Es muy común que las compras y contrataciones públicas se consideran el hermano menor de la familia de la funciones de gasto y por esta razón la reforma de esta área ha tenido que seguir un camino diferente al que recorrieron sus hermanos mayores (presupuesto, contabilidad, tesorería), no contando con la misma visibilidad y apoyo.
Uno de los desafíos más importantes que enfrentan los gobiernos de la región es la efectiva asignación de recursos, consecuentemente la necesidad de información, eficiencia y transparencia en el gasto ha motivado reformas importantes, pero que pocas veces incluyeron al hermano menor. No obstante, la función de compras y contrataciones públicas ha venido demostrando su importancia y potencial, y contínua lucha con los mitos que han caracterizado su desarrollo.
Mitos relacionados a compras y contrataciones públicas
Este estatus de hermano menor se debe a varios mitos:
1. Son una función menor y simple para adquirir bienes y servicios
Tradicionalmente las compras y contrataciones públicas han sido vistas como una función simple, meramente dedicada al control administrativo y revisión del debido proceso en las licitaciones. Ahora las economías son cada día más dinámicas y demandan servicios públicos más sofisticados. Las licitaciones ya no son simples, se han hecho más sofisticadas ante un mayor uso de modalidades que agregan y apalancan la demanda. También se hacen más comunes alianzas con el sector privado para la provisión de bienes y servicios estratégicos. Para citar algunos ejemplos de esta sofisticación, el caso de Brasil y Paraguay, con subasta a la inversa; compras sostenibles en Costa Rica, Chile con inteligencia de negocio; Colombia, Ecuador, Panamá con convenio marco; y finalmente Republica Dominicana en concesiones y su Aplicación Móvil ComprasRD.
2. Son una herramienta con poca capacidad de impacto en el desarrollo de políticas públicas
Las compras públicas son críticas en el funcionamiento de un gobierno y sus políticas públicas, dado que proveen oportunamente los insumos necesarios para la entrega bienes y servicios ciudadanos. A su vez, la labor de control que se realiza permite reducir la corrupción y asegurar que los caminos tengan las especificaciones y materiales correctos; que los textos en las escuelas tengan la calidad necesaria y que las medicinas en los hospitales sean de las características adecuadas de acuerdo a la demanda, por citar ejemplo.
Una vez probada su capacidad de llevar a cabo medidas de eficiencia y control, la función de compras públicas también tiene la tarea de desarrollar modalidades de contratación que permitan apoyar la implementación de políticas públicas como por ejemplo sustentabilidad, promoción de grupos vulnerables y desarrollo del sector privado. Un ejemplo destacado es la República Dominicana con sus políticas para apoyar las pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) lideradas por mujeres.
3. Sólo obtienen apoyo político de altos mandos cuando hay escándalos de corrupción
Siempre se tuvo la idea que aprobar una Ley de Compras y Contrataciones era el paso que hacía la ‘reforma casi inmediata y expedita,’ sin embargo, la experiencia ha mostrado resultados diferentes. La aprobación de estas leyes usualmente motivada por algún escándalo de corrupción, han dado pocos resultados en la modernización de la función de compras. El paradigma que dice que una mayor cantidad de normas y regulación previene la corrupción sólo funciona hasta cierto punto y tiene costos financieros y de oportunidad cada vez más altos para las administraciones públicas. Es por esto que muchos países están optando por proveer los recursos e incentivos necesarios para encarar procesos de modernización continuos que tomen en cuenta principios de eficiencia y apoyo a políticas públicas. Por ejemplo, en el caso de Colombia han realizado una reforma significativa con la creación de la agencia Colombia Compra Eficiente, avances en su sistema de compras electrónicas y herramientas innovadoras como convenios marco, todo esto motivado principalmente por la búsqueda de eficiencia.
4. Son una función de derecho administrativo sin futuro u oportunidades en el servicio civil
La función de compras y contrataciones demanda una gran diversidad de profesionales que pasan por la administración pública y contabilidad hasta la estadística e ingeniería. En regiones como el Caribe se ha capacitado y certificado oficiales bajo la metodología CIPS (Chartered Institute for Purchasing and Supply) en los últimos años. También Chile, Ecuador y Perú tienen programas de profesionalización donde miles de funcionarios son capacitados y certificados anualmente. En algunos países donde se ha logrado la profesionalización, ya existen mercados de funcionarios, donde los ministerios compiten por cada profesional.
5. Las compras públicas son una función que solo los países desarrollados han podido modernizar
Aunque comúnmente se asume que los países desarrollados se encuentran en mejor estado en cuanto se refiere a la gestión pública, existe evidencia que esto no es el caso cuando se trata de compras electrónicas. El estudio Panorama de Administración Pública América Latina y el Caribe 2014: Innovación en la gestión financiera pública de la OCDE – el grupo de las economías más sólidas del mundo- muestra que el uso de herramientas de contratación electrónica en América Latina está más avanzado que en los países OCDE, en algunos casos hasta por 50%. Adicionalmente, los gobiernos de nuestra región se encuentran implementando modelos innovadores de compras en la misma proporción que países en desarrollo, a pesar de las diferencias de mercado y los niveles de gasto. Incluso países con economías relativamente pequeñas están haciendo avances en la implementación de tecnologías en compras públicas. Por ejemplo, en Jamaica, y su nuevo sistema de licitaciones electrónicas, primero en el Caribe, Uruguay y su registro de proveedores y El Salvador con COMPRASAL II.
Entonces, como todo hermano menor, la función de compras y contrataciones lastra con varios mitos y constante subestimación; y a pesar de esto, ha demostrado que puede asumir mayores responsabilidades, llevar a cabo tareas complejas y llevar un buen desarrollo sin necesidad de una abundancia de reglas y controles.
Mariana Cadena says
Me gustaría saber la opinión de ustedes acerca de este proceso en Ecuador, entiendo que durante éstos últimos años se han realizados una serie de cambios y mejoras en este sistema, por ejemplo, la subasta inversa, que puede ser observada en tiempo real, la inclusión de las MYPIMES, en el proceso de adquisiciones para el Estado, entre otras. Pero ustedes no comentan nada respecto a lo que está ocurriendo aquí, me gustaría saber como lo evalúan.
Magda says
Gracias por este artículo; es justo en punto. Muy buen escrito¡
Adrián Leitón says
Creo que se está superando, en países como Costa Rica, la resistencia al cambio, con la introducción de las compras públicas electrónicas. Ello implica la modernización de las proveedurías y darle el peso que merece a esa función de orden esencial y continuidad del cambio por ejemplo con las compras sustentables. La resistencia me parece ha sido de políticos tradicionales y corruptos, que encuentran en las proveedurías con altos estándares éticos y profesionales un obstáculo para la manipulación ilícita de las compras públicas.