Es la frase que más llama la atención del testimonio de la Sra. Sandra y de su madre cuando visitamos su vivienda en la comunidad Guarani de El Espino, ubicada en el municipio de Charagua del departamento oriental de Santa Cruz de Bolivia, que desde septiembre de 2015 cuenta con servicio de energía eléctrica 24 horas al día gracias a un sistema híbrido (solar – diésel) que fue instalado en la comunidad.
El sistema híbrido, está compuesto por 240 paneles solares de 250 Wp, que hacen un total de 60 kWp de potencia, un banco de baterías de 10.600 Ah, y de un generador diésel de 64 kW de potencia, como respaldo.
Para la distribución de la energía eléctrica a las 128 viviendas de la comunidad se cuenta con una mini red que está formada por una línea trifásica de media tensión (24,9 kV) de 780 m y 2.600 m de línea monofásica de baja tensión, además de 3 transformadores monofásicos de 37,5 kVA cada uno, todos los usuarios del sistema cuentan con medidores prepago.
Desde la instalación del sistema en El Espino los hábitos de consumo se han ido modificando e incrementando, en un principio, la energía eléctrica fue usada básicamente para iluminar las viviendas y calles oscuras del pueblo, pero a medida que fueron descubriendo las ventajas de contar con electricidad 24 horas al día, los usos fueron creciendo.
Se puede observar en el pueblo que después de la iluminación, el siguiente uso fue el de la televisión, ya que la mayor parte de las viviendas cuenta con una antena parabólica en su patio, existen 3 empresas que prestan el servicio de televisión que es pagado, sin ser este un obstáculo para que se expanda este uso. Adicionalmente, los pobladores de El Espino y sus autoridades, resaltan la importancia de la comunicación y para ello, la energía eléctrica ha sido importante, ya que les permite cargar sus celulares.
En un rápido recorrido por la comunidad, observamos que se incrementaron los pequeños negocios (tiendas) que ahora ofrecen la venta de bebidas frías, siendo este el producto de mayor demanda debido a las altas temperaturas que se presentan en esta zona del chaco boliviano.
El uso de refrigeradores en la comunidad no es exclusivo de los negocios, lo es también de las viviendas, ya que la mayoría de la gente de la comunidad ya cuenta con uno, ello ha repercutido en la calidad de la alimentación, como manifiesta doña Sandra, ya que pueden conservar verdura fresca y carne por más tiempo, por ello la frecuencia de viajes a los mercados de las comunidades cercanas se ha reducido.
Al igual que doña Sandra, las autoridades de la comunidad valoran el servicio existente, corroboran el cambio generado por el acceso a la electricidad y manifiestan que existen nuevos proyectos para mejorar la calidad de vida de la población, es el caso del sistema de bombeo de agua que también es alimentado por el sistema hibrido y en un futuro próximo conectaran un molino de granos que aun funciona en base a diésel.
Dejamos la comunidad de El Espino con la satisfacción de haber verificado que el sistema hibrido es de mucha utilidad y que ha mejorado sustancialmente la calidad de vida de los pobladores, pero también con la preocupación de que la población debería involucrarse en la gestión de la energía, haciendo un uso racional del sistema.
Fuente foto: Gentileza Viceministerio de Energía.
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