Colombia publica hoy la hoja de ruta del hidrógeno, un paso clave para el posicionamiento estratégico del país en una industria que podrá revolucionar los mercados de energías en las próximas décadas.
Hidrógeno, el elemento químico más abundante en la atmosfera, que puede ser utilizado como materia prima industrial, combustible y vector energético para el almacenamiento y transporte de energía. Cuando proviene de fuentes de energía renovables – eólica y solar-, el hidrógeno verde puede ser esencial en la carrera hacia la descarbonización, especialmente para los sectores de difícil electrificación. Desde Namibia hasta Canadá, desde Chile hasta la Unión Europea, los responsables políticos están mirando al hidrógeno renovable como nunca antes.
Esta agenda también avanza en Colombia donde el pasado 15 de agosto se cerró el plazo de consulta pública de la hoja de ruta de hidrógeno de Colombia, y que se finalmente se publica hoy a 30 de septiembre de 2021.
La Hoja de Ruta del Hidrógeno de Colombia tiene como objetivo contribuir al desarrollo e implantación del hidrógeno verde en Colombia, en la cual se identifican pasos e hitos a corto, mediano y largo plazo. Esto ayudará a reforzar el compromiso del Gobierno con la reducción de emisiones estipulada en los objetivos del Acuerdo de París de 2015.
El Ministerio de Minas y Energía podrá utilizar esta Hoja de Ruta para continuar descarbonizando el sector energético. Esta herramienta analiza la capacidad de producción de hidrógeno, de reducción de emisiones, su demanda interna y potencial exportador. Asimismo, se analizan las medidas regulatorias necesarias para fomentar esta tecnología, y poder avanzar en la implementación de un plan de despliegue del hidrógeno en Colombia.
Para su elaboración, el Gobierno Colombiano cuenta con el apoyo del BID, a través del Programa de Infraestructura Sostenible de Reino Unido (UKSIP por sus siglas en inglés), el cual está siendo clave para movilizar inversiones estratégicas del sector privado para promover una infraestructura sostenible baja en carbono. El hidrógeno verde encaja en el marco de trabajo de UKSIP ya que contribuye a dar cumplimiento a las metas de eficiencia energética y reducción de emisiones de los sectores de energía, transporte e industria.
Posición de Colombia
Colombia tiene ventajas estratégicas en materia de hidrógeno por dos motivos:
- Alta disponibilidad de fuentes de energía renovable para producir hidrógeno verde en el norte del país (Guajira);
- Ubicación geográfica. Colombia es el nexo entre Centroamérica y América de Sur y está unida mediante redes de transporte, distribución y comercio con otros cinco países. Además, se sitúa entre dos océanos, como nodo de comercio marítimo y de exportación con 10 zonas portuarias, siendo Cartagena (Caribe) y Buenaventura (Pacífico) los puertos de mayor relevancia.
Además, Colombia cuenta con importantes reservas de petróleo, gas natural y carbón que le proporcionan una posición cercana a la autosuficiencia en combustibles y que podrían utilizarse para la producción de hidrógeno azul mediante la captura y almacenamiento de carbono (CCUS).
¿Cómo se habilita el marco regulatorio de una nueva industria?
El país está comprometido con la descarbonización de la economía, incluyendo la meta de reducción del 51% de las emisiones de gases de efecto invernadero para el año 2030 en su NDC. También está evaluando la puesta en marcha de un sistema de cupos transables de emisión, con un impuesto al carbono que facilite la entrada del hidrógeno azul en la economía colombiana en lo que dura la transición al hidrógeno verde.
Como incentivos, la Ley de Transición Energética, N°2099 fija un marco fiscal favorable para la inversión en fuentes no convencionales de energía contribuyendo a la recuperación de la economía. La Ley, considera tanto el hidrógeno verde que gozará de los beneficios tributarios establecidos en el Capítulo III de la Ley 1715 de 2014; como el hidrógeno azul.
También, es importante mencionar el Proyecto de Ley 365 de 2020, que promueve nuevas tecnologías, para utilizar el hidrógeno verde como combustible en diferentes industrias.
¿Qué mensajes da la hoja de ruta?
La hoja de ruta proyecta una demanda interna en Colombia de 1,6-1,8 Mt de hidrógeno en 2050, con un potencial solar que tan sólo en la región de La Guajira alcanza 42 GW. Si todo este potencial renovable se explotase en la producción de hidrógeno verde, después de su conversión se podrían obtener hasta 3,2 Mt o 5,8 Mt (incluyendo el potencial offshore). Por tanto, hay posibilidad de suplir la demanda de hidrógeno de Colombia a 2050 con el potencial que ofrecen las renovables.
El valor del costo nivelado del hidrógeno (LCOH) obtenido en 2030 de 1,7 USD/kg es muy similar a los objetivos de países relevantes en materia de hidrógeno, tales como los de Australia y Chile, posicionando a Colombia como un actor relevante a nivel global en el futuro mercado de hidrógeno.
Los análisis demuestran que a partir de 2030 se podrá producir hidrógeno verde en algunas regiones, alcanzando paridad de costes al hidrógeno azul. En la región de la Guajira, en 2027 se alcanzaría la paridad de precios del hidrógeno eólico con el hidrógeno azul (por gasificación del carbón); y en 2037 se alcanzaría el punto de equilibrio del hidrógeno solar.
Fuente: i-deals Innovation & Technology Venturing Services (Firma Consultora que desarrolló la Hoja de Ruta de Hidrógeno de Colombia)
¿Hidrógeno azul o verde?
Para aprovechar esta oportunidad es importante no perder de vista la infraestructura necesaria para habilitar el hidrógeno azul en los primeros años de despliegue de la tecnología. Se esperan 15-20 años en hacer el puente del hidrógeno azul con CCUS al hidrógeno verde, dado que la demanda de producción puede suplirse de manera amplia con hidrógeno verde a partir de 2030-2040. Por ello, es vital no invertir en activos que puedan resultar finalmente varados, más aún cuando la tecnología de captura de carbono es aún incipiente y costosa.
Teniendo en cuenta los tiempos en LAC de diseño, licitaciones, construcción y puesta en marcha de nuevas tecnologías, se podría dar el caso de que para cuando la tecnología asociada del hidrógeno azul esté instalada, ya se encuentre madura la tecnología del hidrógeno verde.
En conclusión, el hidrógeno azul haría posible una descarbonización temprana de determinadas aplicaciones industriales, disponiendo de una ventana de oportunidad de corto-medio plazo. Resultaría una alternativa de bajas emisiones para la transición progresiva de los sectores mineros y gasistas del país a la vez que se aprovechan las grandes reservas de gas y carbón y el know-how experto de la industria colombiana. El hidrógeno azul serviría de base para iniciar la ampliación de la cadena de valor del hidrógeno en Colombia hasta el desarrollo competitivo a gran escala del hidrógeno verde.
Entre 2030 y 2040, se espera la coexistencia del hidrógeno azul y verde según el recurso natural disponible para su producción en cada región de Colombia. A partir de 2040, el hidrógeno verde se impondría como la alternativa más competitiva en todo el territorio colombiano. En cuanto a emisiones abatidas, la demanda energética abastecida por hidrógeno verde o azul representaría el 9,6% de la demanda energética total a 2050. Esto supondría un potencial de reducción de emisiones de 38 Mt de CO2 anuales respecto al valor de 2020 que ayudaría a Colombia en sus metas de descarbonización.
lana says
Interesante informacion y de calidad!
Gracias
Carlos Alberto Manrique Barrios says
Interesante experiencia que indudablemente mejorará notablemente nuestro agobiado Medio ambiente.
Carlota says
Interesante