Banco Interamericano de Desarrollo
facebook
twitter
youtube
linkedin
instagram
Abierto al públicoBeyond BordersCaribbean Development TrendsCiudades SosteniblesEnergía para el FuturoEnfoque EducaciónFactor TrabajoGente SaludableGestión fiscalGobernarteIdeas MatterIdeas que CuentanIdeaçãoImpactoIndustrias CreativasLa Maleta AbiertaMoviliblogMás Allá de las FronterasNegocios SosteniblesPrimeros PasosPuntos sobre la iSeguridad CiudadanaSostenibilidadVolvamos a la fuente¿Y si hablamos de igualdad?Inicio
Administración pública Agua y saneamiento Ciencia, tecnología e innovación Comercio e integración regional Conocimeinto Abierto Desarrollo infantil temprano Desarrollo urbano y vivienda Educación Energía Género y diversidad Impacto Industrias Creativas Medio ambiente, cambio climático y Salvaguardias Política y gestión fiscal Salud Sin Miedos Trabajo y pensiones
  • Skip to main content
  • Skip to secondary menu
  • Skip to primary sidebar
  • Skip to footer

Volvamos a la fuente

Agua, saneamiento y residuos solidos

  • INICIO
  • CATEGORIAS
    • Agua no facturada
    • Agua y saneamiento
    • Aguas residuales
    • AquaFund
    • Conocimiento
    • DESTACADOS
    • Fuente de Innovación
    • Género
    • Hydro-BID
    • Innovación y Datos
    • Recurso hídrico
    • Residuos Sólidos
    • Saneamiento óptimo
    • WASH
  • autores
  • Español

El agua según Napoleón

July 14, 2014 Por Anamaría Núñez Zelaya 3 Comentarios


 

En el transcurso de 1804, luego de haberse coronado Emperador de los franceses, reinando desde el Castillo de Saint-Cloud entre sueños de gloriosas conquistas militares, el corso Bonaparte por ahora victorioso, tuvo una idea urbanística brillante: mejorar el aprovisionamiento de agua en Paris.

A comienzos del siglo XIX, el éxodo rural hacia las grandes ciudades francesas se vio acelerado por razones económicas y sociales. Paris, ya en el centro de la economía gálica, pasó de medio millón de habitantes a cerca de dos millones, con una infraestructura de más de un siglo, prácticamente inservible.

Los paraguas de las calles grises minuciosamente descritos a través de la obra de Balzac, servían para protegerse de la molesta lluvia y salvarse de las aguas servidas que caían no del cielo, pero de las ventanas de los apartamentos sin ningún tipo de alcantarillado. Estas no eran prácticas dignas de la capital del Imperio más grande de Europa.

El megalómano empedernido ordena entonces la construcción de un canal para traer parte de las aguas del l’Ourcq, que termina de construirse después de su muerte en 1824 y que permite a la ciudad disponer de 100 000 metros cúbicos de agua adicionales. Le siguen el canal Saint-Denis (en funcionamiento a partir de 1821) y Saint-Martin (1825), actualmente lugar favorito para el picnic dominguero gracias a los esfuerzos de saneamiento del Sena. Sin embargo, las costumbres de buena higiene personal siguen siendo las grandes ausentes de los manuales de cortesía de la época. Más de alguno receta “bañarse con precaución una vez al mes.”

Institucionalmente, el dictador iluminado empuja una reforma que unifica los dos entes reguladores (Aguas de Paris y Aguas del Rey), que pasan a ser enteramente municipales, lo que facilita la gestión del recurso. Y aunque todo apunta a una mayor disponibilidad de agua, la calidad del servicio no mejora. Dados los altos niveles de contaminación de las aguas de superficie (de los canales) y freáticas (de múltiples pozos), no faltaba ser estratega militar para predecir la epidemia de cólera (importado del Ganges, pasando por Londres) que fulmina la población capitalina en 1832.

Un poco menos de medio siglo después, será el sobrino, Charles-Louis Napoleón Bonaparte o simplemente Napoleón III (fiel a una cierta tendencia imperialista familiar) quien encare uno de los planes de ordenamiento de suelos más importantes de la historia (fuente de inspiración de las grandes obras de modernización de los “pequeños Paris” con sabor americano, como Buenos Aires, Rio de Janeiro y México DF). Dando carta blanca al baron Haussmann y su cómplice Eugène Belgrand, como parte de ese plan, se diseña e implementa en 1852, un programa municipal de gestión de agua potable y aguas residuales que termina de ser ejecutado en 1924.

El programa prevé nuevas fuentes de agua (construcción y expansión de canales, por ejemplo), mejoras en términos de calidad (métodos de filtración y almacenamiento) y sistemas de cobranza más efectivos (exclusivamente municipales). Tomando ejemplo de la Cloaca Máxima romana, los visionarios demoledores de patrimonio crean un verdadero sistema de drenaje y alcantarillado que permite, entre mil maravillas, la evacuación inmediata de las aguas de lluvia y aguas servidas industriales o domesticas (desgraciadamente, descargadas directamente rio abajo en el Sena). Las construcciones subterráneas siguen el ritmo de las edificaciones de la superficie y en 1911, la red de alcantarillado mide 1214 kilómetros (de 14 km en 1833).

Hoy, gracias a esta infraestructura de origen napoleónico, Paris es la única capital que cuenta con dos redes de distribución de agua: una de baja presión (no potable) de tiempos de Napoleón I, y una potable de alta presión del sobrino Napoleón III. Muy a pesar de Tolstoï: nada mal como legado familiar.

***********

L’eau selon Napoléon

Au cours de l’année 1804, après avoir été couronné empereur des Français, régnant depuis le Château de Saint-Cloud entre des rêves glorieux de conquêtes militaires, Bonaparte le Corse, victorieux pour le moment, a eu une idée de planification urbaine brillante: améliorer l’approvisionnement en eau à Paris.

Au début du XIXe siècle, l’exode rural vers les grandes villes françaises a été accéléré suite à des changements socioéconomiques. Paris, déjà au centre de l’économie galloise, passe d’un demi-million d’habitants à environs deux millions, avec une infrastructure datant de plus d’un siècle, devenue pratiquement inutile.

Les parapluies des rues grises soigneusement décrits au fils de la Comédie humaine de Balzac, servaient à se protéger de la pluie gênante et s’échapper des eaux usées tombées ne pas du ciel mais des fenêtres des appartements sans aucun type s’assainissement. Ces pratiques n’étaient pas dignes de la capitale du plus grand empire d’Europe.

Le mégalomane acharné a donc commissionné la construction d’un canal pour amener l’eau de l’Ourcq, achevée après sa mort en 1824 et qui permet à la ville de disposer de 100 000 mètres cubes d’eau supplémentaire. C’est ensuite le tour du canal Saint-Denis (achevé en 1821) et par la suite, le canal Saint-Martin (1825), devenu aujourd’hui un lieu de pique-nique préféré du dimanche, grâce aux travaux d’assainissement de la Seine. Cependant, les coutumes de la bonne hygiène personnelle demeurent absentes des manuels de civilité de l’époque. Plus d’un prescrit de “prendre des bains avec précaution une fois par mois.”

Sur le plan institutionnel, le dictateur illuminé fait avancer une réforme pour unifier les deux entités de régulation du service (Eaux de Paris et Eaux du Roi), qui deviennent entièrement municipales, ce qui facilite la gestion des ressources en eau. Bien qu’il y a une plus grande disponibilité, la qualité du service ne s’améliore pas. Compte tenu des niveaux élevés de pollution des eaux en surface (canaux) et souterraines (plusieurs puits), il ne fallait pas être un stratège militaire pour prédire les dégâts causés par une épidémie de choléra (importée du Ganges, en passant par Londres) qui terrasse la population de la capitale en 1832.

Un peu moins d’un demi-siècle plus tard, c’est le jeune neveu, Charles-Louis-Napoléon Bonaparte ou tout simplement Napoléon III (gardant une certaine tendance impérialiste de famille) qui prends en main l’un des plan d’aménagement du territoire le plus important de l’histoire (inspirant par la suite les grands travaux de modernisation des “petit Paris” américains, comme Buenos Aires, Rio de Janeiro et la ville de Mexico). Le baron Haussmann et son complice Eugène Belgrand ont carte blanche pour concevoir un programme de gestion municipale d’eau potable et eaux usées, mis en œuvre en 1852 et qui s’achève en 1924.

Le programme prévoit l’approvisionnement de nouvelles sources en eau (la construction et l’expansion de canaux, par exemple), l’amélioration de la qualité (filtration et réservoirs) et des systèmes de paiement plus efficaces (exclusivement municipaux). Prenant l’exemple de la Cloaca Maxima romaine, les visionnaires démolisseurs du patrimoine dessinent un véritable réseau d’égouts qui, entre mille merveilles, permet l’évacuation immédiate de l’eau de pluie et des eaux usées industrielles ou des ménages (malheureusement déversées directement en aval de la Seine). Les constructions souterraines suivent le rythme des édifications en surface, et en 1911 le réseau d’égouts mesure 1214 kilomètres (de 14 km en 1833).

Aujourd’hui, grâce à cette infrastructure d’origine napoléonienne, Paris est la seule capitale qui dispose de deux réseaux de distribution d’eau: un réseau de basse pression (non potable) de Napoléon Ier, et un système d’eau potable à haute pression datant de Napoléon III. Malgré Tolstoï : pas mal comme héritage familial.

Merci @CorinneCathala d’avoir partagé ton bon sens linguistique lors de cette traduction et @DSubiza pour ton art!


Archivado bajo:Sin categorizar

Anamaría Núñez Zelaya

Anamaría Núñez es especialista senior de la División de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo en Washington DC. Entre sus responsabilidades principales en la División, Anamaría es la encargada de los temas de género e inclusión, forma parte del equipo de Haití, además de apoyar iniciativas relacionadas a diseminación de conocimiento particularmente vinculadas a derechos humanos, servicios fuera del hogar e innovación. Anamaría tiene una maestría en Relaciones Internacionales del Instituto de Ciencias Políticas de París (Sciences Po Paris) y otra maestría en Políticas Públicas de la Universidad de Georgetown.

Reader Interactions

Comments

  1. MONICA dice

    July 17, 2014 at 8:05 pm

    Que interesante es ver lo importante de proyectarse en el tema de alcantarillado, como lo hizo Napoleón.

    Cada día somos más en este planeta y si bien ya tenemos excelentes tecnologías en este tema, CULTURA SANITARIA es lo que tenemos que tener para no afectarlas.

    Reply
  2. MONICA dice

    July 17, 2014 at 8:05 pm

    Que interesante es ver lo importante de proyectarse en el tema de alcantarillado, como lo hizo Napoleón.

    Cada día somos más en este planeta y si bien ya tenemos excelentes tecnologías en este tema, CULTURA SANITARIA es lo que tenemos que tener para no afectarlas.

    Reply
  3. MONICA dice

    July 17, 2014 at 8:05 pm

    Que interesante es ver lo importante de proyectarse en el tema de alcantarillado, como lo hizo Napoleón.

    Cada día somos más en este planeta y si bien ya tenemos excelentes tecnologías en este tema, CULTURA SANITARIA es lo que tenemos que tener para no afectarlas.

    Reply

Leave a Reply Cancel reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Primary Sidebar

Siguenos

Suscribete

Buscar

Entradas Recientes

  • Too Good to Waste: 14 Proyectos en marcha para  impulsar la economía circular y reducir las emisiones de metano en la región
  • Building Information Modeling (BIM) en Acción: Casos de Éxito en Agua y Saneamiento
  • El retroceso de los glaciares y su costo para América Latina: lo que debes saber
  • Los desafíos de Irma, Morelia y Sobeida para conseguir agua en Guatemala
  • El futuro de Sócrates en Pampa Hermosa

Footer

Banco Interamericano de Desarrollo
facebook
twitter
youtube
youtube
youtube

    Blogs escritos por empleados del BID:

    Copyright © Banco Interamericano de Desarrollo ("BID"). Este trabajo está disponible bajo los términos de una licencia Creative Commons IGO 3.0 Reconocimiento-No comercial-Sin Obras Derivadas. (CC-IGO 3.0 BY-NC-ND) y pueden reproducirse con la debida atribución al BID y para cualquier uso no comercial. No se permite ningún trabajo derivado. Cualquier disputa relacionada con el uso de las obras del BID que no se pueda resolver de manera amistosa se someterá a arbitraje de conformidad con el reglamento de la CNUDMI. El uso del nombre del BID para cualquier otro propósito que no sea la atribución, y el uso del logotipo del BID estarán sujetos a un acuerdo de licencia escrito por separado entre el BID y el usuario y no está autorizado como parte de esta licencia CC-IGO. Tenga en cuenta que el enlace proporcionado anteriormente incluye términos y condiciones adicionales de la licencia.


    Blogs escritos por autores externos:

    Para preguntas relacionadas con los derechos de autor para autores que no son empleados del BID, por favor complete el formulario de contacto de este blog.

    Las opiniones expresadas en este blog son las de los autores y no necesariamente reflejan las opiniones del BID, su Directorio Ejecutivo o los países que representan.

    Atribución: además de otorgar la atribución al respectivo autor y propietario de los derechos de autor, según proceda, le agradeceríamos que incluyera un enlace que remita al sitio web de los blogs del BID.



    Política de privacidad

    Derechos de autor © 2025 · Magazine Pro en Genesis Framework · WordPress · Log in

    Banco Interamericano de Desarrollo

    Aviso Legal

    Las opiniones expresadas en estos blogs son las de los autores y no necesariamente reflejan las opiniones del Banco Interamericano de Desarrollo, sus directivas, la Asamblea de Gobernadores o sus países miembros.

    facebook
    twitter
    youtube
    En este sitio web se utilizan cookies para optimizar la funcionalidad y brindar la mejor experiencia posible. Si continúa visitando otras páginas, se instalarán cookies en su navegador.
    Para obtener más información al respecto, haga clic aquí.
    x
    Manage consent

    Privacy Overview

    This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
    Necessary
    Always Enabled
    Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
    Non-necessary
    Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
    SAVE & ACCEPT