© Blog Gente Saludable de la División de Protección Social y Salud del BID
por Juan Fernando Uribe Arcila
Una preocupación universal de los varones después de cierta edad, es su salud prostática y por ende su forma de orinar. Hasta hace pocos meses hubiera sido una idea desafortunada intentar relacionar la micción con la dieta, uno de los ítems fundamentales del llamado “estilo de vida”.
Todo cambió cuando los estudios comenzaron a vincular por doquier la disfunción eréctil y la dieta, hasta el punto que tener mala erección se convirtió en un marcador fiable de poca salud cardiovascular (link en inglés) e incluso endotelial.
Luego los estudios comenzaron a relacionar la disfunción eréctil y los llamados síntomas urinarios bajos, lo que permitió incluso que la Administración de alimentos y drogas de Estados Unidos (FDA) aprobara el uso de los inhibidores de Fosfodiestarasa 5 (IPDE-5) como el Tadalafil, un vasodilatador pro-eréctil, en el tratamiento del síndrome que combina síntomas urinarios bajos e hiperplasia prostática benigna. Esto hubiera sido impensable unos años atrás.
Por una ley matemática elemental, se pudo inferir también una relación entre la dieta y los síntomas urinarios bajos, puesto que las substancias que permiten el funcionamiento del músculo liso vesical y aún de la próstata son las mismos del cuerpo cavernoso del pene y de la erección, siendo quizás el más importante el óxido nítrico, aunque no sea la única vía.
Si esta relación novedosa de dieta-síntomas urinarios bajos-próstata es cierta dos conclusiones se desprenden de inmediato:
- El paradigma de comenzar la atención en la nutrición de los varones luego de los 40 años está equivocado, puesto que es en las tres décadas perdidas, de los 10 a los 39 años, cuando en un festival de pizzas, hamburguesas, comida chatarra y en general de malas dietas se altera por completo el funcionamiento prostático y por ende de la micción, que con grandes costos deberá atenderse luego por el resto de la vida.
- Cualquier tratamiento futuro tendrá un enfoque integral utilizando combinaciones de medicamentos para tratar problemas comunes entre vejiga, próstata y pene.
En conclusión: si usted quiere orinar bien en el futuro, coma bien en el presente, aunque todavía no entienda bien por qué.
Juan Fernando Uribe Arcila, colombiano, es uno de los finalistas del concurso de bloggers en salud del BID. Además de urólogo y profesor titular de la Universidad CES de Colombia, se desempaña como escritor y conferencista nacional e internacional en temas de sexología.
María jesus Basurto Orrego dice
Un articulo interesantisimo, desde tiempos ansestrales ya se sabía que la mayoría de las enfermedades se generan en las tripas, somos lo que comemos, o nos beneficia o nos perjudica “que tus alimentos sean tu medicina y tu medicina tus aliemtos”