El 31 de marzo pasado, una profesora de un jardín de niños en el estado de Nuevo León, México, recibió un premio por su valentía al mantener a sus estudiantes de 5 y 6 años de edad, seguros y tranquilos en medio de un tiroteo que se desató cerca de su escuela. Cuando comenzó la violencia, la maestra, la Sra. Alanis, se mantuvo en calma, hizo que los estudiantes se echaran en el suelo, les dio seguridad y les cantó una canción para calmarlos. Mantener la calma en situaciones de emergencia es por supuesto esencial, no sólo porque nos permite responder de manera más racional, sino también porque nos ayuda a mantener la calma entre aquellos que nos rodean, especialmente los niños.
La pregunta, por supuesto, es la misma de siempre: cuando llegue el momento, ¿podremos acaso mantener la calma? Para la Sra. Alanis y sus alumnos, la respuesta es un sí rotundo.
La revista inglesa The Economist publicó recientemente un reportaje sobre los actuales niveles de violencia en México, señalando que estos se han multiplicado por cinco a partir de 2007, aunque el 70 por ciento de la violencia se concentra solo en el 3 por ciento de los municipios. El mapa interactivo que se ofrece más abajo es una representación visual de los cambios ocurridos desde el año 2007:
Este tipo de incremento de la violencia criminal es observable no sólo en México, sino también en toda América Central. Muchos actos criminales están relacionados con un aumento de la delincuencia organizada y el tráfico de drogas en la región.
Sin embargo, no todo es sombrío.
Una serie de iniciativas, incluidas las del BID, están avanzando para fortalecer aquellas instituciones que se proponen mejorar la seguridad de los habitantes de un país, además de mejorar la salud, la educación y otros servicios básicos, al igual que el fortalecimiento de las redes de apoyo existentes. Al mismo tiempo, se están ofreciendo alternativas positivas para los jóvenes. Sin embargo, remontar la marea contra la violencia y lograr la paz es todavía un camino largo y tumultuoso. Pero a medida que avancemos por ese camino, seguiremos dependiendo de la valentía y el coraje de profesores como la Sra. Alanis y también de sus estudiantes.
la inseguridad esta a la vuelta de la esquina y lo que realizo la maestra de mantener en calma a los niños de preescolar fue un acto de valentia pues no entro en panico y se mantuvo a la altura.
estaria bien que se capasitara a los maestros para cuando tengan que enfrentarse a una situacion similar a unque seria mejor que no sucediera algo asi.
Me impresionó mucho el video, que desfortunadamente sucedió en mi ciudad; no pude esconder mis lágrimas de impotencia por estar tan lejos y no saber cómo ayudar a la distancia…aunque felicito a la maestra Alanis; me duele que los niños de hoy no tengan el gozo de la seguridad con la que yo tuve oportunidad de crecer, de jugar, no es justo que vivan con miedo..no es justo, no es de niños…la seguridad es un derecho!!
Gracias por la nota, ojalá pronto cuenten más sobre las iniciativas por la paz que están siendo implementadas hoy en día.
Saludos!!
Acabo de encontrar esta nota. Partiendo del mismo episodio, escribí ésta por mi parte:
Historias de docencia y heroísmo
http://otra-educacion.blogspot.com/2011/07/historias-de-docencia-y-heroismo.html
Saludos,
Rosa Maria Torres del Castillo