Teniendo en cuenta el gran potencial que tienen los países de América Latina y el Caribe (LAC) para producir hidrógeno limpio y de bajas emisiones, 14 países de la región suscribieron la declaración para la implementación de un sistema regional de certificación de hidrógeno y sus derivados (“CertHiLAC”) que cumpla con estándares internacionales y considere las características propias de LAC.
La importancia de establecer sistemas de certificación es cada vez más evidente para consolidar un mercado global de hidrógeno limpio y de bajo contenido de carbono. Los sistemas de certificación le entregan información específica del hidrógeno limpio a los compradores y les otorgan certeza sobre sus atributos clave, como intensidad de carbono, el origen del agua usada para la electrólisis, entre otros.
También permiten a los productores conocer los atributos con los que debe cumplir el hidrógeno para poder acceder a ciertos mercados o compradores, principalmente en Europa y Asia, así como también los beneficios tributarios y otros incentivos públicos. Teniendo en cuenta que muchos países trabajan en regulaciones y sistemas de certificación propios para el hidrógeno limpio, es importante establecer un sistema regional de certificación para LAC.
¿Por qué contar con una certificación de este tipo para la región?
La abundancia de recursos renovables ubica a LAC como una de las principales regiones productoras de hidrógeno limpio [1]. Aunque algunos productores esperan abastecer la demanda local y regional, una parte significativa tiene como objetivo la exportación hacia Europa y Asia próximamente, así como en futuro cercano América del Norte. La existencia de un sistema regional de certificación facilitará la creación de mercados locales e intrarregionales y permitirá acceder a offtakers de otras regiones en las que se reconozca el sistema de certificación de LAC. Para avanzar en este reconocimiento, se deberán establecer atributos similares o armonizables con otros sistemas de certificación y regulaciones internacionales.
Sin embargo, como se muestra en la anterior tabla, un sistema regional también debe incorporar atributos propios de sostenibilidad ambiental y social que son de gran relevancia para LAC y podrán marcar la diferencia con el hidrógeno limpio producido en otras regiones. Uno de los principales atributos que se deberá certificar es el impacto positivo de los proyectos de hidrógeno limpio en las comunidades locales y los pueblos originarios aledaños a estos. También es importante asegurar un uso sustentable del agua y considerar sus fuentes debido a la escasez hídrica que existe en algunos lugares de la región.
Para lograr la producción de un hidrógeno limpio que cumpla con atributos internacionales y regionales y evitar dobles esfuerzos de los países de LAC, 14 países de la región han decidido adherirse a CertHiLAC. Este primer hito se cumplió el pasado 8 de noviembre de 2023 durante la Semana de la Energía en Montevideo, Uruguay. Los ministerios y secretarías de Energía de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay, República Dominicana, Trinidad y Tobago y Uruguay, con el acompañamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (“BID”) y la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) suscribieron la “Declaración conjunta para la implementación de un sistema de certificación de hidrógeno limpio y/o de bajas emisiones y sus derivados para Latinoamérica y el Caribe”. Posteriormente, como parte del anuncio del lanzamiento de CertHiLAC en la Conferencia de Naciones Unidas para el cambio climático, COP28, México también se adhirió a CertHiLAC.
¿Cómo funcionará CertHiLAC?
CertHiLAC apoyará a que los sistemas de certificación locales puedan armonizarse y entregará herramientas a los países para definir los estándares y regulaciones con los que debe cumplir el hidrógeno limpio y de bajas emisiones. A pesar de que será un sistema voluntario, la participación de los gobiernos en su implementación es clave para que pueda ser armonizado con las regulaciones nacionales. CertHiLAC también fomentará la integración regional y abrirá la posibilidad de negociar en bloque el Hidrógeno producido en diferentes países de LAC al compartir los mismos atributos, aumentando el poder de negociación y la competitividad de los productores latinoamericanos.
Para su implementación, el BID elaboró la “Guía para la Implementación de un Sistema de Certificación de Hidrógeno para América Latina y el Caribe”, disponible en inglés. La publicación identifica las principales características con las que debe cumplir el sistema y establece un plan de acción para la implementación de CertHiLAC. En ella se presentan los principales actores que conformarán el sistema y sus roles, así como los atributos que podría exigir el sistema teniendo en cuenta parámetros internacionales y regionales. Las recomendaciones que presenta la guía deberán ser discutidas y validadas por los representantes de los países signatarios de la declaración.
En la siguiente figura se presentan los principales pasos del plan de acción diseñado:
La implementación de CertHiLAC implicará un esfuerzo logístico importante, por lo que la coordinación intergubernamental contribuirá a avanzar en la creación de un mercado de hidrógeno limpio en LAC, que posicionará a la región como uno de las principales productoras del mundo.
Invitamos a todos a conocer la “Guía para la Implementación de un Sistema de Certificación de Hidrógeno para América Latina y el Caribe”
[1] Banco Interamericano de Desarrollo et al. (2023). Unlocking Green and Just Hydrogen in Latin America and the Caribbean. Tomado de: https://publications.iadb.org/en/unlocking-green-and-just-hydrogen-latin-america-and-caribbean
Esta entrada fue elaborada en co-autoría con Paola Pimentel
Paola Galeano es abogada y politóloga de la Universidad EAFIT. Está admitida a la práctica en Colombia y Nueva York, y tiene una maestría en Derecho de los Negocios Globales de la Universidad de Nueva York y una Maestría en Derecho Internacional y Comparado de la Universidad Nacional de Singapur.
Paola es consultora del Banco Interamericano de Desarrollo y otras organizaciones en hidrógeno, energía y recursos naturales. También ha trabajado en firmas de abogados en Bogotá, Colombia, y en el Ministerio de Minas y Energía de Colombia como Jefe de la Oficina Jurídica y Asesora del Ministro, coordinando asuntos legales y de políticas públicas para los sectores de energía, minería e hidrocarburos.
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