El 19 de noviembre marca el Día Mundial del Retrete. En América Latina y el Caribe, más de dos tercios de la población, no tienen un manejo seguro de excretas, lo que impacta directamente en la salud pública y el medio ambiente.
En esta fecha, queremos resaltar la importancia de ampliar la gama de soluciones de saneamiento, mediante la adopción de soluciones no convencionales, como el saneamiento condominial, saneamiento con contenedores (conteiner based sanitation), soluciones individuales que permitan el aprovechamiento de biogas o la generación de subproductos que mejoren las condiciones de seguridad alimentaria de la población, especialmente rural o en áreas periurbanas, así como la adopción de soluciones basadas en la naturaleza, las cuales han probado ser efectivas en la preservación de nuestros recursos hídricos.
Contar con servicios eficientes e infraestructura resiliente, es una gran lección que nos ha dejado esta pandemia; los impactos del cambio climático (sequias e inundaciones), nos enseñan a gestionar los recursos de manera eficiente y equitativa, para beneficiar al mayor número de personas y lograr el mayor impacto ambiental.
En la División de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), estamos impulsando la iniciativa de Saneamiento Óptimo, con el objetivo de brindar soluciones efectivas, a un mayor número de habitantes y con un menor costo de inversión, las cuales además puedan implementarse en menores plazos. Nuestro propósito es priorizar el acceso al saneamiento a la población y la mejora en la calidad ambiental, mediante soluciones innovadoras y ajustes en nuestros esquemas de gobernanza que permitan su implementación efectiva.
Como ejemplo, podemos destacar el trabajo que está realizando el gobierno de la República Dominicana mediante el desarrollo de proyectos de saneamiento integrales con inserción social a gran escala, que promueven el desarrollo local, mejoran la calidad de vida de la gente a través de soluciones consensuadas, con impactos positivos para el medio ambiente, que, sin duda transformarán dicho país. Estos incluyen intervenciones de saneamiento en las zonas costeras (Proyecto Boca Chica).
En el caso del proyecto de Boca Chica, se ha invertido con el concepto de saneamiento óptimo, es decir, pasar de la ingeniería tradicional a poner el foco desde el inicio en las personas. La pregunta era: ¿Cómo conseguir que los hogares se conecten lo antes posible al alcantarillado? para que, tanto ellas como su entorno sean beneficiarias del impacto positivo del saneamiento lo antes posible. Muchos hogares cuentan con instalaciones sanitarias en la parte trasera o en los patios, por lo que tienen que hacer una importante inversión para conectarse con un alcantarillado que pasa por enfrente de sus casas. Además, muchas viviendas se encuentran en áreas de calles estrechas e irregulares, donde las soluciones de alcantarillado convencional simplemente no funcionan, por lo que, habitualmente se quedan fuera de los proyectos.
En el caso de Boca Chica, la solución se ha encontrado con el empleo del saneamiento condominial, que permite dar acceso en áreas de urbanismo caótico combinado con un programa específico de subsidio y de microcréditos, para hacer las modificaciones necesarias a las instalaciones sanitarias. De esta forma, nos aseguramos de que los 46.000 hogares van a estar conectados desde el inicio.

Uno de los factores clave para que esta transición se lleve a cabo, es el trabajo articulado entre los diferentes actores clave de este sector. Por ejemplo, instituciones públicas, quienes implementan los ajustes en la gobernanza y priorizan recursos de inversión para estos proyectos; los prestadores de servicios de agua y saneamiento, que estructuran e implementan proyectos que combinen soluciones convencionales con soluciones no convencionales; las organizaciones no gubernamentales, quienes promueven el trabajo social requerido y la adecuada adopción de estas soluciones; y, principalmente las comunidades beneficiarias que hoy carecen de acceso a servicios de saneamiento adecuados, para que sean parte de la cadena productiva del saneamiento, aportando con su trabajo y conocimiento, así como el uso eficiente de estas soluciones.
Leave a Reply