Cuando asistes a una consulta médica, te planteas preguntas como: ¿cuánto tendré que pagar de mi bolsillo por el servicio? ¿a qué beneficios tengo derecho? ¿la atención que recibo es de buena calidad? ¿puedo acceder a tecnologías de punta para el diagnóstico o tratamiento?
Las respuestas a estas preguntas y los resultados de tu experiencia recorriendo los servicios dependerán de la forma en que el sistema de salud de tu país pone en marcha sus tres funciones fundamentales:
- El financiamiento, que consiste en recaudar, agrupar y distribuir los fondos suficientes para cubrir el tipo y cantidad de servicios sanitarios que cada gobierno brinda a la población.
- La provisión de servicios, cuyo papel es establecer las reglas para que interactúen los componentes de la cadena de prestación (consultorios, centros de salud, hospitales, centros diagnósticos, etc.). Abarca aspectos tales como la definición de la combinación público-privada de prestadores, los esquemas para pagar a los proveedores, la elección por parte del usuario, la regulación del suministro de insumos y medicamentos, los precios y la evaluación y mejora de la calidad de la atención médica.
- La gobernanza, que define los derechos y responsabilidades de los diferentes actores del sistema de salud, establece los mecanismos para vigilar su cumplimiento, y determina los procesos de toma de decisiones para priorizar la asignación de los recursos disponibles.
Nueva encuesta de la OCDE
Los países de América Latina y el Caribe tienen sistemas de salud diversos y, en consecuencia, sus arreglos para realizar las funciones de financiamiento, provisión de servicios y gobernanza responden a sus características particulares. Este es el tema de estudio de la Encuesta de Características de los Sistemas de Salud, realizada en 2018 por el Banco Interamericano de Desarrollo en colaboración con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
La encuesta analiza las características de los sistemas de salud de 21 países de la región e identifica sus diferencias y similitudes con los países miembros de la OCDE en lo referente a las tres funciones. Desde 2008, la OCDE ha realizado esta encuesta en tres ocasiones en sus países miembros y es la primera vez que se aplica en América Latina y el Caribe.
Algunos resultados a destacar
Si volvemos a las preguntas al inicio de esta entrada, ¿qué nos dice la encuesta sobre las características de los sistemas de salud?
- En cuanto al financiamiento público en salud, cuyo objetivo es proteger a las personas financieramente, principalmente a las más vulnerables, en casi todos los países encuestados las personas enfrentan gastos de bolsillo. Sin embargo, al igual que en la OCDE, la mayoría de los países de la región cuentan con mecanismos que protegen a las poblaciones vulnerables de pagos de bolsillo excesivos y gastos de salud catastróficos. Muy a menudo, estos mecanismos incluyen una exención total o parcial de los pagos de bolsillo para personas de bajos ingresos.
- Los beneficios en salud a los que las personas tienen derecho no son homogéneos en los países de la región. Considerando que estos beneficios buscan reducir las inequidades en el acceso, la mayoría de los países cuentan con un paquete básico de servicios. Sin embargo, su amplitud (número de personas cubiertas) y profundidad (número de enfermedades cubiertas) puede variar según si el paquete lo proporciona el sistema nacional público o una o múltiples entidades aseguradoras.
- Por lo menos en dos terceras partes de los países existe legislación sobre calidad de la atención y también hay organizaciones a nivel nacional responsables de asegurar que haya políticas para la calidad de la atención. Pero contraria a la práctica común en los países de la OCDE, en los sistemas de salud de la región existe un uso limitado de incentivos vinculados a la calidad de la atención. El uso de bonificaciones a los proveedores primarios para cumplir metas relacionadas a mejorar la calidad de salud es poco utilizado. Siete países reportan usarlo para incentivar cuidados preventivos y manejo de enfermedades crónicas. Son pocos los países que usan bonificaciones para hospitales que se basan en la experiencia y satisfacción de los pacientes.
- Con respecto al acceso y control del uso de tecnologías de punta, los países están rezagados en comparación con el número creciente de países de la OCDE que utilizan la evaluación de tecnologías de la salud (ETS). La ETS sirve para proporcionar evidencia científica y técnica que guíe las decisiones de cobertura, sobre todo con relación a si un nuevo medicamento debería ser cubierto con financiamiento público. Sin embargo, en sólo cuatro sistemas de salud de la región existe un cuerpo independiente que lleva a cabo ETS y sólo unos pocos países emplean la ETS sistemáticamente para decisiones de cobertura.
¿Por qué importa esta información?
El estudio brinda evidencia valiosa para la definición de políticas de salud y proporciona un nuevo conjunto de indicadores, que pueden ser utilizados para identificar y desarrollar políticas accionables que favorezcan el logro de los objetivos comunes de los sistemas de salud, que son:
- equidad en el financiamiento y el acceso
- protección financiera
- satisfacción de los usuarios
- eficiencia en la prestación de servicios de salud
- sostenibilidad
- calidad de la atención
Con estos indicadores se genera una fuente de información complementaria para identificar áreas de mejoramiento, comparar países y enriquecer futuros trabajos analíticos sobre desempeño de los sistemas de salud, dentro y fuera de la región. Contribuye, además, a reducir las disparidades y mejorar el estado de salud de la población en nuestros países.
¿Qué características tiene tu sistema de salud? Consulta el estudio y comparte la información en la sección de comentarios o menciona a @BIDgente en Twitter.
En mi país, Perú, el sistema de salud se encuentra muy fragmentado y desarticulado. Múltiples prestadores de servicios de salud se encuentran distribuidos en el territorio nacional, algunos estudios realizados por USAID-PRAES, evidencia que el gasto en salud de los “ciudadanos de pie” es muy significativo. Los mecanismos de protección a poblaciones vulnerables tienen muchas restricciones ; por ejemplo referir un paciente del primer nivel de atención a un establecimiento de mayor capacidad resolutiva, requiere un tiempo de espera demasiado prolongado, La propuesta de RIS (Redes Integradas de Salud), se viene implementando en algunos distritos de la capital con la finalidad de coordinar y articular los diferentes componentes del sistema de salud en el territorio.
La atención de medicina pública a los pacientes en los países de américa latina es muy deficiente
Generalizar no es la mejor práctica, hay casos de éxito, Costa Rica por ejemplo. Incluso mejores experiencias que países con mucho mayor inversión del PIB. Mucho que mejorar sí es cierto
Lamentablemente, la “participación social” en salud y particularmente en los sistemas de salud de la mayoría de países latinoamericanos clasificados de bajos o medianos ingresos, sólo se reduce a: 1. el pago de bolsillo por la atención de salud brindada por los servicios públicos desfinanciados por el estado. Esto es reflejo de la agotada, insuficiente e ineficiente capacidad instalada y dotación de recursos diagnósticos y terapéuticos de los servicios públicos estatales 2) la “aceptación” que los usuarios tienen de dichos servicios porque la atención de salud todavía NO ES UN DERECHO sino un privilegio de los que gozan de la capacidad de pago de servicios no gubernamentales. El usuario generalmente de más bajo ingreso lo percibe como un favor del estado y no como un derecho social
En mi pais Costa Rica, los sistemas de salud son muy buenos en todas áreas y especialidades. Sobre todo gran preocupación por la población más vulnerable como lo son los niños, madres adolescentes, adultos mayores y la población con discapacidad y/o presenten algún síndrome. También en llevar saludado calidad a aquellas poblaciones muy alejadas; al menos se busca la forma de ayudarles también.
En mi país, Perú las políticas liberales implementadas han convertido a la salud literalmente en un negocio en el que las grandes corporaciones privadas tienen como único afán obtener un lucro desmedido pese a ofrecer servicios que no garantizan una buena calidad; si a eso se suma la limitada capacidad de la entidad responsable de supervisarlas y fiscalizarlas (Susalud), el resultado es una desprotección de derechos de los usuarios de los servicios de salud; ojalá dicha situación cambie.
El tema no es pensar en curar, en nuestros paises aun se piensa que la inversion de salud tiene que relacion con infraestructura hospitalaria, pero se puede hacer y mucho si aprendemos a prevenir, es ahi donde la inversion puede ser aun mucho mas rentable en paises de economias deprimidas donde cada peso cuenta y no hay lugar a levantar sospechas de negociados con la salud de los ciudadanos, saludos cordiales
En Colombia mi País representes un negocio para instituciones privadas quienes prestan el servicio, precario y deficiente, mejor para el que tiene dinero como pagar o privilegios, apellidos, los menos favorecidos o vulnerables no es un derecho es mendicidad y espera
Muy interesante, me gustaría entender las diferencias entre los países