En este episodio de nuestro podcast Hablemos de Seguridad, Karelia Villa, Camila Mejia y Barbara Cedillo analizan el fenómeno de la violencia intergeneracional e intrafamiliar, su impacto en la reproducción de la violencia y posibles soluciones para frenar el ciclo de violencia. Puedes inscribirte a Hablemos de Seguridad en nuestra página de Soundcloud. Aquí hemos reproducido la conversación con algunas ediciones para facilitar su lectura.
Hola y bienvenidos a nuestro podcast “Hablemos de Seguridad”, un espacio del Banco Interamericano de Desarrollo donde discutimos los retos y las oportunidades para mejorar la seguridad ciudadana y la justicia en América Latina y el Caribe
Hoy conversamos con 3 expertas en materia de Seguridad Ciudadana y Justicia sobre un tema crucial: la transmisión intergeneracional de la violencia. Nuestras expertas Karelia Villa, Camila Mejía y Bárbara Cedillo estarán compartiendo análisis y casos de éxito para frenar el ciclo de violencia que se repite de generación en generación. Para abrir la conversación empecemos hablando sobre la violencia en jóvenes.
¿Cuáles son los factores de riesgo que están asociados con la participación de jóvenes en la delincuencia?
Muchas gracias, Camila. Me queda la duda si estos factores de riesgo se pueden categorizar de alguna manera.
Muy interesante el tema de los factores de riesgos. Para recapitular, ¿Ustedes consideran que es más probable que un adulto exponga comportamientos violentos si este ha sido expuesto a comportamientos violentos previamente durante su vida, incluso en casa?
Es muy interesante, escucharlas hablar sobre la violencia entre pareja, me pregunto, ¿Cómo afecta la violencia entre pareja a menores que hayan presenciado este tipo de violencia?
en el hogar. Por supuesto, yo diría que este es un tema muy importante de abordar porque los efectos de la deserción escolar, digamos otras consecuencias de la violencia doméstica en los niños entran a jugar un papel muy importante como ya mencionamos en el aumento de sus factores de riesgo para convertirse tanto en perpetradores como víctimas de crimen y violencia. Y finalmente estos hallazgos, digamos que la literatura en general apunta a indicar con más fuerza, el hecho de que la violencia entre parejas tiene implicaciones muy importantes de largo plazo en el bienestar de los niños.
Sería bueno, si pudiéramos conversar un poco más sobre el impacto de la violencia intrafamiliar. ¿Acaso este tipo de violencia marca patrones que se repiten de generación en generación?
Muchas gracias, Bárbara de prestar mucha atención. En la coyuntura actual que vivimos y aplicando estos patrones a la realidad de hoy, ¿Cuál es el panorama de la violencia intrafamiliar que enfrenta nuestra región en estos tiempos de COVID que nos ha tocado vivir?
fuertemente a los países de la región. De acuerdo con la ONU, 1 de cada 3 mujeres es víctima de violencia por parte de su pareja en América Latina y el Caribe, y de acuerdo con UNICEF, 1 de cada 2 dos menores de 15 años es sometido a castigo corporal en el hogar.
Muchas gracias, Bárbara. La verdad son unos datos muy preocupantes. Hablando de situaciones donde el hogar no es el lugar seguro que debería ser, ¿cuál es la evidencia que tenemos sobre la transmisión intergeneracional de la violencia intrafamiliar?
estudio, que les mencionó, planteó si existe un componente importante de transmisión de la violencia de generación en generación que resulta significativo, incluso una vez controlando los otros factores de riesgo. Para realizar esta medición, partimos de una encuesta que se aplicó de igual manera a padres e hijos en el mismo hogar, de tal manera que fuéramos capaces de medir la violencia a la que estuvieron expuestas ambas generaciones. Dentro de los principales hallazgos que generó este estudio están que: la violencia observada o sufrida anteriormente por los jóvenes en el contexto familiar, está significativamente asociada a la violencia actual que experimentan, y son mejores predictores de otros factores de riesgo a los que están expuestos estos jóvenes, como los factores individuales familiares o de contexto comunitario. Se encontró una asociación entre haber sufrido u observado violencia durante la niñez y la propensión a desarrollar actitudes y comportamientos violentos durante la juventud. Por ejemplo: Los jóvenes que crecieron en hogares en donde el padre le pegaba a la madre en comparación con jóvenes que no observan estas conductas, tienen una mayor probabilidad en 39 puntos porcentuales más, de ser violentados por su pareja, o una probabilidad en 36 puntos porcentuales más, de ser ellos los perpetradores. Los jóvenes con familiares, por ejemplo, que han estado en prisión presentan una mayor probabilidad de terminar en la cárcel. La correlación resulta significativa solamente para el caso de los hombres, con una probabilidad de 10 puntos porcentuales por encima respecto a los jóvenes que no tienen familiares en prisión. Las mujeres tienen menor probabilidad de ingresar a prisión, aun cuando cuenten con familiares en prisión, y de estar involucradas con armas o peleas, pero presentan una mayor probabilidad de ser violentadas por su pareja. Y cuando se comparan los resultados en cuanto a la probabilidad de ejercer violencia contra la pareja, llama la atención en este estudio que resulta mayor la que se ejerce de mujer a hombre, es decir, la mujer se presenta como víctima y también como victimaria al ejercer violencia. Una posible explicación que encontramos en este estudio es que hay un subregistro por parte de los hombres al responder estas preguntas de la encuesta. Y la conducta más consistentemente asociada a ejercer varios tipos de violencia, fue el consumo de alcohol, o de alguna cuestión de estupefacientes. Todos los análisis mostraron que ingerir estas sustancias están asociadas a una mayor probabilidad de presentar conductas violentas.
Gracias Karelia. Precisamente tú comentabas sobre el tema del súbreporte. Sabemos que hay muchos delitos que existen y se perpetúan en una profunda invisibilidad porque hay un grave problema de carencia de denuncias. ¿Cómo medir el delito de violencia intrafamiliar siendo este uno de los delitos con mayor subreporte?
Muy interesante Bárbara. Muchas gracias por compartir los detalles de este estudio. Quizás para cerrar, sería interesante conversar sobre las políticas públicas que consideramos que son más efectivas para combatir, prevenir y atender la violencia intrafamiliar y parar el ciclo de la transmisión intergeneracional de la violencia.
de México, a través de una experiencia piloto y adaptada a la realidad local junto con la organización social Cauce Ciudadano. La variante de este modelo fue incluir, además de los interruptores de violencia a los facilitadores comunitarios a cargo de orientar a la comunidad sobre el acceso a servicios, programas sociales, educativos, de salud y de atención a víctimas, sobre todo en casos de violencia intrafamiliar. Como resultado de la intervención, en el 64% de los casos intervenidos se logró sostener el resultado, y modificar la conducta violenta permanentemente. Finalmente, para que los programas de prevención de violencia obtengan resultados, es clave definir los criterios de selección de los beneficiarios y el nivel de prevención perseguido, a fin de establecer las características del beneficiario de acuerdo con su perfil de riesgo y potenciar el impacto de estos programas y el uso eficiente de los
recursos disponibles.
Muchas gracias a nuestras expertas invitadas a hablar de este importante tema. Eso es todo por hoy. Gracias por unirse a esta conversación. Si desean saber más, los invitamos a visitar nuestro blog www.iadb.org/sinmiedos ¡Hasta pronto!
Igor Fidel Roji López Dice
Me interesaría saber si pueden venir a Orizaba a dar una conferencia sobre el tema de Violencia Familiar y apoyar en las políticas públicas para prevenirla.
Alexis Sánchez Vega. Dice
El tema desarrollado es interesante y además complejo de atender desde el contexto de la seguridad ciudadana. La violencia es una condición que ha invadido casi todos los espacios sociales, como la familia, la comunidad y a la sociedad en general, algunos autores e investigadores del tema, achacan una gran responsabilidad de este fenómeno a las condiciones de discriminación que a nivel general tienen algunos segmentos de la sociedad en cuanto a participación de los beneficios de ésta. Hablamos entonces de oportunidades para el desarrollo integral de la persona.
La violencia o las violencias, se han transformado en un medio catalizador de frustraciones y de incompetencias de un segmento de la población que se ha visto atomizada por las premisas de éxito del mercado. La respuesta ha éste fenómeno social es compleja, dado que desde mi punto de vista implicaría un cambio en las relaciones de producción, así como una nueva narrativa política y social alrededor de conceptos como éxito y logro social.
En tanto estos cambios no se logren, es pertinente como lo mencionan las expertas fomentar espacios comunitarios que permitan evaluar la situación en la que la violencia tiene éxito, e implementar mecanismos de restauración, mediación o negociación que permitan que las partes afectadas en problema social logren generar empatía y de alguna manera una respuesta que promueva la concordia social.
MARIA DEL ROSARIO GIL Dice
excelente articulo, gracias. Aca en Uruguay la delincuencia juvenil, sobre todo relacionada con la droga, esta cada vez peor, ya no importa matar por nada, la vida para ellos no vale nada.-
Adelante
Maria del Rosario