Foto: BID Ciudad Sostenibles, Guatemala.
Factores económicos y las características geográficas de un hogar son determinantes para que una persona cuente con acceso a la electricidad. Esta columna examina el estado de desarrollo económico en el que se encuentra un país como una explicación más del acceso a la electricidad.
El acceso a la electricidad representa un componente importante en la vida moderna, motivo por el cual alcanzar acceso universal se ha convertido en uno de los objetivos con mayor apoyo a nivel internacional; sin embargo, la efectividad de los distintos programas de electrificación ha sido variada, por ejemplo, en el año 2013 aproximadamente 1,200 millones de personas alrededor del mundo carecían de infraestructura básica debido al bajo ritmo de electrificación. En América Latina y el Caribe (ALC) cerca de 22 millones de personas en el 2012 no contaban con acceso a la electricidad según los Indicadores del Desarrollo Mundial. Tomando encuestas nacionales de 16 países en ALC, el estudio “Rural Electricity Access Penalty in Latin America: Income and Location” analiza tres factores determinantes del acceso a la electricidad. Estos son el ingreso del hogar, su ubicación geográfica, y el nivel de ingreso per cápita del país.
Ingreso y ubicación del hogar como determinantes en el proceso de electrificación.
El ingreso del hogar influye en el acceso a la electricidad, hogares con ingresos altos pueden pagar los costos de conexión más fácilmente además de estar asociados a niveles más altos de demanda eléctrica debido al número de aparatos eléctricos que poseen; esto los vuelve más atractivos para las empresas distribuidoras de electricidad. En ocasiones la ubicación geográfica—especialmente de las comunidades rurales—representa un desafío técnico a la extensión de los servicios tradicionales de electricidad a un costo razonable. Aunado a lo anterior, las zonas rurales con bajos niveles de densidad poblacional presentan una demanda baja y dispersa que se traduce en altos costos de transmisión y distribución por parte de las empresas, así como bajos incentivos financieros para su electrificación.
Si realizamos el análisis por país, el rezago de electrificación—reflejo de una baja cobertura eléctrica—se encuentra focalizado en las familias de menores ingresos en zonas rurales. Este patrón se observa en la Figura 1. Con respecto a las áreas urbanas, el acceso a la electricidad parece ser homogéneo en países de alto y medio ingreso, indistintamente del nivel de ingreso del hogar. Esto nos indica que la brecha en electrificación sigue permaneciendo en los grupos más vulnerables y en países de bajo ingreso.
Figura 1. Porcentaje de hogares con cobertura eléctrica de acuerdo a su área y nivel de ingreso
Fuente: Elaboración propia con base a encuestas nacionales a nivel de hogar. Nota: El eje horizontal mide el porcentaje de hogares con cobertura eléctrica comenzando a partir del 50 %.
El estudio indica que la relación entre acceso a la electricidad y el ingreso per cápita nacional parece no ser lineal, lo cual sugiere que si se alcanzan niveles de alto ingreso per cápita desproporcionalmente incrementarían los niveles de cobertura eléctrica.
Bajo acceso rural a la electricidad: la penalidad de vivir en un país de ingreso bajo
La Figura 1 también nos indica que el estado del desarrollo económico en el que se encuentra un país parece determinar la probabilidad de que un hogar tenga acceso a la electricidad. Es decir, dado niveles similares de ingreso de los hogares y tomando en consideración sus características geográficas, una familia en un país pobre se enfrenta a una menor probabilidad de contar con electricidad. Véase Figura 2. El acceso a la electricidad por sí sólo no brinda ningún sentido de utilidad, es la materialización de su consumo en actividades productivas lo que efectivamente promueve el crecimiento endógeno, y eleva los índices de bienestar social; por ello que el problema de acceso a la electricidad en cierta medida es una penalidad al desarrollo económico.
Figura 2. Acceso rural a la electricidad por decil de ingreso y grupo de ingreso del país
Fuente: Elaboración del autor con base a datos de encuestas a nivel de hogar. Nota: La clasificación grupo de ingreso del país se define de acuerdo a su ingreso per cápita nacional.
Implicaciones
América Latina y el Caribe ha presenciado un progreso notable en términos de acceso a la electricidad en los últimos 25 años, sobre todo en áreas rurales donde la cobertura ha crecido más del 20 por ciento entre los años 1990-2012. No obstante aún queda mucho por hacer, ya que aproximadamente el 90 por ciento de los hogares sin acceso a la electricidad se encuentran en zonas rurales.
Nuestros resultados indican que la interacción del ingreso del hogar y su ubicación multiplican las dificultades para proveer electricidad, por lo que se convierten en barreras considerables al acceso. Esta situación afecta principalmente a los hogares de menores recursos en países pobres y evidencia la necesidad de programas de electrificación que promuevan el crecimiento económico incluyente y el bienestar social.
Margarita Suarez Alvites says
Sería formidable que sus altos conocimientos los utilice para ayudar a las poblaciones necesitadas rurales….
lo invito a hacerlo en el Perú para poblaciones campesinas e indígenas
Gracias de antemano.
Margarita
Milton Balseca says
La electrificacion rural aislada, es donde el estado debe jugar un rol importante, ya que se debe tender a una cobertura plena, y todos debemos ser solidarios con los que menos tienen por lo tanto no es un problema económico el llegar con el servicio electrico a sitios aislados son oportunidades que les debemos dar a aquellos que menos tienen, debemos siempre preguntarnos PORQUE LOS HIJOS DE UN INDIGENA EN UNA COMUNIDAD AMAZONICA no pueden ver television, tener internet, acceso a educación como lo tienen mis hijos en la ciudad, esa es la diferencia y no debemos ser egoistas.
Julio says
Una vez más se confirma que el problema de la electrificación en Latam es principalmente un problema de electrificación de comunidades rurales aisladas marcadas por los factores económicos ( nivel de pobreza) y por sus características geográficas ( ubicación aislada y dispersa). En estos entornos ni los modelos convencionales (extensión de redes) ni los actuales actores (distribuidora convencional ) se han mostrado eficaces.
Para cumplir la meta 7.1 (acceso energético universal) de los ODS es necesaria voluntad política para poner en marcha otros modelos basados en renovables aisladas promoviendo nuevos actores, los proveedores rurales de servicio eléctrico.Y debe de ir apoyada por financiación adecuada a las iniciativas locales de los proveedores rurales de servicio.
¿Están las organizaciones multilaterales de financiación preparadas para este reto cuando su cartera de proyectos de electrificación aislada es un porcentaje ridiculo de su cartera de proyectos de energía, según el informe de Sierra Club 2016? Me temo que hay mucho que hacer también en el enfoque de este problema dentro de las organizaciones multilaterales financieras.
Alejandra Corredor says
En Colombia estamos trabajando también en esta situación y aunque ya hay soluciones renovables aisladas aún se tiene la incertidumbre de la sostenibilidad especialmente para reposición de baterías y mantenimiento de los sistemas
Emilio Gudemos says
Estimados Todos
Respondiendo a Cuál han sido las mayores barreras para la implantación de sistemas FV rurales?
Para esta consulta debemos efectuar un posicionamiento geográfico, particularmente he desarrollado planes para sectores rurales aislados y remotos de Latinoamérica, en donde tal vez las grandes dificultades son las distancias a recorrer, accidentes geográficos a sortear (ríos, montañas, desiertos, o climas rigurosos como nieve o calores extremos) falta de infraestructura y logística de transporte e instalaciones.
Para lograr planes de electrificación rural con FV exitosos se deben efectuar inspecciones en sitio previamente para una análisis de necesidades energéticas de la región, evaluar modos de arribo a la zona y transporte de materiales
Capacitación de técnicos locales y usuarios para un uso y mantenimiento eficiente
Confección de pliegos técnicos de licitación bajo normas específicas
Dirección de obras con prototipos para evaluación de empresas proveedoras
Planes de mantenimiento y reposición de elementos