Las líneas pueden dar mucha información acerca de la relación entre diferentes cosas. Las líneas más interesantes suelen ser diagonales con una pendiente empinada, porque sugieren una relación directa y fuerte. Un ejemplo es la línea entre la riqueza de la familia y la educación. Mientras más rica es la familia, mejor le va a los hijos en la escuela.
La curva de la felicidad tiene forma de U. Después de un máximo histórico en la juventud, la felicidad disminuye a medida que envejecemos, entramos al mercado laboral y comenzamos a tener familia. La felicidad toca fondo entre finales de los 30 y principios de los 50, y se eleva otra vez alrededor de los 60 años, cuando quizás nos volvemos más sabios o simplemente aceptamos la vida que vivimos.
En general, las líneas menos interesantes son planas porque significa que no existe ninguna relación.
Apliquemos este principio a otro ejemplo: comparemos nivel socioeconómico (SES), medida que va más allá del dinero porque incluye nivel de educación en el hogar y la riqueza de la casa, con desarrollo infantil. Los resultados muestran que la línea se vuelve empinada y diagonal. Es decir, el estatus socioeconómico afecta directamente tanto cuánto aprenden los niños como sus posibilidades a lo largo de toda la vida. Los niños ricos no sólo comienzan sus vidas mejor que los pobres, sino que además esta brecha tiende a aumentar a medida que los niños pasan de la escuela al mercado laboral.
Sin embargo, hay algunos aspectos importantes de crecer y de luego convertirse en adulto productivo y feliz que están menos relacionados con la riqueza de la familia y más vinculados con cómo los padres, maestros y otros adultos interactúan con los niños e, incluso, con cómo los niños interactúan entre ellos.
Veamos la relación entre desarrollo socioemocional del niño y la educación materna, la cual está fuertemente correlacionada con estatus socioeconómico y es por lo tanto es un indicador de la misma:
Escala Socio-emocional y Educación de la madre
Fuente: Proyecto Regional de Indicadores de Desarrollo Infantil, PRIDI. Datos preliminares.
¡La línea es plana! El estatus socioeconómico no parece afectar de la misma manera a absolutamente todos los factores importantes para el desarrollo infantil. Algunas habilidades, como el autocontrol, la persistencia y la conciencia de sí mismo – las habilidades socio-emocionales – se pueden desarrollar independientemente de los recursos materiales o la riqueza de la familia, la escuela o la comunidad. Las interacciones intencionales y de calidad como jugar, incluir a los niños en las conversaciones y las actividades diarias, enseñarles empatía y respeto también importan. Estas habilidades son significativas para la escuela y la vida. Quizás, más que la inteligencia.
El éxito se impulsa de muchas maneras, no sólo con inteligencia o privilegios de clase. La motivación, el entusiasmo, la cooperación, la fiabilidad y la perseverancia son importantes para el éxito en la escuela y a lo largo de la vida. El talento y el potencial vienen en paquetes de varias formas y tamaños, y también en hogares de todos los niveles socioeconómicos. Así que en la eterna búsqueda de nivelar el terreno de juego de las oportunidades, esta línea recta y plana es interesante.
La constante que simboliza una linea horizonatal siempre nos da una idea clara de que hay datos necesarios para los fenoomenos