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Más de 1.000 millones de personas en todo el mundo tienen uno o más tipos de discapacidad. La forma en la que están diseñadas la mayoría de las ciudades, hace que sus necesidades especiales les impidan participar plenamente de ellas. En el blog de hoy, y coincidiendo con la celebración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad (PCD), queremos poner de manifiesto la importancia de tener en cuenta las necesidades de toda la población a la hora de diseñar políticas y espacios públicos en nuestra región.
La importancia de diseñar espacios inclusivos y accesibles para todos
Como consecuencia de las limitaciones existentes en nuestras ciudades, las PCD pueden llegar a experimentar dificultades en el acceso al empleo, o a servicios como la salud y la educación. Esta falta de accesibilidad produce un círculo vicioso que se traduce en que las PCD tengan el doble de posibilidades de vivir en la pobreza. Este nivel de exclusión no es solo una violación de los derechos humanos básicos; también es una oportunidad perdida de prosperidad social.
Históricamente, la discapacidad estaba relacionada únicamente con las dificultades de las personas para ver, oír o caminar sin necesitar ayuda. Sin embargo, cada vez más, la sociedad está tomando conciencia de que la forma en que diseñamos nuestro entorno, afecta al grado en que las PCD puedan participar plenamente de nuestras ciudades. El objetivo no es crear programas y espacios burbuja que solo sirvan a personas con discapacidad, sino ciudades inclusivas que sirvan a todos. Para ello, debemos seguir avanzando en la forma en que diseñamos programas, alejándonos de abordar únicamente la exclusión y focalizando nuestro esfuerzo en conseguir una inclusión transversal.
Diseño universal: acceso para el mayor número de personas posible
El diseño universal tiene como objetivo proporcionar acceso para el mayor número de personas posible, sin la necesidad de adaptarlos o rediseñarlos de una forma especial. Este tipo de diseño permite que las PCD vean cómo se satisfacen sus necesidades de acceso a la ciudad.
Pero ¿en qué consiste la accesibilidad?: la accesibilidad es una característica de los espacios, que permite a todas las personas participar en las actividades, independientemente de su capacidad o habilidades individuales. También significa asegurarse que las personas tengan una vivienda adecuada con equipamiento diverso e inclusivo cuando sea necesario. Para lograr ciudades accesibles, es necesario incorporar a la mayor cantidad posible de personas en los procesos y programas para que todos podamos tener tantas oportunidades como sea posible, y conseguir realizarnos como individuos.
¿Cómo podemos conseguir ciudades inclusivas en América Latina y el Caribe?
Para lograr diseñar ciudades inclusivas, debemos asegurarnos de contar con un marco ético sólido que nos permita actuar de manera coherente con el principio de accesibilidad. Así mismo, estos fundamentos deben hacer posible que las ciudades funcionen bien en términos de gestión territorial, vivienda, servicios públicos básicos y uso del espacio público. También resulta necesario que el marco ético de referencia esté alineado con los principios de las Naciones Unidas y su Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CRPD), así como con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, especialmente el número 11. El ODS 11 proporciona unos fundamentos poderosos para orientar a las comunidades locales hacia el logro del desarrollo inclusivo de la discapacidad. La campaña Ciudades Para Todos, lanzada el 3 de diciembre de 2018, alinea estos tres marcos internacionales e involucra a una amplia gama de partes interesadas para ayudarnos a incentivar y transformar 100 ciudades para que sean más inclusivas, accesibles y resilientes para 2030.
El BID, a través de su Visión 2025, busca favorecer el progreso social promoviendo el acceso universal a servicios públicos de buena calidad, y la cobertura de necesidades básicas y vivienda para todos, incluyendo personas con discapacidad, migrantes, indígenas, afrodescendientes, personas LGBTQ +, entre otros. históricamente excluido. En Ecuador, por ejemplo, el proyecto del BID “Soluciones habitacionales para hogares pobres y vulnerables” que se lleva a cabo junto con el Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano, busca reducir el déficit habitacional mediante la implementación de tarifas preferenciales y criterios de priorización para mujeres jefas de hogar y familias con miembros con discapacidades.
San José y Curitiba: ejemplo de participación inclusiva e innovación urbana en la región
La participación inclusiva y la innovación dentro de las ciudades son fundamentales para construir ciudades que escuchen las necesidades de todos. A continuación, presentamos dos buenas prácticas llevadas a cabo por ciudades de América Latina:
San José, Costa Rica:
En la capital de Costa Rica se creó una nueva oficina dedicada específicamente a atender el cumplimiento de la legislación promulgada para defender los derechos de las PCD. En ese marco de igualdad de derechos, seis veces al año se llevan a cabo actividades y campañas de sensibilización a lo largo e la ciudad. A este respecto, Yolanda Villalta Suazo, Responsable de Procesos de Accesibilidad, Gestión de Operaciones Municipales y Desarrollo Urbano de la Ciudad de San José declara: “ofrecemos charlas de sensibilización en escuelas y otros lugares porque pensamos que desde temprana edad las personas deben entender que las personas con discapacidad deben estar integradas a la sociedad”.
Curitiba, Brasil:
En Curitiba, la innovación inclusiva ha sido una parte importante para hacer que la ciudad sea accesibles para todos. Para conseguir este fin, se ha ayudado de varias startups. Una de ellas es Ploy, la cual ofrece productos diseñados para mejorar la seguridad, la protección, la comodidad y la autonomía de los usuarios de sillas de ruedas. La línea de productos incluye un dispositivo que se puede acoplar a una silla de ruedas estándar para reducir los riesgos y mejorar el acceso en las calles, lo que da como resultado una mayor libertad de movimientos.

Otra iniciativa incluye la aplicación para teléfonos inteligentes: LookforMe. A través de ella, los estudiantes con discapacidad pueden obtener ayuda en los entornos de aprendizaje. Utiliza Inteligencia Artificial para procesar la información y el contenido que brindan los profesores. Por ejemplo, la escritura a mano se puede convertir en texto para ayudar a las personas con discapacidad visual. Otras opciones incluyen funciones para discapacidades auditivas, motoras y cognitivas.

La accesibilidad se abre camino en las ciudades de América y Latina y el Caribe
A medida que las ciudades crecen en tamaño y complejidad, debemos pensar más en cómo se construyen y quién va a vivir en ellas. La necesidad de construir ciudades inclusivas y accesibles para todos debería ser una prioridad. La accesibilidad es la clave de las ciudades inclusivas.
Para apoyar los esfuerzos de las ciudades, el BID ha publicado una monografía (que se puede descargar aquí) que ofrece nueve estudios de casos reales sobre cómo las ciudades están apoyando la inclusión de personas con discapacidad de manera proactiva. Esta publicación busca concienciar para que la inclusión sea tomada en cuenta desde las primeras etapas de la planificación del proyecto, a través de la participación de diferentes grupos sociales, eliminación de barreras físicas y sociales, así como campañas de concientización, entre otras actividades.

Te invitamos a compartir con nosotros las iniciativas que ha implementado su ciudad eliminando obstáculos ambientales y favoreciendo el acceso y disfrute de los espacios públicos. No dudes en escribirnos en la sección de comentarios, ¡estaremos encantados de aprender de tu ciudad!
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