Este artículo está también disponible en / This post is also available in: Inglés
El Grupo BID celebra en marzo el Mes de la Mujer. A pesar de que día a día nos esforzamos para mejorar las vidas de las mujeres de América Latina y el Caribe (ALC), no existe mejor momento para compartir nuestro trabajo en favor de un modelo de desarrollo inclusivo. Ese modelo debe ayudarnos a cumplir y superar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en materia de igualdad de género y empoderamiento femenino, de manera que nuestras ciudades sean espacios seguros e inclusivos para las mujeres.
Como resultado del compromiso del BID en esta materia, el Banco fue invitado a participar el pasado 9 de marzo en la sesión Ciudades Lideradas por Mujeres. La sesión se celebraba en el marco del 67º periodo de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (también conocido como CSW67, por sus siglas en inglés).
El CSW es el principal organismo intergubernamental global dedicado exclusivamente a la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. Desempeña una labor crucial en la promoción de los derechos de la mujer, documentando la realidad que viven las mujeres en todo el mundo. Por este motivo, en el artículo de hoy queremos plasmar la situación de muchas mujeres vulnerables en las ciudades de ALC y cómo desde el Grupo BID trabajamos para mejorar la vida de todas ellas.
¿Cuál es la situación de las mujeres en las ciudades de América Latina y el Caribe?
Las mujeres que viven en áreas urbanas han logrado mayores índices de independencia económica y desarrollo humano que las que viven en áreas rurales, principalmente porque han mejorado sus oportunidades educativas y el acceso a trabajos de mayores ingresos. Sin embargo, las brechas de género aún persisten en las ciudades. En las ciudades de ALC, es más probable que las mujeres trabajen en sectores informales y mal remunerados. En promedio, los salarios de las mujeres son un 30% más bajos que los salarios de los hombres. Esta desigualdad ayuda a explicar la mayor incidencia de la pobreza entre las mujeres y en los hogares encabezados por mujeres. Un estudio reciente de 16 países de ALC identificó que el 26% de estos hogares eran pobres, en comparación con el 17% de los hogares encabezados por hombres.
Los altos niveles de pobreza entre las mujeres están profundamente interconectados con el elevado nivel de déficit habitacional en los hogares encabezados por mujeres. Los datos de 20 países en desarrollo muestran que la mayoría de las mujeres de 15 a 49 años viven en barrios marginales. En Brasil, por ejemplo, el 60% de los hogares con déficit de vivienda están encabezados por mujeres, aunque menos de un tercio de todos los hogares están encabezados por mujeres.
Además, la mujer enfrenta obstáculos adicionales cuando intenta participar en los mercados laborales. Por ejemplo, las redes de transporte público no satisfacen adecuadamente las necesidades de muchas mujeres que combinan viajes de trabajo con el cuidado de niños y ancianos de la familia. A ello se añade que la mujeres suele padecermiedo y acoso en los espacios públicos. Por ejemplo, el 50% de las mujeres en la Ciudad de México reportaron haber sido víctimas de violencia en espacios públicos y el 88% de las mujeres de esa misma ciudad se sienten inseguras cuando viajan en transporte público.
Finalmente, la participación significativa de las mujeres en los procesos de toma de decisiones es fundamental para construir ciudades socialmente cohesionadas e inclusivas. A nivel local, los datos de 2017 muestran que las mujeres representan menos del 10 % de los alcaldes y que de las 300 ciudades más grandes del mundo, solo 25 ciudades tenían alcaldesas. Es fundamental que las políticas, acciones y mecanismos institucionales brinden a las mujeres una forma de reclamar y disfrutar de todas sus capacidades humanas.
¿Por qué debemos apoyar la igualdad de género en las ciudades?
Magnitud: La proporción de hogares encabezados por mujeres está aumentando rápidamente. Según datos de la ONU, en América Latina y el Caribe, entre 1990 y 2010 el porcentaje aumentó del 13% al 17,2%. Actualmente se estima que al menos el 25% de todos los hogares está encabezado por una mujer.
Normativo: Como comunidad global, nos hemos comprometido con 17 ODS para lograr un futuro mejor y más inclusivo para todos. El ODS 5 se centra en la igualdad de género y el ODS 11 en la promoción de ciudades inclusivas y sostenibles. Ninguno de los otros 15 ODS es viable si estos dos no se atienden por completo.
Externalidades: La privación material de las mujeres tiene grandes consecuencias para las generaciones futuras, ya que es uno de los factores clave en la transmisión intergeneracional de la pobreza. Existe evidencia de que la pobreza en estos hogares afecta los niveles de violencia intrafamiliar, los días de enfermedad en el hogar y los logros educativos de los niños.
¿Qué prioriza el BID en el desarrollo de las mujeres en las ciudades?
El trabajo que hacemos en el Grupo BID es integral y abarca tanto al sector público como al privado. Nos enfocamos en tres áreas clave:
- Apoyar el acceso a la vivienda y los mercados de vivienda a los hogares encabezados por mujeres, lo que tiene enormes externalidades para el bienestar emocional y físico de los hogares.
- Promover espacios y servicios urbanos seguros e inclusivos, lo que tiene enormes implicaciones en la capacidad de las mujeres para transitar con seguridad por la ciudad y participar libremente en los mercados laborales.
- Fomentar la voz y el liderazgo de las mujeres en las comunidades e instituciones políticas, para que las políticas y proyectos incorporen plenamente sus puntos de vista y necesidades.
¿Cómo apoya el Grupo BID estas prioridades en las ciudades?
Algunos ejemplos de proyectos que hemos respaldado son:
- En Ecuador, el BID está implementando un programa de US$100 millones con el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda para apoyar el acceso a una vivienda digna. Este programa facilita el acceso a subsidios y créditos hipotecarios a hogares de bajos ingresos. Hasta ahora, ha entregado alrededor de un tercio de todos sus subsidios a hogares encabezados por mujeres.
- BID Invest, el brazo privado del Grupo BID, en asociación con la División de Desarrollo Urbano y Vivienda, trabaja en el diseño de estrategias y directrices para ayudar a sus clientes e inversionistas en el sector de la construcción a comprender y considerar las necesidades de la mujer en el diseño de espacios habitacionales y áreas comunes.
- En Guyana, el BID concedió un préstamo para la construcción de infraestructura básica y espacios públicos en Sophia, una comunidad de más de 4.000 familias en Georgetown. Para diseñar espacios que contribuyan a prevenir la violencia contra las mujeres y las niñas, el programa incluyó auditorías de seguridad de las mujeres. La lista de verificación de la auditoría se digitalizó y se codificó geográficamente, proporcionando un mapa que permite una planificación urbana con perspectiva de género basada en las experiencias reales de las mujeres locales.
- El BID apoya también una Red de Ciudades que incluye más de 200 urbes de América Latina y el Caribe. Como parte de sus actividades, la Red organiza programas de intercambio de experiencias entre alcaldesas y funcionarias de alto nivel, a las que brinda capacitación para fortalecer sus capacidades técnicas y de liderazgo.
¿Qué es lo siguiente?
Necesitamos seguir haciendo más para apoyar la igualdad de género en las ciudades. Ya estamos atrasados en el logro de todos los ODS, en particular el ODS 5 y el ODS 11. Teniendo en cuenta las últimas crisis económicas que comenzaron después del inicio de la pandemia de COVID-19 y los recientes desastres climáticos y ambientales en las zonas urbanas, la necesidad de apoyar a los hogares liderados por mujeres y promover el liderazgo femenino es probablemente más alta de lo que jamás habíamos anticipado. Es por ello por lo que la única forma de promover un progreso sostenible y resiliente es apoyando un modelo de desarrollo inclusivo.
Leave a Reply