El primer artículo basado en una serie de vídeos “Tres Minutos con un Experto” que fueron grabados durante nuestra Sexta Clínica de Seguridad Ciudadana, realizada el pasado mayo en la Ciudad de México
Por Silvia Dangond
El abuso doméstico se ha convertido en un tema de debate público en Estados Unidos. Más recientemente por los escándalos de la liga de fútbol americano (NFL, por sus siglas en inglés), que ha puesto luz sobre un asunto que muchos consideramos la “violencia semilla” para males mayores.
En América Latina venimos estudiando de cerca el tema y ya sabemos qué se puede y se debe hacer para prevenir el abuso oculto en muchos de nuestros hogares.
Un ejemplo exitoso es el de República Dominicana. Un país de un poco más de 10 millones de habitantes, donde se venían reportando alrededor de 194 femicidios por año. Algo que tenía a las autoridades, y al público en general, en alarma.
Al analizar la situación se dieron cuenta que el 80% de las mujeres asesinadas nunca habían denunciado casos de agresión o violencia contra ellas a ninguna de las instancias encargadas del tema. Algo que impedía romper el ciclo de la violencia y que al contrario. lo perpetuaba.
Este ciclo se inicia con agresiones verbales o físicas cuyo objetivo es debilitar y humillar a la víctima. El agresor logra aislarla de familiares y amigos. Si la víctima no pide ayuda o no denuncia estos primeros indicios de violencia, el ciclo continúa con actos sexuales violentos, golpizas y por último la muerte. En la medida que aumenta la violencia, también lo hace la gravedad de los ataques.
Para romper este ciclo se necesita, entre otras cosas, contar con instituciones confiables y eficaces a la hora de atender a las víctimas. Instituciones de fácil acceso que acompañen el proceso legal y judicial para impedir que el ciclo continúe.
Y eso fue lo que se hizo en República Dominicana. Según Roxana Reyes, Procuradora General Adjunta, “A través de la gestión de la mejora de la denuncia podemos facilitar el acceso de las mujeres víctimas al sector justicia penal y con esto reducir los niveles de impunidad”.
Junto al mejoramiento institucional se ampliaron los servicios de acompañamiento, y se crearon unidades especializadas en el tema.
¿El resultado?
Mas de 60 mil denuncias de agresiones verbales y psicológicas en todo el territorio. El tipo de denuncias demostraba la efectividad de la medida puesto que entre más temprano se reporte el inicio del ciclo, más rápida y efectiva las medidas para romperlo.
En 2013 se reportaron 74 feminicidios. Y según cálculos en 7 años los crímenes de este tipo disminuyeron en un 70 por ciento.
Ahora lo sabes.
Con datos combatimos la violencia doméstica.
Silvia Dangond es Politóloga de la Universidad de los Andes (Bogotá, Colombia). Periodista, Máster en Resolución de Conflictos y Comunicación de la Universidad de George Mason (Virginia, E.U). Actualmente es consultora en comunicaciones en el Banco Interamericano de Desarrollo
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Geovanny Vicente Romero Dice
Sin lugar a dudas, el problema de la violencia doméstica, específicamente el tipo penal de los llamados femenicidios, viene siendo el reflejo que se reproduce de toda una cultura machista y de impunidad en la República Dominicana. Afortunadamente se esta creando consciencia en la población y se están desplegando programas de asistencia a las víctimas de violencia a los fines de tratar los traumas mientras se les brinda protección. Esto último, es un estímulo para aquellas víctimas que permanecen en silencio en sus respectivos hogares, pues una de las principales problemáticas es lo que algunos criminólogos conocen como la criminalidad oculta, y algunos incluso la llaman la “cifra negra”, que son todos aquellos actos delictivos que nunca llegan al conocimiento de las autoridades y permanecen en secreto por miedo de las represalias que pueda tomar el victimario con la víctima, pues son más los crímenes que se callan que aquellos que son denunciados. Es en esta dirección que se debe trabajar, en brindar mecanismos de proyección y asistencia a estas víctimas a los fines de que sepan que en República Dominicana tenemos una política de tolerancia cero frente a la violencia doméstica. Es algo que siempre me pregunto con mis estudiantes universitarios de criminología: como puede ser posible que se dicte una orden de alejamiento y la misma se le envíe al victimario con la víctima de mensajera?
Geovanny Vicente Romero. Académico.
Yeremi Sabino Ramírez Dice
Es bien sabido que el dolo del feminicidio es producto de una sociedad sexista donde predomina el machismo fundamentada en el poder masculino sobre las mujeres. Creo que cuando hablamos de feminicidio vamos más allá de una simple pero firme intención de matar, debido al estrecho lazo que tiene este delito con la violencia de genero que va desde maltratos físicos, psicológicos y hasta morales; de modo que el feminicidio abarca una serie de violencias previas que generalmente traen consigo la muerte.Entiendo que la prevención, educación, asistencias y protección a las victimas y la sociedad en general son los pilares básicos para erradicar esta calamidad. Es importante reconocer el arduo esfuerzo que nuestro Estado ha y esta realizado para minimizar la incidencia de este mal; me llena de satisfacción saber que nuestras autoridades están aplicando políticas que van orientado y educando nuestra sociedad hacia una cultura de prevención y asistencia.
Yeremi Sabino. Estudiante de Derecho.
Roxy Morla Dice
La violencia de genero no es un acontecimiento contemporáneo ni aislado de la República Dominicana. Esta situación viene de un problema cultural “La sociedad dominicana es patriarcal y machista”.
La mayoría de las mujeres tienen miedo de denunciar a sus agresores, quizás porque son amenazadas por sus esposos de dejarle de suplir a ella y a sus hijos las necesidades básicas (comida, techo) esto se debe en parte, a que las mujeres en su mayoría eran dependientes.
Desde mi punto de vista existen una serie de características o rasgos que permiten identificar ese tipo de hombre, entre los que cabe destacar los siguientes: son posesivos, controladores, las aíslan de sus familiares y amigos, determina cuales prendas de vestir puede usar y cuales no, etc ; y cuando la mujer no acepta realizar las cosas como el le ordena; el “macho alfa” puede el control y la maltrata, golpea, hostiga e inclusive puede causar su muerte.
Me llena de regocijo ver como esta situación esta cambiando, la población femenina esta reflexionando y creando consciencia, todo esto, gracias a la implementación de instituciones eficaces y eficientes destinadas a acompañar, proteger y asistir a la víctima durante todo el proceso e inclusive me atrevo a asegurar que después del mismo, se necesita un seguimiento constante a la víctima. Es de vital importancia que se sigan implementando acciones como estas, y además se deberían organizar charlas para aquellas mujeres que no han decidido dar ese paso de denunciar a sus agresores.
Considero que la Educación es otro factor que ha influido en la disminución del feminicidio en la República Dominicana, puesto que en la actualidad la mujer dominicana tiene una participación activa en el ámbito profesional, por ende, ya no tiene que depender de un hombre.
Roxy Cristal Morla Diaz (2012-0813)
ricardo adams Rondon Dice
mi opinión es en cada momento que se hace una denuncia de violencia domestica debe de darcele seguimiento para que esta no tenga consecuencia tan lamentable como el feminicio, pero también se da la circunstancia que las mujeres no hacen la denuncia con miedo a que este la maltrate mas o creyendo en la palabra del hombre cuando dice que no la volverá a maltratar pero luego si este no recibe un resultado como someterlo ala privación de libertad seguirá maltratando la por que no a visto consecuencia y nose a sometido a tratamiento psicología para evitar su impulso al maltrato