¿Cómo puede la Isla de Pascua–Rapa Nui ser más resiliente a los tsunamis y los incendios? ¿Existe alguna conexión entre ambos riesgos y la erosión costera que sufre la isla? La Gobernación Provincial de Isla de Pascua junto con la ONEMI, CONAF, el BID y la agencia de innovación y comunicación de riesgo PACIFICO, liderada por su director Emiliano Rodriguez Nuesch, abordaron la gestión de riesgo en Isla de Pascua–Rapa Nui, y ejecutaron dos campañas participativas de erradicación de incendios y de promoción del simulacro de tsunamis.
A pedido de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (SUBDERE) del Gobierno de Chile, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) está implementando en conjunto con actores locales una metodología de planificación multisectorial con los objetivos de:
- sistematizar, consolidar y poner a disposición los múltiples diagnósticos, planes y estrategias existentes sobre Isla de Pascua–Rapa Nui;
- disminuir brechas de información existentes; y
- desarrollar una agenda de inversiones para el desarrollo sostenible de Isla de Pascua–Rapa Nui, con acciones de corto, mediano y largo plazo que nutra la elaboración de futuros planes de gestión de capacidad de carga (Ley 21.070).
Bajo este marco, el BID apoyó el desarrollo de varias iniciativas como la experiencia Tari Mahingo junto con la Municipalidad de Rapa Nui y dos campañas de prevención de riesgos de tsunamis e incendios junto con la Gobernación Provincial de Isla de Pascua. Las mismas se ejecutaron con herramientas como el diseño participativo, arte e ilustración, el conocimiento ancestral, la narrativa documental y herramientas de systems thinking. Involucrar a la ciudadanía en el proceso de diseño de una campaña tiene de por sí un valor educativo, ya que en el proceso los ciudadanos aprenden sobre la complejidad de los problemas abordados y las razones por las que se busca un cambio de conducta. Involucrar a la comunidad en el proceso ayuda a que se sientan parte de las posibles soluciones y a que colaboren con la transmisión del mensaje a los demás miembros de la comunidad.
Durante el proceso participativo se definió cuáles son plataformas más efectivas para comunicar la campaña en la isla: la televisión local, porque sigue siendo un medio que toda la comunidad consume; los pósters, porque existe un hábito de coleccionar pósters con arte local; y las redes sociales, porque son la forma más eficaz de llegar a los turistas e industria hotelera. La combinación de los tres medios ayudó a llegar a casi la totalidad de la población de la isla con los mensajes de prevención. En una isla donde se hablan tres idiomas (Rapa Nui, español e inglés), resultó clave trabajar la comunicación en estos tres idiomas ya que le dio un tono inclusivo a la campaña. De esta forma, los diferentes actores pudieron recibir de forma correcta el mensaje, evitando el aislamiento linguístico que suele aumentar la vulnerabilidad en zonas de riesgo. Particularmente, tiene un valor especial para la comunidad Rapa Nui que se use su lengua en una campaña de prevención, ya que históricamente las campañas de prevención han sido en su gran mayoría en español. Comunicar en Rapa Nui ayuda a darle más naturalidad al mensaje y a que la comunidad se apropie del mensaje de prevención.
Para abordar en forma integral el riesgo en la isla, se realizó un mapeo de las relaciones entre el aumento del nivel del mar, la erosión costera, los incendios y la afectación del patrimonio arqueológico. El riesgo por tsunamis, el aumento del nivel del mar y la erosión costera ponen en riesgo al patrimonio arqueológico ubicado mayormente en las costas. Los incendios (que son cada vez más frecuentes) destruyen la vegetación y aceleran la erosión costera, afectando así el patrimonio arqueológico del que también depende el turismo. Se abordó en primera instancia un estudio del riesgo de tsunamis y de incendios con la Gobernación Regional de la Isla de Pascua.
El estudio demostró que la Isla de Pascua es vulnerable al impacto de tsunamis en sus tres costas. Adicionalmente el aumento reciente de la población de Hanga Roa hace más compleja la evacuación de los habitantes en caso de alertas. Se detectó la necesidad de generar conciencia sobre un riesgo no percibido por la población, adaptando el mensaje a los diferentes grupos que conviven en la isla. La campaña de prevención de daños por tsunamis tuvo el objetivo doble de concientizar a los habitantes sobre los riesgos de tsunamis y de aumentar la participación en el simulacro (realizado el día 5 de septiembre del 2019). Múltiples entrevistas realizadas en paralelo revelaron la relación ancestral de Rapa Nui con el mar y cómo el conocimiento local puede servir para abordar los desafíos actuales que plantea la erosión costera.
Con la participación de pescadores, científicos, maestras, emprendedores, fotógrafos, funcionarios y artistas, se realizó un aviso televisivo (difundido por el canal local) con el objetivo de educar a la población sobre los planes de evacuación y sobre cómo se debe reaccionar responsablemente cuando se emite una alerta de tsunamis. No solo se realizó una versión para los habitantes en su lenguaje local sino que también se transmitió una versión en inglés para turistas, promocionado en conjunto con la industria hotelera. Para el simulacro, en comunicación y con la participación de la Iglesia de Hanga Roa, se definieron puntos de encuentro seguros durante la evacuación. La estrategia acordada con el Padre Bernardo consistió en cambiar el sonido de las campanadas para comunicar alertas de tsunamis.
Junto con CONAF, se realizó una campaña de erradicación de incendios, los cuales son cada vez más comunes (55 en los últimos cuatro años), resultando en un agravante para la isla. Para la campaña se entrevistaron bomberos, científicos, funcionarios y operadores turísticos y se investigaron las causas de los incendios. Existe un consenso de que la causa principal de estos son las prácticas ganaderas de quema de pastos, bajo la creencia de que esto permite la renovación del suelo. El mensaje objetivo del aviso televisivo explica que a causa de los incendios se deteriora el suelo, dejando así un suelo de menor calidad a las futuras generaciones. Se plantea que el hábito de quemas debe ser abolido por todos los actores. Además, se elaboraron pósters de prevención en un taller con estudiantes. Gracias a una serie de entrevistas se estableció el nexo entre los incendios, la erosión costera y el riesgo a que haya un detrimento en el patrimonio arqueológico de la isla.
Para mayor información sobre las campañas y acceso a todos los materiales audiovisuales por favor visitar: http://www.resilient-coast.com/”