendo la retención de documentos, el cobro de tarifas de contratación y la imposición de deudas a los trabajadores.
3. Contamos con Procedimientos de Gestión Laboral para mitigar los riesgos laborales en nuestros proyectos
Por último, ¿cómo incorporamos medidas para gestionar los riesgos laborales en nuestros proyectos? El Sistema de Gestión Ambiental y Social de un proyecto debe incluir Procedimientos de Gestión Laboral (PGL). Los PGL suelen consistir en:
- una descripción general de la fuerza laboral prevista para el proyecto
- los problemas o riesgos laborales previstos que se han identificado en relación con la mano de obra del proyecto
- los controles clave que se implementarán para hacer frente a los riesgos
- una breve descripción de la legislación laboral aplicable y cualquier brecha con respecto a las políticas del BID
- las funciones y responsabilidades dentro de la estructura de ejecución del proyecto, incluida la forma de gestionar a los contratistas
- una descripción de los mecanismos de quejas y reclamos para la fuerza laboral y los principales términos y condiciones laborales, como el código de conducta y la jornada laboral.
En breve, la NDAS 2 promueve relaciones laborales constructivas entre trabajadores y empleadores, el trato justo de la fuerza laboral, y condiciones de trabajo seguras y saludables. Estos son requisitos y lineamientos que generarán beneficios tangibles, como mejorar la eficiencia y la productividad de nuestros proyectos.
¿Quiere saber más sobre la NDAS 2 y cómo gestionar los riesgos laborales en proyectos financiados por el BID? Regístrate a nuestro curso sobre la Norma de Desempeño Ambiental y Social 2.
Leave a Reply