Según Unicef, hay 29 millones de personas indígenas en América Latina.
Los pueblos indígenas representan el 6% de la población de América Latina; el otro 94 % está representado por mestizos, afro-descendientes , blancos y otras razas. La gran mayoría de nosotros somos mestizos, una raza fruto de la mezcla de españoles e indígenas.
Los pueblos indígenas enfrentan muchas dificultades . En países como Guatemala , donde el 40 por ciento de la población total es indígena, ésta se ve afectada por altos índices de pobreza, analfabetismo y bajos niveles de escolaridad. Irónicamente, los mestizos, no siempre sabemos cómo interactuar con las pueblos indígenas. Sabemos muy poco acerca de sus tradiciones y muchas veces los tratamos como personajes exóticos de un cuento de hadas. Otras veces, simplemente los discriminamos.
A través de una prueba de ADN que me hice recientemente confirmé que tengo un 22% de sangre indígena, algo que mi familia nunca me mencionó, o incluso rechaza. Para mis abuelos colombianos , tíos y tías, y hasta mi propia madre, los ojos claros, pelo rubio y piel blanca siempre han sido los estándares de belleza y de estatus social, un fenómeno social conocido por los expertos como blanqueamiento. Poco sabe mi familia, que se están avergonzados de sí misma.
En mi afán por comprender mejor mi ascendencia e identificar formas de trabajar con las comunidades indígenas, encontré un proyecto en particular, de los cientos que son financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo, que me llamó la atención. Se trata de un proyecto en Chile conocido como Orígenes. Un proyecto en el que el Banco y los chilenos han aprendido de experiencias anteriores no exitosas.
Orígenes se trata de un programa sin precedentes en Chile y en la región dada su escala y la metodología que aplica para facultar a casi 2.000 comunidades indígenas para que lleven a cabo sus propios proyectos de desarrollo. El fin último del programa era establecer una nueva relación entre el gobierno y los pueblos indígenas mediante el fortalecimiento de la identidad y la cultura de los indígenas y el mejoramiento de sus condiciones de vida.
Orígenes ha ayudado a integrar las costumbres indígenas a las operaciones de otros organismos gubernamentales, contribuyendo a que entre 2002 y 2012 se decuplicara el gasto público en programas que benefician a la población indígena. Orígenes también ha ayudado a mejorar las percepciones acerca de los servicios gubernamentales entre las comunidades beneficiarias. En una encuesta realizada en 2012 entre 515 familias participantes en el proyecto, el 55% de los beneficiarios dijeron que los servicios públicos habían mejorado.
Fue solo cuando los mestizos chilenos decidieron entender las tradiciones indígenas, en vez de hacer imposiciones, que los proyectos de desarrollo comenzaron a funcionar. Los mestizos de América Latina , especialmente aquellos que comparten la opinión de mi familia, necesitan aprender cómo Chile ha asimilado su propia diversidad, y no avergonzarse de su propia ascendencia. ¡Es hora de empezar a trabajar juntos!
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Kevin Dice
hola Andres mi nombre es Kevin A Marquez. Espero que tenga un buen día, estoy interesado en saber cual es mi origen, quisiera saber si soy mestizo o mas indígena. me gusto mucho su articulo.