A medida que aumenta el número de vacunas disponibles y los programas de vacunación en la región toman diferente velocidad, el fin de la pandemia se vislumbra. Desde la división de Energía del BID, hemos estado dando seguimiento el impacto del COVID en los comportamientos y la actividad económica de América Latina y el Caribe y su relación con el servicio de la demanda eléctrica en las empresas de servicios públicos. A medida que la pandemia se hizo más fuerte y se tomaron diferentes medidas, la cantidad de energía vendida en la región disminuyó, con un efecto potencial para las finanzas de los servicios públicos. En este blog, exploramos cómo la pandemia transformó la demanda de electricidad en la región.
Por medio del análisis de estos datos podemos hacer una estimación entre el impacto real de la pandemia y el año base sin pandemia. Con este análisis se identifica que la caída máxima de la demanda en los países analizados fue del 15% con impactos semanales entre 34% y 8% sobre el año base. En los momentos más críticos de la pandemia, durante el mes de abril, países como Perú dejaron de consumir 1 de cada 3 kWh que solían consumir. Desde el pasado año, el BID ha dado seguimiento a este tema y lo hemos documentado a través de una serie de artículos de blog al respecto (1,2,3 y 4).
Con el objetivo de proporcionar una visión comparativa de la dimensión de la reducción de la demanda, que podría causar estos problemas, en la publicación “Impacto del COVID-19 en la demanda de energía eléctrica en Latinoamérica y el Caribe”, hemos elaborado un cálculo de lo que podría haber sido un año normal que cubre los eventos de la primera mitad de la pandemia del año pasado. Estos cálculos se han basado en datos de comportamientos pasados de hasta una década con modelos calibrados según los patrones de consumo y sensibilidades de cada país. Hemos utilizado diferentes variables que generalmente afectan el consumo como patrones semanales, temperatura, feriados, festividades locales y eventos disruptivos de diverso grado como huelgas o desastres naturales.
El camino hacia la recuperación
Este año de referencia permite establecer en comparación una demanda de energía perdida que se puede utilizar para calcular el impacto de la pandemia y el confinamiento en diferentes actividades y dar una mejor respuesta al impactado del COVID-19. Este enfoque ofrece múltiples ventajas sobre comparaciones con años anteriores publicadas hasta ahora ya que estas pueden estar expuestas a eventos localizados y cambios en variables como temperaturas o desastres. Estas desviaciones localizadas de la tendencia habrían sesgado los cálculos y cambiado los resultados de la pérdida de demanda. Además, este documento nos permite mirar hacia el futuro y utilizar las proyecciones del PIB realizadas por el FMI para proyectar diferentes escenarios de recuperación durante el año en curso y ayudar así a planificar la recuperación a medida que cede la pandemia.
Al observar los cambios ocurridos durante el día, el documento identifica cómo Brasil, México, Bolivia, o Chile redujeron su consumo especialmente al mediodía y durante las horas en las que la gente solía volver a casa. Otros como Guatemala experimentaron incrementos durante las primeras horas de la mañana y las últimas horas de la noche y descensos durante la tarde. Estas variaciones en el tiempo de consumo durante el día tienen una implicación importante para el funcionamiento de la red eléctrica y el costo de la electricidad ya que los precios de generación varían con el tiempo de consumo y el mix de generadores que producen electricidad en ese momento. Las energías renovables, por ejemplo, tienden a estar presentes durante las horas soleadas y las horas ventosas de la mañana temprano y al final de la tarde.
Para algunos países los cambios en la carga de la demanda fueron temporales con variaciones muy intensas en las primeras semanas y un rápido retorno a la normalidad, encontramos estos casos en Bolivia y Brasil. Sin embargo, para la mayoría de los demás, los cambios fueron duraderos y se centraron en los días laborales. En el último período analizado, los países se habían acercado a una diferencia más mínima con el año de referencia con una diferencia promedio de 5.3% a medida que habían pasado más meses de la pandemia.
Todos estos cambios se pueden ver a también través del prisma del PIB. El FMI ha pronosticado en su World Economic Outlookcaídas de hasta 19% y 16% en el PIB en los casos de Perú y República Dominicana. Sin embargo, en los países donde se estimó una caída de la demanda, se han visto disminuciones más modestas del PIB con una caída del 3% en el caso de Costa Rica. Es posible que estos efectos en el PIB tarden algún tiempo en recuperarse con el consiguiente impacto duradero en la demanda.
La perspectiva regional presentada en este informe también muestra que los impactos de la pandemia son inherentemente nacionales en sus características. Cada ciudadanía ha reaccionado de una manera particular, potencialmente motivada por el tipo de estructura económica existente en el país, las costumbres de uso del tiempo y el tipo de actividad industrial y servicios que ofrece el país. Con esta información y análisis, el funcionamiento del sistema se puede ajustar mejor para que los precios no varíen mucho y el servicio se brinde de manera efectiva durante este tipo de eventualidades. Señalando la necesidad de sistemas eléctricos adaptables y flexibles que puedan dar respuesta a posibles cambios en la demanda de la población.
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Freddy Coronel Alvarez says
No hay duda que la pandemia nos ha golpeado; pero lo importante no solo es vencerla, superarla y aprovechar la creatividad del talento humano para encontrar soluciones a otros problenas como el cambio climatico. Ese debe ser un foro que BID lo debe hacer para encontrar alternativas para no destruir al planeta mediante la utilizacion de energias renovables y reciclaje de los desechos solidos y liquidos que hoy contaminan los mates y como respuesta la naturaleza responde con pandemias y desastres naturales. HAY QUE CUIDAR EL PLANETA POR SIEMPRE
Adela Castillo says
interesante articulo