En 2017, el turismo generó más del 10% del PIB, 1 de cada 10 empleos, 6,5% de las exportaciones, y 4,5% de la inversión mundial.
Ese mismo año, América Latina y el Caribe recibió más de 114 millones de visitantes internacionales. Sin embargo, la cuota de mercado de LAC a nivel mundial sigue siendo baja, similar a la que tenía hace diez años (más o menos un 8%).
Dado el potencial turístico de la región, y las perspectivas de crecimiento del sector, resultaría crucial que los gobiernos de LAC reforzasen su apuesta por el turismo, e impulsaran su desarrollo de manera sostenible. A continuación, les compartimos algunas razones que creemos refuerzan la importancia de esta apuesta:
- El turismo es un sólido motor de crecimiento. El turismo es un importante motor del desarrollo, en especial en el caso de países emergentes. El sector dinamiza el crecimiento mediante la generación de ingresos, empleo, inversión y exportaciones. Más allá de su importante impacto directo, por cada $ gastado en turismo, se generan en promedio 2,2$ adicionales, es decir, el efecto multiplicador del turismo es sustancial y superior al promedio. Asimismo, el sector ha demostrado ser resiliente a choques externos, habiéndose recuperado rápidamente del impacto de la crisis financiera internacional. En 2017, por séptimo año consecutivo, el sector creció por encima del promedio global, registrando un crecimiento del 4,6% (casi el doble del crecimiento del sector financiero).
- El turismo es un empleador nato. En 2018 se estima que más de 320 millones de empleos dependerán de la actividad turística. A lo largo de los últimos 10 años, uno de cada cinco empleos creados en el mundo ha sido generado por el sector turismo y, con las condiciones reglamentarias y el apoyo gubernamental indicados, se espera que durante la próxima década el sector genere cerca de 100 millones puestos de trabajo adicionales.
- El turismo contribuye a la reducción de pobreza y la inequidad. Diversos estudios han mostrado como el desarrollo adecuadamente planificado del sector contribuye, mucho más que otros sectores, a la reducción de la pobreza y la pobreza extrema, así como a la reducción de las inequidades a nivel sociodemográfico y territorial.
- El turismo es una de las principales categorías de exportación a nivel mundial. El turismo, como categoría de exportación, ocupó el tercer puesto a nivel mundial en 2016, solo por detrás de lo productos químicos y de combustibles, y por delante de los sectores automotriz y de la alimentación. El sector turismo representa un 30% del total de las exportaciones mundiales de servicios. La relevancia del sector en la canasta exportadora es especialmente pronunciada en los países en vías de desarrollo. Por ejemplo, el turismo representa el 75% o más de las exportaciones de servicios para 15 de los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo, y más del 50% en los otros 13.
- El turismo es un sector innovador. Si hay un sector que se ha visto afectado por la revolución tecnológica, es el turismo. En turismo, hay simultaneidad de producción y consumo, y el consumidor (la demanda) se desplaza al lugar de producción (oferta). Este hecho ha supuesto una revolución en materia de distribución del producto, impulsando la innovación y la creación de empresas tecnológicamente punteras (desde los GDS, a las agencias de viajes en línea, los metabuscadores, etc..), así como la aparición de nuevos conceptos y actores (por ejemplo, de los actores de la economía compartida). En paralelo, el Big Data ha brindado importantes oportunidades para el diseño de marcos de política más eficientes y efectivos, para mejorar la gestión de los recursos naturales y culturales, o perfeccionar las experiencias de viaje. Un ejemplo de ello son las aplicaciones móviles que capturan datos en tiempo real sobre los recorridos de los turistas.
No obstante, para maximizar los impactos positivos del turismo, y aprovechar su potencialidad, resulta crucial la priorización del sector en las agendas de política pública, siendo clave orientar la acción público-privada hacia el progreso de un turismo inclusivo y sostenible.
La priorización del turismo en las agendas de desarrollo de los gobiernos es especialmente relevante en el caso del turismo de naturaleza y cultural, predominantes en LAC. Si el desarrollo del sector no se hace de una manera planificada, estratégicamente adecuada, poniendo el foco en preservar los recursos naturales y culturales del destino, el impacto no solo no alcanzará su potencial máximo, sino que podría ser negativo e irreversible.
Si a esto le añadimos el potencial impacto del cambio climático, y la exponencial transformación tecnológica, está claro que, hoy más que nunca, necesitamos pensar bien las estrategias en materia turística, transversalizarlas y dotarlas de los recursos que requieren.
Hoy más que nunca necesitamos #turismosostenible.
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