En América Latina, aún hay 22 millones de personas que no tienen acceso a la energía eléctrica. Estas personas viven en zonas remotas o alejadas de las ciudades, o en áreas de difícil acceso, donde la red eléctrica no llega debido a los altos costos que se requiere para extenderla. Entonces estas comunidades usan querosene, velas o generadores que funcionan a diésel para iluminar sus viviendas y comercios, lo cual en muchos casos es perjudicial para la salud, para el planeta y el bolsillo del usuario (o del Estado, en caso de sistemas subsidiados).
Una alternativa cada vez más viable para ampliar el acceso a estas zonas son las mini-redes.
¿Qué es una mini red? Es un sistema eléctrico que genera electricidad a pequeña escala, (entre 10kW y 10MW), distribuida por redes a media y baja tensión. Una mini-red puede, por ejemplo, suministrar electricidad a un grupo de casas y pequeños comercios, proporcionando electricidad confiable y facilitando la incorporación de fuentes renovables de generación. También puede satisfacer demandas de sistemas productivos como sistemas de riesgo, molinos de grano, y refrigeración.
El principal desafío técnico de las mini-redes eléctricas es cómo controlar los sistemas de generación conectados a ellas, a fin de balancear oferta y demanda y garantizar la seguridad del suministro. Sin embargo, gracias a los avances tecnológicos en materia de comunicación y control, este desafío ha sido superado ya que cada vez hay mejores sistemas de control, mejores paneles solares y baterías más eficientes, en los casos de las mini redes que usan energía solar.
Las mini-redes pueden actuar aisladas (por ejemplo en caso de comunidades alejadas), o conectadas al sistema eléctrico central. Por ejemplo, en el mundo hay cientos de hospitales, universidades, instalaciones militares e industrias que han instalado sus propios sistemas de generación, obteniendo así una mejor confiabilidad que la disponible a través de la red eléctrica general preexistente.
Al mismo tiempo, las mini-redes son una forma de hacer viable la consecución de energía eléctrica en forma constante y confiable y a un costo accesible para la economía rural, en aquellos casos que la población está lejos de la red de distribución principal y en donde la densidad de la población es baja y no se justifica una inversión para extender la red de transmisión eléctrica.
El futuro de éstas tecnología de mini redes es muy alentadora.
De acuerdo a la Agencia Internacional de Energía, casi la mitad de la energía a instalarse en el futuro será en base a mini redes, lo que permitirá lograr que en el año 2030 podamos finalmente cerrar la brecha que mantienen hoy día los millones de latinoamericanos sin acceso a suministro eléctrico.
Las mini-redes que funcionan con energía solar, en especial las híbridas, (aquellas que cuando el sol se oculta por la noche, siguen funcionando con un generador diésel o con baterías), son una gran solución para este problema. Sin embargo, tenemos que ser más ágiles en su implementación.
Las principales dificultades que hemos enfrentado para su desarrollo en la región no han sido tecnológicas sino institucionales. Y en ese sentido necesitamos fortalecer las capacidades institucionales de los países, mejorar la regulación local, los estímulos al sector privado para invertir en ciertas zonas y países de la región, capacitar mano de obra local, y facilitar los servicios financieros para este tipo de inversión.
El Rol de los Gobiernos de la región
Los gobiernos latinoamericanos junto con las multilaterales como el BID pueden contribuir con esta expansión de mini-redes garantizando las inversiones, facilitando el acceso a la electricidad, educando a los potenciales usuarios y contribuyendo a la sostenibilidad de los proyectos a través de acuerdos “off-take”, organizando y agrupando villas o pueblos rurales, y de esa forma, aumentando el número de potenciales clientes, ofreciéndoles formación e incentivos.
Los gobiernos y organismos multilaterales, pueden contribuir desarrollando y aprobando la regulación necesaria para las mini-redes, así como identificando potenciales emplazamientos donde se pueden instalar y capacitando a las comunidades locales para que se conviertan en socios y no sólo en consumidores.
Por último, pero no menos importante, pueden coadyuvar a simplificar el proceso de desarrollo de la instalación de las mini-redes, acelerando la entrada al país de los equipos (en caso que sean importados), facilitando la rápida autorización de las obras, inspecciones, y todos los procedimientos que se requieren por parte de los gobiernos departamentales y estatales, es decir recortar el “redtape”, menguar la burocracia y mejorar la transparencia en los procedimientos.
Todo esto también abre las puertas a las empresas eléctricas, en especial aquellas empresas públicas que están hambrientas de negocios, por lo que representa una oportunidad única y esta es, entrar al mercado de mini-redes, con un gran número de clientes sin servir.
Latinoamérica tiene mucho por delante para poder alcanzar 100% de electrificación y las mini-redes pueden ser una de las alternativas viables y con alto impacto para que más personas tengan acceso a la electricidad, contribuyendo a reducir las brechas de bienestar, mejorando la productividad, mejorando el desarrollo general de los países latinoamericanos y Mejorando Vidas!
Esta idea es excelente ya que con el tiempo ayudarán a los latinoamericanos que no poseen electricidad, asi se evitara que muchas familias de excasos recursos o que viven alejados de la poblacion no sufran enfermedades, porque al utilizar implementos como velas, generadores a diesel, querosene es danino.
Ademas para la produccion es eficaz y de vital importancia que se genere este proyecto, ya que asi se producira ganancias y efectividad.
Mini-redes es un proyecto que motiva a mas personas a apasionarse con esta idea de generar electricidad logrando así el progreso en nuestros países latinos.
Las mini redes me parece para mi una buena opción para que toda la población latinoamericana tenga energía ya que la energía es vital para muchos negocios e incluso para el hogar las mini redes seria una buena idea para abastecer a la población latinoamericana pero para que esto suceda los grandes lideres de latinoamericano tendrían que ponerse de acuerdo y brindar mas apoyo a la mini red para que toda la población tenga energía ya que es un servicio básico muy importante para el desarrollo
Pienso que es una manera de generar desarrollo, en las comunidades mas despreocupadas de latinoamericano, pienso que es necesario implementar las mini-redes paras así evitar el consumo de otros combustibles que son demasiado perjudiciales para las salud de estas personas que constantemente están expuestas a la contaminación.
El gobierno debería ser el primer interesado en la implementación de las denominadas mini-redes, así beneficiando a poblaciones donde la energía eléctrica suministrada por la red preexistente no llega. Sería muy bueno, además, alcanzar el objetivo para el año 2030 de que todos los latinoamericanos contemos con energía eléctrica y seamos capaces de estar al tanto en un mundo globalizado y movido principalmente por la tecnología que utiliza energía eléctrica.
Este artículo es muy interesante, sobre todo para nosotros como estudiantes, ya que nos da una idea de los proyectos que son imprescindibles en la actualidad, y nos da a conocer las necesidades que tienen muchas personas.
Estas mini redes a más de contribuir con la energía eléctrica, que es de vital importancia en nuestro desarrollo, ayudaría a evitar enfermedades que se pueden causar por el uso de las diferentes sustancias que también nos brindan electricidad, también ayudaría en la economía de las personas, ya que tiene un costo menor que el tendido eléctrico.