En América Latina y el Caribe, 1 de cada 7 personas tiene una discapacidad. Evidentemente, tener una discapacidad no es fuera de lo común. Más bien, tener discapacidad es parte de la diversidad humana. Por ende, al igual que con características como la raza o el género, la discapacidad no debería ser motivo de exclusión. Los gobiernos de la región deberían saber cómo asegurar la inclusión económica y social de personas con discapacidad, para que participen en iguales condiciones que sus pares sin discapacidad.
Sin embargo, todavía persisten mitos y nociones incorrectas sobre este tema. A su vez, estas concepciones erróneas pueden llevar al diseño de políticas y programas ineficaces. Por esta razón, hemos resumido la evidencia sobre qué funciona para promover la inclusión de personas con discapacidad en nuestra última publicación.
En este blog te invitamos a que pongas a prueba cuánto sabes sobre cómo promover la inclusión de personas con discapacidad. Mira si consideras que las siguientes declaraciones son verdaderas o falsas.
- Los niños con discapacidad no van a la escuela a los mismos niveles que sus pares sin discapacidad.
- Los niños con discapacidad aprenden más y mejor cuando estudian solamente con otros niños con discapacidad.
- La discriminación y el prejuicio en contra de personas con discapacidad en el espacio laboral es algo del pasado.
- Las cuotas de empleo siempre funcionan para promover el empleo de personas con discapacidad.
- Las transferencias monetarias para personas con discapacidad desincentivan el trabajo, y por ende, no deberían ser promovidas.
A continuación, te contamos las respuestas correctas y sus explicaciones.
Los niños y jóvenes con discapacidad no van a la escuela a los mismos niveles que sus pares sin discapacidad. Verdadero
A pesar de que la gran mayoría de niños con discapacidad en la región terminan la escuela primaria, muchos menos jóvenes con discapacidad terminan la escuela secundaria en comparación a sus pares sin discapacidad. Por ejemplo, un estudio de ocho países de la región encontró que la probabilidad de asistir a la escuela para jóvenes entre 12 y 17 años con discapacidad es 10 puntos porcentuales menor respecto a los jóvenes sin discapacidad. Por otro lado, un porcentaje alto de niños con discapacidad continúan asistiendo escuelas segregadas de educación especial. Evidentemente, falta mucho para lograr la educación inclusiva en la región.
Los niños con discapacidad aprenden más y mejor cuando estudian solamente con otros niños con discapacidad. Falso
Los pocos estudios rigurosos en el tema muestran que incluir a estudiantes con discapacidad dentro de aulas y escuelas tradicionales tiene efectos positivos o neutros en el aprendizaje de los estudiantes con discapacidad. Además, la investigación demuestra que la inclusión de niños en aulas tradicionales no tiene impactos negativos en el aprendizaje de sus pares sin discapacidad cuando existen apoyos adecuados. Sin embargo, nos queda mucho por aprender de este tema con estudios rigurosos que nos permitan identificar los efectos de la inclusión escolar.
La discriminación y el prejuicio en contra de personas con discapacidad en el espacio laboral sigue siendo un problema en nuestra sociedad.Verdadero
Aunque un gran número de países han hecho que la discriminación laboral en contra de personas con discapacidad sea ilegal, esto continúa siendo un problema. Por ejemplo, un estudio en Noruega encontró que cuando las personas revelan que tienen discapacidad en sus cartas de presentación, la probabilidad de que sean llamados para una entrevista bajaba por 50%. Estudios de Dinamarca y Canadá tienen resultados similares.
Las cuotas de empleo siempre funcionan para promover el empleo de personas con discapacidad. Falso
Los programas de cuotas laborales no siempre tienen los efectos deseados de aumentar la contratación de personas con discapacidad. Por un lado, evidencia de Austria, Japón, España, Brasil y Chile sugiere que las cuotas pueden aumentar pequeña- o moderadamente el número de personas con discapacidad trabajando en empresas sujetas a cuotas. Sin embargo, estudios de otros países como Francia y Alemania muestran lo contrario: las cuotas a menudo no tienen impacto o incluso disminuyen la contratación de personas con discapacidad. Además, algunos estudios muestran que cuando las cuotas sí aumentan el empleo de personas con discapacidad, esto es en gran medida un resultado de reclasificar trabajadores ya contratados como trabajadores con discapacidad. Este es el caso en Chile, donde hasta un tercio del aumento en empleados con discapacidad a raíz de la implementación del programa de cuotas laborales se debía a reclasificación de empleados. En otras palabras, las cuotas laborales no son la respuesta mágica para aumentar el empleo de personas con discapacidad.
Las transferencias monetarias para personas con discapacidad desincentivan el trabajo, y por ende, no deberían ser promovidas. Falso
Estudios de Europa, los Estados Unidos y Canadá han encontrado que los seguros de discapacidad tienen efectos negativos en los ingresos y la probabilidad de empleo. Sin embargo, estos programas se implementan en contextos con altos niveles de formalidad laboral y se financian precisamente por medio de contribuciones de trabajadores formales, que se ven incentivados a dejar de trabajar para recibir sus prestaciones. Asimismo, el tamaño de estos efectos es pequeño. En contextos con altos niveles de informalidad laboral, como es el caso en América Latina y el Caribe, son mucho más relevantes los programas de transferencias monetarias. Estos pueden tener efectos muy distintos en el empleo de personas con discapacidad que los programas tradicionales de seguro de discapacidad de países de ingresos altos. Por ejemplo, un estudio en Brasil encontró que la pensión de discapacidad reduce los días de empleo formal de sus beneficiarios solamente por 5 días al año, un valor bastante bajo. Además, aunque los efectos en ingresos y empleo son importantes, las transferencias monetarias tienen otros efectos positivos en la calidad de vida de personas con discapacidad. Por ejemplo, estudios en Estados Unidos, Brasil y los Países Bajos han encontrado que el recibir un subsidio de discapacidad mejora el estatus financiero del hogar y hasta puede disminuir la mortalidad de la persona con discapacidad beneficiaria. ¿Cuántas respuestas correctas tuviste? Independientemente del número, te invitamos a que sigas aprendiendo más sobre qué funciona para promover la inclusión de personas con discapacidad leyendo nuestra publicación. Falta mucha investigación en temas de discapacidad en América Latina y el Caribe. Sin embargo, esperamos que al promover la investigación y diálogo sobre estos temas podamos contribuir al desarrollo de políticas y programas de inclusión innovadoras y cada vez con mejores resultados.
Leave a Reply