A Lina de 9 años y su hermano Julián les encanta jugar a la pelota con sus amigos y amigas. Todos los días caminan cinco cuadras hasta la cancha más cercana, y sueñan en el futuro ser futbolistas de sus equipos favoritos. Hace un par de meses Julián caminaba junto a tres amigos para encontrarse con los demás. A dos cuadras un camión que repartía insumos, tenía mucha prisa ya que en 15 minutos terminaba el horario en el que podría descargar, por lo que no paró donde indicaba la señal. Segundos antes, Julián perdió el balón de las manos y corrió tras él. En el cruce, el camión lo impactó. Luego de meses en el hospital, con ayuda de su madre, quien debió renunciar a su trabajo como mecánica, Julián continua con las terapias para poder volver a caminar.
Seguridad vial, infancia y género
Cada año mueren en el mundo 186.300 niños y niñas en siniestros viales. Eso equivale a 500 niños diarios. En la región, las lesiones por siniestros viales son la principal causa de muerte de niños entre los 5 y los 14 años y para mayores de 15 es la segunda causa (OMS, 2015; FIA, 2018). La mayoría de las y los menores que fallecen en un siniestro que son menores de 14 años son peatones. Dependiendo del contexto, al ser mayores de 14 suelen fallecer viajando en motocicleta, en vehículos automotores de 4 o más ruedas, o como ciclistas.
Al analizar estos datos desagregados por género, se evidencia que los niños que fallecen en siniestros viales representan casi el doble que las niñas que mueren por esta causa. Estas tendencias son similares a las que observamos entre hombres y mujeres adultos. Y se explican por las construcciones culturales en donde los niños tienen un mayor acceso al espacio público, a quiénes se les permite asumir más riesgos que las niñas. De hecho, es común limitar las salidas de las niñas, o que se les permita salir siempre y cuando tengan la compañía de otras personas (OMS, 2015).
Sin embargo, todavía existen muchos vacíos en los datos. Existen indicadores generales que muchas veces no permiten evidenciar el número de fallecidos desagregados por género, ni las condiciones en que suceden los siniestros. Pero esto no es suficiente. Se estima que aún existen diferencias entre las muertes denunciadas y las muertes estimadas. Así mismo, no existen indicadores desagregados por la gravedad de la lesión y las posibles consecuencias a largo plazo que estas puedan implicar para los menores. Ni las consecuencias para las familias y las víctimas. Estos vacíos se convierten en limitantes para el diseño e implementación posibles políticas públicas que permitan mitigar los efectos de estos siniestros viales.
Luego de un siniestro quienes cuidan son las mujeres
Los efectos económicos y sociales de los siniestros viales tienen un efecto diferenciado en hombres y mujeres. Tanto cuando hay víctimas fatales como no fatales los trabajos de cuidado recaen principalmente sobre las mujeres y sus ingresos económicos se pueden ver afectados. Ello sucede por recortes en sus jornadas laborales o incluso por la necesidad de retirarse del trabajo, como ocurrió con la madre de Julián. Estudios han mostrado que las personas a cargo del cuidado tras un siniestro vial, son normalmente las mujeres de las familias, quienes ven la necesidad de poner los requerimientos de la víctima por encima de las propias e incluso abandonar su vida para cuidarlos (Beaujon et al., 2023). Como referencia, en Costa Rica, en 2018, el 69,8% de las personas con discapacidad recibían asistencia por parte de mujeres. En el área metropolitana de Guadalajara un estudio cualitativo mostró que, en términos económicos, más allá de los gastos médicos, el ingreso de los hogares y principalmente los de bajos recursos, se ven impactados de forma temporal o permanente tras el siniestro vial cuando uno o más miembros debe dejar de trabajar (Pérez – Núñez et al., 2011).
¿Por dónde comenzar?
Dentro de la Agenda de Acción 2020 lanzada en 2015 como parte de la Semana Global de Seguridad Vial, se hace un llamado a los gobiernos para reducir las muertes por siniestros viales. Se proponen cinco grupos de intervenciones:
Mejorar la seguridad vial para todas las personas, implica reducir las cargas de cuidado que tienen las mujeres, y en sus posibilidades de desempeño laboral. Este año, en la Semana Global de Seguridad Vial reconocemos el trabajo de todas estas mujeres cuidadoras, y ratificamos nuestro compromiso de trabajar para tener calles más seguras, principalmente para los niños y niñas, como un compromiso para mejorar vidas y asegurar futuros.
Para conocer más lee nuestra publicación Seguridad vial en América Latina y el Caribe: tras un decenio de acción y perspectivas para una movilidad más segura:
Bibliografía
INEC. (2020). Costa Rica en cifras 2020. (Basado en la Encuesta Nacional sobre discapacidad 2018). https://admin.inec.cr/sites/default/files/2022-11/recostaricaencifras2020_0_2.pdf
FIA Foundation. (2018) Streets for Life. FIA Foundation. https://www.fiafoundation.org/resources/streets-for-life#:~:text=Streets%20for%20Life%3A%20Safe%20and,those%20from%20low%20income%20areas
Organización Mundial de la Salud. (2015). Diez estrategias para preservar la seguridad de los niños en las carreteras. Organización Mundial de la Salud. https://apps.who.int/iris/handle/10665/162336
Pérez – Núñez, R., Pelcast re – Villafuerte, B., Híjar, M., Ávila – Burgos, L. y Celis, A. (2011). Aqualitative approach to the intangible cost of road traffic injuries. International Journal of Injury Control and Safety Promo- tion, 1 – 11.
Beaujon Marin, Amanda; Hidalgo, Darío; Zamora, Edgar; Café, Eduardo; Montes, Laureen; Cortés, René; Montoya Robledo, Valentín; Bernal, Valeria; Pinto Ayala, Ana María; Díaz, Claudia; Santos, Claudia Franchesca de los; Persaud, Christopher; Puppo, Corina; R. (2023). Road safety in Latin America and the Caribbean: after a decade of action prospects for safer mobility (A. M. Pinto, C. Díaz, E. Zamora, E. Café, M. Ponce de León, M. Sosa, & R. Cortés, eds.). https://doi.org/10.18235/0004843
Ale dice
Muy interesante su articulo. Nuestras problemáticas están mas visibilizadas, por eso no hay que dejar de trabajar en ello.
Nuestra Pyme, liderada por mujeres, comprende los conflictos que enfrentemos en el dia a a dia.
Los traslados y mudanzas en una situacion de vulnerabilidad para las mujeres puede ser un trabajo tedioso pero completamente abordable