Por Cecilia Giambruno, Marcelo Pérez Alfaro, Mariana Marín, Fabrizio Scrollini y Céline Jacquin
El 27 de abril de 2024, tras dos semanas de lluvias intensas en Río Grande del Sur, el colapso de la represa hidroeléctrica 14 de Julio empeoró una situación ya crítica en Porto Alegre. Las inundaciones afectaron a más de 160,000 personas, dañaron cerca de 94,000 viviendas, destruyeron parcial o totalmente unas 420 instalaciones públicas y dejaron más de 1,000 kilómetros de carreteras fuera de servicio. El aeropuerto de Porto Alegre sigue cerrado, y el río Guaíba alcanzó niveles históricos, inundando el centro histórico de la ciudad. Pero esto no fue un caso aislado: en septiembre de 2023, un ciclón ya había cobrado al menos 30 vidas en la región. El cambio climático y el fenómeno de El Niño están intensificando los eventos climáticos extremos en esta zona.
Desde antes de las inundaciones, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Municipio de Porto Alegre se encontraban trabajando juntos con el objetivo de fortalecer la calidad y la resiliencia de la infraestructura social. Ante los nuevos desafíos, el BID unió fuerzas con Humanitarian OpenStreetMap Team (HOT), una organización experta en acción humanitaria y desarrollo comunitario a través del mapeo abierto para la gestión de desastres. Esta alianza buscó recopilar datos geoespaciales de alta calidad para guiar una recuperación rápida y efectiva de la infraestructura social de la ciudad.
Colaboración entre el BID y HOT
Cuando la emergencia cedió paso a los esfuerzos de reconstrucción, se hizo urgente comprender el estado de las infraestructuras educativas, de salud y de servicios sociales, especialmente en las zonas más vulnerables. Con esto en mente, una misión conjunta del BID y HOT visitó Porto Alegre en el mes de junio 2024 para evaluar la situación directamente en el terreno.
Esta misión, liderada por expertos de HOT y un equipo multidisciplinario del Sector Social del BID, se enfocó en identificar y mapear los edificios más afectados, revisar datos previos y cerrar vacíos críticos de información. Para facilitar decisiones rápidas y efectivas, se desarrolló una herramienta en línea para recopilar datos georreferenciados precisos y comparables. Este esfuerzo, se realizó en estrecha colaboración con la Secretaría de Planeamiento y Asuntos Estratégicos de Porto Alegre, además de las Secretarías de Educación, Salud, Asistencia Social y Deportes.
La toma de decisiones temprana es clave para impulsar la recuperación de la infraestructura social. Con este objetivo, los esfuerzos se centraron en crear una herramienta de encuesta en línea que recogiera las diversas necesidades y perspectivas de las comunidades, facilitando una recopilación sistemática de datos. Durante las visitas a terreno en escuelas, hospitales y centros de asistencia social en áreas como Sarandí y el Centro Histórico, se validaron estas herramientas de diagnóstico, se capacitó a funcionarios locales en la recolección de datos y se documentaron los daños mediante material audiovisual. Estas visitas no solo evidenciaron de manera directa los devastadores efectos de las inundaciones, sino que también dejaron al descubierto graves daños estructurales y condiciones insalubres en muchas instalaciones sociales.
Este video en 360° ofrece una mirada al interior de la Escuela Municipal de Educación Infantil Ilha da Pintada, enfocándose en el estado actual de las aulas tras la emergencia. Acompañados por personal militar que ha viajado desde Río de Janeiro para brindar apoyo, exploramos cómo la comunidad escolar se está adaptando y respondiendo a las circunstancias actuales.
El equipo de HOT destacó la importancia de desarrollar metodologías que aprovechen las tecnologías de código abierto, integrándose de manera fluida con los sistemas del gobierno local para ofrecer soluciones de datos adaptables y orientadas a la comunidad. Estas herramientas generan fuentes de datos alternativas, lo que favorece un proceso de recuperación más eficiente y resiliente. Según señalaron: “Pudimos mapear instalaciones en OpenStreetMap y recopilar datos cartográficos, utilizando herramientas como Mapillary para proporcionar imágenes georreferenciadas que documentan el estado de la infraestructura”. Puedes acceder a las 12,216 imágenes tomadas en el terreno por el equipo de HOT a través de este enlace.
Como resultado, se recopiló y organizó de manera sistemática información detallada sobre las instalaciones de infraestructura social afectadas por las inundaciones. Al combinar estos datos con información geoespacial, se obtuvo una visión clara de las características de las instalaciones, la magnitud y naturaleza de los daños, las áreas prioritarias según su gravedad, los costos estimados y el avance de las evaluaciones técnicas y planes de recuperación. Todo este conjunto de datos fue optimizado mediante herramientas de BI, lo que permitió su fácil adopción y uso por parte de los equipos locales.
De los datos a la acción
La información recopilada durante la misión fue crucial para reformular el programa del BID con Porto Alegre. Gracias a los datos georreferenciados de los edificios sociales afectados y las evaluaciones de daños, fue posible llevar a cabo una planificación eficaz, dirigiendo los recursos hacia donde más se necesitaban.
Los esfuerzos colaborativos con los equipos técnicos del Municipio fueron fundamentales para reformular el programa, el cual prioriza abordar las consecuencias de las inundaciones y fortalecer la capacidad de respuesta de los servicios sociales.
Dentro del nuevo programa, el enfoque está en la rehabilitación y mejora de los servicios sociales a través de inversiones en la actualización de infraestructuras y equipamientos para los servicios sociales. Todas las construcciones, ya sean nuevas o rehabilitadas, incorporarán criterios de sostenibilidad ambiental y resiliencia climática, junto con medidas de eficiencia energética, uso responsable del agua, selección adecuada de materiales e instalación de sistemas fotovoltaicos.
Red de Salud: 36 rehabilitaciones y construcciones, junto con el suministro de equipos para los edificios de la red de salud. Programas de salud mental dirigidos a mujeres afectadas por las inundaciones, especialmente madres o jefas de familia, que incluirán sesiones de terapia y grupos de apoyo para equilibrar las demandas profesionales y personales.
Red de Educación Pública: Rehabilitación de 18 centros educativos. 9,600 estudiantes recibirán tutorías, incluidas personas con discapacidades. 6,000 niños tendrán acceso a la educación preescolar.
Red de Protección Social: 23 rehabilitaciones y construcciones de centros de protección social. Programas para 6,000 personas en extrema pobreza y apoyo a personas sin hogar. Construcción de un refugio para futuras emergencias.
Red de Desarrollo Social: Construcción de viviendas para personas mayores cuyas casas fueron más afectadas por las inundaciones y rehabilitación de 3 espacios comunitarios y deportivos. Programas de formación para 6,500 jóvenes y adultos afectados por las inundaciones y con mayor vulnerabilidad social en sectores de alta demanda laboral.
De forma indirecta, más de 1 millón de ciudadanos adultos se beneficiarán al acceder a mejores servicios a través de la plataforma de identificación digital, y aproximadamente 44,000 personas vulnerables recibirán atención más específica e integral gracias a una mejor coordinación e interoperabilidad de los sistemas de información. Además, alrededor de 133,000 personas experimentarán servicios de salud y protección social mejorados debido a la optimización de las redes de atención.
Próximos pasos
A partir de nuestra colaboración inicial centrada en los diagnósticos, los próximos pasos se centrarán en desarrollar un plan de monitoreo para la ejecución de los proyectos de construcción en el marco del programa.
Implementaremos una estrategia colaborativa para supervisar la rehabilitación de las instalaciones, lo que incluirá el lanzamiento de una campaña participativa de monitoreo cartográfico. Nuestro objetivo es involucrar a estudiantes, líderes comunitarios y Youth Mappers en esta iniciativa. Al involucrar a estos grupos, buscamos fomentar la participación comunitaria y garantizar que nuestro enfoque sea inclusivo y sostenible.
En última instancia, esta alianza busca integrar y fortalecer los esfuerzos en gestión de datos y organización para apoyar eficazmente a la población durante este periodo tan desafiante. Esta experiencia resalta la importancia de la colaboración entre la comunidad OSM, HOT y el BID, mostrando cómo una respuesta coordinada en la recuperación de desastres puede aprovechar los datos y la tecnología para generar un impacto duradero en la comunidad.