Hace poco, me tocó organizar un diálogo con funcionarios públicos que buscan transparentar la información sobre inversión pública. En el BID creemos que América Latina y el Caribe necesita más y mejor inversión pública, y para esto último es clave una mayor transparencia.
Algunos antecedentes antes de hablar de nuestro diálogo. La falta de inversión pública es un impedimento al crecimiento sostenido. En materia de infraestructura, se deberían de aumentar las inversiones en 3 puntos porcentuales/PIB para que la región pueda alcanzar la media de las economías desarrolladas. En el caso de Colombia, se ha estimado que la inversión pública debería duplicarse para que la economía crezca al 6% anual.
Esta brecha de inversión pública afecta a diario a millones de ciudadanos de la región. Por ejemplo, en Costa Rica, el estado de las carreteras genera problemas de tránsito y de seguridad al volante. En Paraguay, se necesita más infraestructura básica en el sistema educativo. Y en situaciones de emergencia, la inversión en infraestructura es vital para acelerar los procesos de reconstrucción que devuelvan vida a las comunidades, como se necesita en Perú y en Colombia tras los recientes desastres naturales.
Las relaciones entre inversión pública, productividad y crecimiento ya han sido suficientemente documentadas. Ahora el tema es comunicar la importancia de la transparencia y eficiencia para conseguir una inversión pública de calidad y al servicio de los ciudadanos, y qué podemos hacer para mejorarla.
Existen dos maneras, que no son mutuamente excluyentes, de trabajar para cerrar esta brecha.
Una primera sería incrementar el gasto en inversión pública sobre el PIB. Como lo demuestran recientes estudios, aunque los niveles de inversión pública en la región están creciendo, los países todavía están lejos de lo que podría esperarse y la inversión pública es volátil. Entre 2001 y 2004, el gasto de inversión pública sobre PIB en la región fue en torno al 3%. Una década más tarde (2011-2014), subió hasta oscilar entre el 4% y el 5%. Aún en ese nivel, estaban casi dos puntos por debajo de los países ASEAN.
Sin embargo, invertir más puede significar meter una manguera de agua en una tinaja agujereada. Por eso, una segunda vía es apostar por una inversión pública de mayor calidad, lo que puede dar importantes resultados. Según el FMI, los países con una inversión pública más eficiente pueden llegar a sacar el doble de rédito por cada dólar invertido con respecto a aquéllos menos eficientes, pero sólo si logran poner la inversión pública a salvo de las malas decisiones y de la captura de intereses privados.
En otras palabras, la falta de transparencia de la inversión pública se traduce en más ineficiencia. Esta fue una de las lecciones principales del VII Seminario de la Red de Sistemas Nacionales de Inversión Pública de América Latina y el Caribe (SNIPs), celebrada los 18 y 19 de Abril en Asunción (Paraguay), organizada por el BID.
Durante este evento el BID lanzó MapaInversiones. Esta iniciativa regional busca apoyar a los países de la región a mejorar la calidad de la inversión pública, trabajando con los gobiernos que deseen transparentar sus inversiones públicas.
A tal fin, se están diseñando pilotos para la georreferenciación y visualización de datos de inversión pública en los países miembros de la iniciativa. Cómo resaltó Facundo Salinas, Director de Inversión Pública de Paraguay y anfitrión del evento, la clave es que “lo público sea público”. Pero de nada sirve poner la información en línea si no se realiza a través de formatos que ayuden a la toma de decisiones por parte de la ciudadanía.
Hubo dos paneles relacionados con MapaInversiones. En un primer panel participé con Carolina Londoño (Colombia), Facundo Salinas (Paraguay) y Francisco Tula (Costa Rica). Este panel se centró en la experiencia de los países miembros con la iniciativa, dando a conocer sus beneficios y riesgos. Las conclusiones fueron que:
- Para adaptar los Sistemas de Inversión Pública al siglo XXI, es fundamental abrir la inversión pública a la ciudadanía y generar un círculo virtuoso entre acción institucional, rendición de cuentas y control social.
- Se debe asegurar la calidad de los datos que están a disposición de los funcionarios públicos, para optimizar la toma de decisiones y utilizar las plataformas de información como verdaderos tableros de control.
- Además de contar con las mejores herramientas tecnológicas, los formuladores de políticas deben asegurar que las instituciones públicas acompañen este proceso de modernización.
En un segundo panel, Alexander Simoes, cofundador de Datawheel, empresa que surge del MIT-Media Lab del Massachusetts Institute of Technology (MIT), explicó la importancia, potencial y utilidad de las visualizaciones de datos para la toma de decisiones en inversión pública. Los puntos centrales de esta presentación:
- Las nuevas tecnologías permiten al usuario crear su propio camino de datos o universo de visualizaciones, es decir, el recorrido por los datos se torne único y personal para cada usuario.
- Es fundamental avanzar en la simplificación e interpretación de grandes conjuntos de datos, como Big Data, con el fin de que los datos se conviertan en historias o abran la puerta a nuevas políticas.
- Que los tomadores de decisiones, a todos los niveles de gobierno, tengan la capacidad necesaria para gestionar diversos conjuntos de datos y utilizarlos de acuerdo a sus necesidades de actuación.
En un artículo a publicarse próximamente, Jorge Kaufmann, Especialista en Modernización del Estado del BID, abordará otros asuntos de importancia para la inversión pública en la región, incluyendo las diferentes estrategias para sostener la inversión pública en un contexto macroeconómico adverso, y la utilidad de conocer casos de éxito en la implementación del SNIP como herramienta de gestión pública. Los invito a que lo lean para continuar el debate.
Interesante. Sin embargo en el Gobierno del Estado de México, en la secretaria de Desarrollo Social. Hay un interesante Modelo Estratégico Multidimensional. Que alinea la obra publica con un criterio de recomendación social, Los ODM, los ODS, Planes de Desarrollo multinivel (Federal, Estatal y municipal), con la Contabilidad gubernamental y la Estructura Programática con la que están armados los presupuestos anuales de forma sectorial. Una características es que ya contamos con mapas de inversiones de la obra publica, diagramas multinivel que relacionan conceptos de Sectorización-ODM-ODS-PLANES DE DESARROLLO-PRESUPUESTOS-ESTRUCTURA PROGRAMATICA, ademas de contar con datos abiertos y un repositorio digital “Datawarehouse” de conocimientos. Ya inscribimos el proyecto “SOADS” en evento III PREMIO ANUAL “GESTION PARA RESULTADOS EN EL DESARROLLO” 2017. Esperando estar en los finalistas.