El compromiso de los cuidadores con la crianza de los niños es vital para el desarrollo de la primera infancia. Cuando los padres u otros cuidadores participan activamente en el aprendizaje de sus hijos, les proporcionan un entorno enriquecedor y de apoyo y participan en interacciones significativas, los niños se benefician en múltiples áreas, incluida la cognitiva, social y emocional. Sin embargo, muchos cuidadores, en particular los de hogares con pocos recursos, pueden tener dificultades para lograr un compromiso óptimo. Factores como la escasez de tiempo, las limitaciones económicas, la falta de acceso a recursos educativos y otras presiones socioeconómicas pueden afectar el compromiso e involucramiento de los cuidadores.
Una encuesta realizada a 62.837 cuidadores de niños en edad preescolar en cuatro países -Colombia, Costa Rica, El Salvador y Perú- reveló que los cuidadores con un nivel socioeconómico (NSE) alto solían disponer de más tiempo. Al mismo tiempo, los que tenían un NSE bajo se enfrentaban a limitaciones de recursos y de tiempo. Los cuidadores de nivel socioeconómico alto invertían más tiempo en actividades de desarrollo infantil y utilizaban con más frecuencia los recursos de aprendizaje proporcionados por los ministerios de Educación que los cuidadores de nivel socioeconómico bajo.
Estas disparidades ponen el foco en la necesidad de desarrollar intervenciones específicas y de apoyo a los cuidadores de NSE bajo, para que se comprometan con la crianza de los niños pequeños. Para entender qué es lo que funciona, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) e Innovation for Poverty Action (IPA) se asociaron con los ministerios de educación de Colombia, Costa Rica, Guatemala, México y Perú.
Una serie de seis ensayos controlados aleatorizados generó evidencia sobre cómo la participación de los cuidadores puede apoyar el desarrollo y el aprendizaje del niño en los años preescolares. Teniendo en cuenta las limitaciones financieras que supone ampliar las intervenciones de participación de los cuidadores, las evaluaciones utilizaron métodos híbridos que combinan interacciones en persona y a distancia o enfoques totalmente a distancia.
Jugando Aprendo: El aprendizaje basado en el juego en México
En 2021, el Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE), organismo descentralizado del Ministerio de Educación de México, incorporó Jugando Aprendo a sus Unidades de Atención Educativa Temprana en el estado de Morelos, donde el 59,4% de los niños viven en la pobreza. A través de actividades lúdicas de aprendizaje entre cuidadores y niños, Jugando Aprendo incentiva el desarrollo de habilidades de aprendizaje, emocionales y cognitivas de niños de 0 a 4 años.
Durante un periodo de 12 semanas, los educadores del CONAFE proporcionaron orientación semanal por teléfono y sesiones presenciales a 480 familias del grupo de tratamiento. Las actividades basadas en el juego diferían según el grupo de edad y se centraban en cuatro áreas principales: cuidado personal, habilidades de pensamiento matemático, conocimiento del entorno y desarrollo socioemocional.
Los resultados experimentales muestran que el conocimiento del aprendizaje basado en el juego aumentó en 1,2 desviaciones estándar, junto con un aumento de la práctica basada en el juego de 0,5 desviaciones estándar, en los educadores en comparación con sus compañeros del grupo de control. Los autores también encuentran un impacto positivo en la inversión de los cuidadores, ya que los cuidadores del grupo de tratamiento tienen un Indicador de Cuidado Familiar (FCI) que es 0,13 desviaciones estándar superior al del grupo de control. Al desglosar el índice, el estudio constata que el grupo de tratamiento realiza las siguientes actividades con más frecuencia: leer libros/mirar dibujos (0,12 desviaciones estándar), cantar canciones (0,11 desviaciones estándar) y jugar con juguetes (0,17 desviaciones estándar).
Más información: Formación híbrida de los padres para fomentar el desarrollo de la primera infancia basado en el juego: pruebas experimentales en México (en inglés).
Mentalidad de crecimiento en El Salvador
La mentalidad se define por las creencias individuales sobre la inteligencia, la personalidad y los talentos. Da forma a las perspectivas sociales de cada uno, determina las reacciones en diferentes situaciones, influye en la motivación y afecta a la manera de afrontar los reveses y los fracasos.
Las personas con una mentalidad de crecimiento tienden a atribuir sus errores a la falta de esfuerzo y tratan de aprender de estas experiencias. Las personas con una mentalidad fija atribuyen sus fracasos a una falta de habilidades. Una mentalidad de crecimiento vincula la resolución de conflictos y la propensión a resolver problemas cuando se enfrentan a un reto, así como una mayor autorregulación y adaptabilidad social. Esto lleva a mayores niveles de resiliencia, mayor rendimiento académico, mayor autoestima y salud mental y menores niveles de conductas de riesgo y delincuencia.
Mientras que la literatura en contextos de países de altos recursos muestra que los resultados de los niños pueden mejorar cambiando las creencias mentales de los cuidadores, la investigación aún tiene que investigar el desarrollo de la mentalidad de crecimiento en los niños de los países en desarrollo.
El proyecto Growth Mindset en El Salvador evalúa la transmisión de actitudes mentales entre cuidadores y niños. Emplea varias herramientas: en una visita inicial, los cuidadores de niños en edad preescolar vieron vídeos en los que se discutían las diferencias entre la teoría de la mentalidad de crecimiento y la fija. Tras la visita, recibieron entre cuatro y cinco meses de reuniones quincenales a cargo de educadores comunitarios del Ministerio de Educación, en las que se utilizó un plan de estudios sobre la teoría de la mentalidad, así como empujones (en inglés: nudges) a través de mensajes de texto. Los cuidadores del grupo de tratamiento ampliaron sus actitudes de mentalidad de crecimiento en 0,22 desviaciones estándar en comparación con sus compañeros del grupo de control. Los niños mejoraron sus expectativas para completar una tarea en 0,02 desviaciones estándar en comparación con los preescolares del grupo de control.
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Nudges a través de mensajes de texto para cuidadores en Costa Rica y Guatemala
Una amplia bibliografía sugiere que los cuidadores pueden tener dificultades para invertir en el desarrollo de sus hijos pequeños, y esto puede deberse a dos factores principales. En primer lugar, muchos cuidadores, especialmente los de entornos desfavorecidos, pueden carecer de acceso a información vital sobre la importancia de las inversiones en la primera infancia y las actividades específicas que promueven un desarrollo óptimo. En segundo lugar, los prejuicios conductuales pueden influir en la toma de decisiones de los cuidadores, lo que conduce a una inversión subóptima en los niños pequeños. Es crucial proporcionar a los cuidadores información accesible y completa sobre los beneficios de las inversiones en la primera infancia y las prácticas basadas en pruebas.
En respuesta a este reto, los ministerios de educación de Costa Rica (MEP) y Guatemala (MINEDUC), IPA y el BID unieron sus fuerzas en un proyecto piloto regional de economía conductual. Los cuidadores recibieron un conjunto de mensajes de texto que combinan educación sobre la crianza positiva y salud familiar con actividades de aprendizaje de matemáticas y lengua para los niños.
Los resultados muestran una mejora de entre 0,11 y 0,12 desviaciones estándar en las capacidades cognitivas de los alumnos cuyos cuidadores fueron asignados a la campaña de mensajes de texto. El efecto se explica principalmente por la mejora de las habilidades numéricas tempranas.
Los cuidadores aumentaron en 0,39 desviaciones estándar el número de actividades que realizaban con sus hijos propuestas por los mensajes de texto. También declararon una mayor probabilidad de complementar los programas de educación a distancia con actividades adicionales.
En consonancia con la mejora de las habilidades cognitivas de los alumnos, los cuidadores eran más propensos a actualizar sus creencias sobre las habilidades de sus hijos. No encontramos pruebas de que los cuidadores aumentaran su capacidad percibida para guiar el proceso de aprendizaje de sus alumnos o su autoeficacia.
Estos resultados sugieren que el efecto se debió a un mayor involucramiento de los cuidadores a través de las actividades propuestas en la campaña de mensajes de texto. Los mensajes sólo fueron eficaces cuando las escuelas estaban cerradas y la educación se impartía a distancia, sin efectos en entornos escolares híbridos o presenciales. Los efectos a corto plazo son convincentes, dado que la intervención sólo duró 15 semanas.
Más información: Mejorar los resultados del desarrollo de la primera infancia en tiempos de COVID-19: Pruebas experimentales sobre redes parentales y mensajes SMS (en inglés)
Think Equal: Coaching a cuidadores para fomentar el aprendizaje socioemocional en Colombia
En todo el mundo, muchos niños no alcanzan sus hitos de aprendizaje socioemocional. Esta realidad está vinculada a un peor rendimiento académico, mayores riesgos de abandono escolar y problemas con el desarrollo de relaciones significativas.
Para apoyar el aprendizaje socioemocional de los preescolares, el BID, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la Fundación Escuela Nueva e IPA se unieron para llevar el modelo Think Equal a 1.800 preescolares colombianos de zonas vulnerables. El plan de estudios se estructura en torno a una amplia biblioteca de libros infantiles sobre 36 áreas temáticas que van desde la celebración de la diversidad a la empatía y la igualdad de género. Para enseñar a los preescolares a nombrar y medir sus sentimientos, el modelo utiliza un Medidor de Estado de Ánimo que ayuda a los niños a identificar sus emociones por colores. Cuando la emoción es “roja”, es hora de calmarse hasta que el Medidor de Estado de Ánimo se vuelve “verde” y “feliz”.
Se trató de un modelo de atención combinada con el aprendizaje en el centro y en casa, y se desarrolló un chatbot para facilitar la comunicación entre los centros comunitarios y las familias. Los preescolares del grupo de tratamiento mejoraron su autoconciencia (0,14 desviaciones estándar) y su comportamiento prosocial (0,13 desviaciones estándar) en comparación con un niño de control.
Te puede interesar: Aprendizaje socioemocional en educación infantil: Evidencia experimental de la implementación del programa Piensa Igual en Colombia (en inglés)
Matewasi: impulsando a los cuidadores de Perú con radio interactiva
Cuando los centros preescolares cerraron durante la pandemia, al Ministerio de Educación de Perú (MINEDU) le preocupaba que los alumnos no estuvieran preparados para el primer grado. Durante las vacaciones de verano de 2021 (de enero a marzo), el MINEDU, el BID e IPA diseñaron y evaluaron un programa llamado MateWasi, que ofrecía cuarenta lecciones de 15 minutos emitidas por la radio pública a lo largo de un periodo de 10 semanas durante las vacaciones de verano a alumnos de primer curso. Reforzados por instructores educativos, los cuidadores recibieron orientación y estímulo para realizar actividades destinadas a acelerar el desarrollo de las habilidades matemáticas básicas.
El programa no abarcaba todo el plan de estudios de matemáticas de preescolar, sino que se centraba en los conceptos clave para la preparación del dominio de los contenidos y el desarrollo de las destrezas de los próximos cursos. Entre ellos se incluyen la correspondencia uno a uno (es decir, la capacidad de contar objetos), el sentido numérico, las habilidades de razonamiento espacial, la clasificación y la seriación, los patrones, las comparaciones, la medición, las partes y los enteros, los números y los símbolos, los gráficos, el lenguaje matemático, el razonamiento matemático y la resolución de problemas.
La intervención mejoró los resultados cognitivos en matemáticas en 0,12 desviaciones estándar. Además, demostró que los entrenadores a distancia aumentan la probabilidad y la frecuencia de participación de los cuidadores en actividades relacionadas con las matemáticas. Esto sugiere que las mejoras en el aprendizaje se deben a una mayor implicación de los cuidadores en el desarrollo de las habilidades del niño.
¿Cuán vital es la participación activa de los cuidadores en la configuración de los resultados de los niños? ¡Deja tu comentario abajo!
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