Encontrar trabajo no es nada fácil. Es posible que la información sobre las vacantes existentes sea difícil de obtener, que las aptitudes del solicitante de empleo no se ajusten del todo a los requisitos que exigen las compañías, o que los empleadores sean reacios a contratar a alguien a quien no conocen personalmente.
Para ayudar a los solicitantes de empleo a superar estas barreras, Bolivia inició en 2010 la expansión y mejora de la cobertura del Servicio Plurinacional de Empleo (SPE) con el propósito de incluir una serie instrumentos de intermediación. El programa, que cuenta con apoyo del BID, ofrece a los solicitantes de trabajo una ventanilla única a través de la cual pueden informarse sobre vacantes, asistir a ferias de empleo, obtener asesoramiento laboral personalizado y servicios de orientación informativa, y participar en sesiones de capacitación y en talleres.
Bolivia forma parte de un grupo cada vez más numeroso de países de América Latina y el Caribe que en los últimos años han decidido invertir en intermediación laboral para mejorar el funcionamiento de sus mercados de trabajo. La experiencia en los países de la OCDE y de la región indica que estas herramientas son un una medida costo efectiva para ayudar a los trabajadores a encontrar empleo, y que las personas que las utilizan tienen mayor probabilidad de colocarse que quienes buscan trabajo por otras vías.
Como parte del proyecto se ha financiado el funcionamiento de 10 nuevas oficinas de servicios de empleo, y actualmente se están desarrollando un portal virtual y un centro de atención telefónica que posibilitarán el uso de los servicios desde cualquier lugar del país. El objetivo del proyecto es duplicar (hasta 20.000) el número de solicitantes de empleo a los que se brinda atención cada año e incrementar anualmente en 6.000 el número de ofertas laborales anunciadas por empleadores que utilizan el servicio. El proyecto apunta en particular a reducir la asimetría de información que afecta a las personas de bajos recursos que buscan trabajo, especialmente en el caso del primer empleo.
Adultos jóvenes
Otro componente del proyecto se orienta a los adultos jóvenes con acceso limitado a oportunidades laborales. Se trata de un servicio de capacitación que les permita adiestrarse en diversos trabajos y adquirir la experiencia necesaria para acceder a un empleo permanente. Más de 2.500 jóvenes bolivianos han participado en estas actividades de capacitación desde 2010 a través de esta iniciativa. Los participantes obtienen cobertura de seguro contra accidentes y un subsidio de tres meses con cargo al programa para costear los gastos de transporte y de otra índole durante el período de capacitación.
Actualmente Bolivia está evaluando sus servicios de empleo para velar por que todos los solicitantes de trabajo reciban servicios de igual calidad, así como para reforzar las capacidades de seguimiento y asegurar que los resultados de una evaluación de impacto prevista en el futuro tengan fundamento científico.
“Por fin una oportunidad real”
Sin duda alguna, Nadyd Alborta es consciente de lo que el proyecto ha hecho por ella. A través de esta iniciativa, la estudiante de turismo de 27 años de edad se enteró de la existencia del programa de capacitación ofrecido por Boliviana de Aviación, la aerolínea estatal. En 2012 se inscribió en el mismo, y poco después de completar la formación de tres meses consiguió allí un empleo permanente.
“Estudié turismo y quería un trabajo relacionado pero no pude encontrar oportunidades, el programa me abrió las puertas para volar”, afirma. “Por fin una oportunidad real”.
Leave a Reply Cancel reply