Las interacciones de calidad son fundamentales para el óptimo desarrollo de los niños y niñas. Pero ¿quiénes son las personas responsables de brindar interacciones de calidad en los centros de atención infantil? ¿Qué las motiva? ¿Cómo apoyarlas a seguir mejorando? Acompáñanos a conocer a Edith, Karla y Verónica, tres profesionales admirables que han sido una pieza clave del Programa Luciérnaga, desarrollado para agentes educativos en centros de atención de niños de 0 a 3 años en México.
Esta iniciativa, impulsada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el BID y el Fondo de Innovación de Desarrollo Infantil Temprano, nace de un estudio riguroso sobre la calidad de los centros de atención infantil en México y busca transformar profundamente este sector. En el corazón de esta evolución en el cuidado, están las interacciones de calidad entre los agentes educativos y los niños.
Conoce a las protagonistas detrás de esta transformación
Edith Solis, con una mirada siempre fresca y más de 25 años de trayectoria profesional en el IMSS, participó entusiasmada en el piloto del programa Luciérnaga del 2022 aunque estaba a tope con su carga laboral. Edith se formó como mentora de Luciérnaga y adaptó su enfoque para mejorar constantemente la calidad de la interacción con los niños, aplicando las prácticas priorizadas promovidas por Luciérnaga en la guardería y apoyando a otras agentes educativas. “Pues dije ‘¡bienvenidas mentorías!’, así empezó la pasión con Luciérnaga aquí en México”.
Karla Góngora se unió al IMSS como oficial de puericultura a los 26 años. Trabajando mano a mano con Edith, su mentora, Karla vio en Luciérnaga la oportunidad de dar forma a una nueva generación de adultos: “Siempre he querido que cuando los niños sean adultos, formen parte de una sociedad diferente. Y el destino me colocó en la guardería con Edith a quien le llega el proyecto piloto de Luciérnaga”.
Verónica Ayala, también con más de 25 años de trayectoria en el IMSS, ha destacado en su rol de directora, entre otras funciones, en centros de atención infantil. Por su enfoque de trabajo, en el que toma conocimientos de la neurociencia, el IMSS la invita a incorporarse al equipo de Luciérnaga. “Cuando me dan a conocer todo el material que ya se tenía pensé ‘¡claro, yo todo esto lo hice, pero de manera empírica!’. Luciérnaga va de la mano con las evidencias de la neurociencia y sistematiza la calidad de las interacciones en 12 prácticas priorizadas”.
Karla, Edith y Verónica ahora son parte del equipo central del IMSS. Participan activamente en el programa, y también están formándose para convertirse en facilitadoras y estar a cargo de la formación de las futuras mentoras: las facilitadoras son actores esenciales para el escalamiento del programa. “Les vamos a enseñar a todas las mentoras cómo hacer las prácticas y cómo transformar su estructura: de un cuadrado, vamos ahora a darle esa forma de corazón, más de sentimientos, más de emociones”, explica Verónica.
El toque especial de Edith, Karla y Verónica: 3 contribuciones clave al Programa Luciérnaga
Edith, Karla y Verónica han sido fundamentales para la efectividad y el alcance del programa, contribuyendo de manera significativa en tres aspectos clave:
1- Construcción de la Caja De Herramientas: A partir de su amplia experiencia en pedagogía infantil y su participación en el piloto de Luciérnaga, brindaron insumos clave para que los materiales sean pertinentes en el contexto y respondan a las necesidades de las agentes educativas.
2- Capacitación de mentoras: Han sido pilares en la implementación actual del programa en 39 centros de prestación indirecta del IMSS, integrándose en el equipo de capacitadores y fortaleciendo las habilidades de las nuevas mentoras.
3- Elaboración del protocolo de la Lista de Chequeo de Interacciones de Calidad (LCIC): Colaboraron en el desarrollo de la LCIC, un instrumento diseñado para medir cómo se implementan las 12 prácticas priorizadas. Además, colaboraron en su administración en 78 guarderías del IMSS, facilitando la consistencia y la precisión en la recolección de datos.
Estas mujeres no solo han fortalecido la base del programa, sino que también han garantizado que los materiales y estrategias de Luciérnaga estén alineados con las realidades del terreno, promoviendo un impacto positivo y duradero en la educación infantil.
Mantente conectado para conocer más de la evolución profesional de Edith, Karla y Verónica y contágiate de su entusiasmo por el Programa Luciérnaga.
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