“Mi hijo vino aquí sin poder hablar. No hablaba, no compartía. Fue un cambio total. Hoy es un niño abierto, alegre, divertido”, nos cuenta emocionada Alexandra. Ella es una de las madres que cada mañana lleva a su hijo al Centro de Desarrollo Infantil (CDI) de Ibarra, en Ecuador, un servicio gratuito que es de gran ayuda para la crianza y el desarrollo de su hijo.
El juego y la interacción de los niños con el entorno físico y social son fundamentales en su desarrollo integral, abarcando aspectos físicos, cognitivos, socioemocionales y de comunicación. Es en este sentido que en Ecuador se está trabajando en el programa “Inversión en calidad de los servicios de desarrollo infantil“, con el objetivo de elevar la calidad y la gestión de los CDI y del servicio de acompañamiento familiar Creciendo con Nuestros Hijos (CNH) –administrados por el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) y que atienden a unos 300 mil niños y niñas de 0 a 3 años en todo el país.
Dos pilares fundamentales para mejorar la calidad de los servicios
El programa se estructura a partir de dos pilares fundamentales.
El primer pilar busca diseñar e implementar un modelo de gestión de los servicios de primera infancia a partir de un análisis integral en torno a 3 ejes:
- la metodología de prestación y seguimiento de servicios;
- los recursos humanos y la gestión administrativa;
- y la promoción de un ambiente seguro para niños, sus familias y el personal del servicio.
El objetivo es establecer los requerimientos específicos para las mejoras de la gestión de los servicios con base en una lógica sistémica e intersectorial, a su distribución territorial actual y a la diversidad étnica de cada región, entre otras particularidades.
Esto implicará un examen exhaustivo de las atenciones que ofrecen los CDI y CNH, tomando en consideración las normas técnicas existentes, así como procesos participativos con actores a nivel nacional y local. Los principales beneficiarios de este programa serán los niños y sus familias, así como los municipios y las organizaciones que cooperan con MIES para la provisión de los servicios.
Ejes principales del esquema de gestión territorial
El segundo pilar abarca la mejora de la calidad de los CDIs por medio del fortalecimiento de la calidad de la interacción educadora-niño a través de un proceso de capacitación y acompañamiento continuo de coordinadoras y educadoras vía mentorías y basado enuna adaptación del Programa “Luciérnaga”.
La implementación del Programa descansará en una estrategia de capacitación en cascada con 4 niveles estructurados: Equipo Central y Capacitadoras, Formadoras, Mentoras (Coordinadoras CDI) y Educadoras CDI. En cada nivel se capacitará a los actores relevantes en función de su rol.
Luisa Loyo es una de las educadoras que cumple esta importante labor de enseñanza y cuidado en un CDI. “Me siento muy feliz con mi trabajo. Ayudar a un niño a adquirir destreza en sus manos, a caminar, hace que uno se sienta bien y la familia se sienta también feliz de ver a su niño en desarrollo”, nos comenta orgullosa.
Se espera que ambos pilares del programa puedan desarrollarse próximamente dado que se complementan entre sí y garantizan un desarrollo integral y de calidad para los niños y niñas ecuatorianos. Mientras que el primer pilar establece las bases de una gestión eficiente y adaptada a la diversidad territorial, el segundo se enfoca en el fortalecimiento de las habilidades y capacidades del personal encargado de la atención directa para promover el desarrollo infantil. Esto impactará en los niños y familias, y también en las educadoras, quienes se sienten satisfechas de ver el crecimiento de los niños que acompañan.
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