Sin clases, sin profesores, sin amigos, sin juegos y sin esa rutina diaria a la que todos los niños estaban acostumbrados. Ahora todos los días parecen iguales, y es que la crisis sanitaria ha alterado significativamente nuestro día a día. Es más, este ha sido un cambio radical para todos los estudiantes de América Latina y el Caribe, no solo estar en casa todo el día, sino intentar aprender desde otro sitio que no sea la escuela.
En la región, la cobertura de educación primaria es prácticamente universal lo que implica que todos los niños entre 6 y 12 años asisten de forma regular a la escuela. En preescolar y secundaria, aunque la cobertura es menor, 8 de cada 10 niños y jóvenes asiste a centro educativo (ver CIMA). Hoy, la pandemia ha generado una disrupción en los sistemas educativos: casi todas las escuelas de América Latina y el Caribe se encuentran cerradas. Más de 165 millones de estudiantes de todos los niveles educativos están en la casa[i]. Por tanto, deben aprender desde casa: con las herramientas que tengan, con apoyo de sus padres y con ayuda limitada de los maestros.
Todavía no conocemos la fecha en la que vamos a retomar las clases presenciales. Frente a esta incertidumbre, los Ministerios de Educación en América Latina y el Caribe han desplegado un enorme contingente para: informar a la comunidad educativa sobre la crisis sanitaria, brindar asistencia social, entregar recursos y proveer alternativas de educación a distancia.
Alcanzar a la mayor proporción posible de los estudiantes con contenidos pedagógicos es el mayor desafío de gestión que enfrentan los países este este escenario, y la gran apuesta, es que los procesos de enseñanza y aprendizaje de alguna manera continúen desde casa.
En los países de América Latina y el Caribe se han combinado distintos canales de educación a distancia como respuesta inmediata para entregar contenido a los estudiantes, incluyendo plataformas digitales, televisión, radio y material impreso.
¿Qué tanto podemos esperar de estas estrategias para garantizar el aprendizaje durante e incluso después de la emergencia? Los datos nos dicen que, no en todos los países y no para todos los estudiantes las soluciones pueden funcionar de manera equitativa.
Al considerar plataformas digitales, que son herramientas que permiten una interacción y monitoreo de los aprendizajes en tiempo real, surgen dos aspectos. Uno es que el desarrollo y la implementación exitosa de cualquier solución digital es un proceso que requiere grandes esfuerzos. Antes de la emergencia, muchos países no contaban con las condiciones digitales de base para brindar educación en línea (ver Nota CIMA) y mucho menos ahora cunado los ministerios de educación no están operando en su capacidad regular. El segundo aspecto es que estas herramientas difícilmente llegan a las poblaciones más vulnerables. Estudios en educación primaria y secundaria han evidenciado la baja incorporación de herramientas digitales en los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Además, la inequidad en el acceso a tecnología, conectividad y recursos digitales muestra que la mayoría de los estudiantes de la región no cuentan con las condiciones tecnológicas para aprender en línea desde casa (ver Nota CIMA). Por ejemplo, en América Latina menos del 30% de los hogares más vulnerables tienen acceso a un computador en el hogar para las tareas de la escuela. Además, el internet uno de los requisitos para las soluciones de aprendizaje en línea, pero muy pocos países en la región cuentan con acceso generalizado.
En cuanto a los docentes, la familiaridad con los recursos digitales en la región ha sido históricamente baja (TALIS). Menos del 60% de los docentes de secundaria tienen habilidades técnicas y pedagógicas para integrar dispositivos digitales en la instrucción (ver Nota CIMA). Las escuelas que se encuentran en contextos más vulnerables tienen a los docentes menos preparados para integrar dispositivos digitales en la instrucción (55%), comparado con el 68% de las escuelas con entornos más favorecidos.
Las brechas socioeconómicas también influyen en el apoyo que pueden ofrecer los padres en el aprendizaje de sus hijos desde los hogares. Si bien los padres juegan un papel clave, en la mayoría de los países, los padres de familia que provienen de entornos más favorecidos (con mayor nivel socioeconómico) se involucran más con el aprendizaje y progreso de los estudiantes (ver Nota CIMA). A esto se suma las condiciones de inestabilidad económica, social y emocional que enfrentan las familias durante la emergencia, que puede influir en el apoyo que brinden los padres en el hogar.
La educación en la región ha sido caracterizada por la inequidad en el acceso y por los resultados en aprendizajes bajos, desiguales y poco relevantes (ver Nota PISA). Las brechas ya eran muy amplias incluso antes del COVID-19. En América Latina, las diferencias en aprendizaje entre estudiantes de contextos vulnerables y favorecidos equivalen a más de 2 años de escolaridad (363 vs. 464 puntos en lectura, PISA-2018) (ver CIMA)[ii]. El rol que cumplía la escuela como institución para igualar las oportunidades aprendizaje se ha visto interrumpido. Por ello, son muy importantes los esfuerzos que realicen los Ministerios de Educación para evitar que las brechas se amplíen mucho más durante y después de la emergencia sanitaria. Los canales análogos y medios impresos han permitido alcanzar a los más vulnerables. Sin embargo, el rol de los docentes y los padres es ahora más importante que nunca para el acompañamiento y monitoreo de los estudiantes, sobre todo de aquellos que más lo necesitan.
Mientras que en Uruguay ya empezaron la reapertura de las escuelas con la incorporación gradual de los estudiantes en zonas rurales de bajo riesgo, la fecha parece incierta en el resto de los países. Los países que se encuentran al final de sus calendarios escolares, como República Dominicana, están considerando dar por terminado el año escolar[iii]. Los que están al inicio del ciclo[iv], aun no tienen fecha estimada de reapertura. Todo apunta a que los países deben planificar para dar continuidad a los modelos de educación a distancia durante el 2020. Todavía no se conoce cuándo será seguro reducir el distanciamiento social y abrir las escuelas de forma segura. Por ello, es indispensable que estos recursos de educación a distancia que fueron dispuestos como respuesta rápida a la emergencia sean vistos como alternativas de aprendizaje efectivo, incluso después de la emergencia.
Vivimos tiempos de gran incertidumbre, donde las preguntas son más que las respuestas que alcanzamos a brindar. Existe la posibilidad de que las brechas de aprendizaje en la región aumenten. Se planifican escenarios y se estiman impactos, mientras que la incertidumbre continúa. Sin embargo, la emergencia va a pasar y la educación debe continuar, para asegurar el aprendizaje de todos los estudiantes. Por ello es imprescindible que los países planifiquen y reflexionen desde ahora en lo qué viene después, una vez que la emergencia termine y los sistemas educativos tengan que enfrentar desafíos mayores, como los económicos y sociales que van a dejar la crisis del COVID-19.
¿Seremos capaces de aprender desde casa? ¿Serán los países capaces de generar políticas y planes que permitan revertir o minimizar el efecto de la crisis sobre el aprendizaje de los estudiantes de contextos más vulnerables?
[i] Instituto de Estadísticas de la UNESCO, 2020. Contabiliza los datos disponibles a la fecha de 26 países de América Latina y el Caribe.
[ii] En PISA, en promedio en todos los países la diferencia entre las calificaciones de grados adyacentes es de aproximadamente 40 puntos. Para obtener más información, referirse al informe: OECD (2019), PISA 2018 Results (Volume I): What Students Know and Can Do.pp. 44.
[iii] Bahamas, Barbados, Belice, Guyana, Haití, Jamaica, México, República Dominicana, Surinam, Trinidad y Tobago, y Venezuela.
[iv] Bolivia, Argentina, Costa Rica, Colombia, Brasil, El Salvador, Perú, Chile, Guatemala, Paraguay, Honduras, Uruguay, Nicaragua y Panamá
Oswaldo dice
Excelente estudio, esperemos que los gobiernos concientes del desarrollo educacional presten atención en beneficio de los más vulnerables.
Clara Gutierrez dice
Felicitaciones Adrianita, has diserta do por diferentes instituciones nacionales e internacionales, distinguida y pro activa tu presencia digna representante de tu país, ciudad y familia,. Felicitaciones.
Angel Mantilla Márquez dice
La educación a distancia es una alternativa para los estudiantes, padres de familias y profesores, pero del dicho al hecho hay muchos trechos, porque el ritmo de vida cambio para los actores de la educación.
El utilizar los medios de comunicación y la informática de punta, debe ser de acuerdo a las estadísticas real de cada contexto, el objetivo de esta, es para conocer exactamente la cantidad de familias que cuentan con una lapto, computadora de escritorio, celular y de que modelo tiene, hay radio, para de allí poder hacer programas educativos de acuerdo al currículo, de aprendizaje, por otro lado tenemos al profesor que no todos tiene una máquina para poder trabajar en casa y hay en que tiempo la utiliza si sus hijos tienen que hacer el teletrabajo porque están en la Universidad, en una unidad educativa o en escuela de básica general.
En los medio de comunicación se deben dar a conocer los temos y años básico para que los docentes vean y puedan hacer el aula invertida, el alumno da la clase y el profesor aprende.
Mineira Finol de Franco dice
Excelente aporte para reflexionar sobre el impacto que sin lugar a dudas tendrà el COVID-19 en la educaciòn. Cuàles seràn los indicadores para valorar la calidad de la educaciòn? La realidad contextualizada de los paìses Latinoamericano, caso concreto Venezuela debe generar profunda reflexiòn y acciòn para el rescate de la educaciòn como derecho humano, y en correspondencia con la Constituciòn de la Repùblica Bolivariana de Venezuela (1999), Ley Orgànica de Educaciòn (2009)
cristian dice
en colombia tenemos una dificultad ya que en mi departamento Boyaca en su gran mayoria contamos con una alto numero de poblacion en zona Rural, lo cual dificulta un poco mas el esquema de educacion en casa.
Que estrategias educativas se podrian aplicar para este grupo poblacional, sabiendo que las tegnologias no serian una opcion por cuestiones economicas y puntos de internet, de igual forma guias impresas tampoco son una opcion por el distanciamiento en las zonas rurales ?
ISABEL URREA dice
El dilema de la educacion en tiempos de covi se debe pensar en los educandos q no tienen acceso a las tecnologias de la informacion que es una gran parte de poblacion en latinoamerica yo creo necesario de reforzar el aprendizaje autonomo con un kids de herramientas curriculares medibles de acuerdo al dominio de competencia del educando y q se incluya en el kid un mapa o intructivo capaz de ubicar al padre madre y educando la ruta a segir en su aprendizaje esto nos podria dar seguridad de que el niño o niña sigio las instrucciones y el docente pueda evaluar en forma oral o escrita los contenidos programados durante el periodo propuesto
Zobeida Ramos dice
I am interested in research on…
self directed children: is that possible in a distance education system in elementary school?
valeria lisandra morales zometa dice
a mis hijas le gustan sus guias
Natalia dice
Hay que apostarle a la evolución.
Arlette García dice
En mi opinión el tomar clases a distancia pues si trae consigo sus ventajas y desventajas. El tema de la educación en línea podemos decir que se ha convertido en una gran opción, ya que brinda ventajas como estudiar a tu propio ritmo, combinar los estudios con el trabajo, ahorrar tiempo y dinero en traslados, así como desarrollar competencias tecnológicas, en algunas ocasiones genera la facilidad de estudiar, que los estúdienlas del sientan más seguros de sí mismos para opinar y aportar algo a clase. Algunas de sus desventajas es que no todos cuentan con internet , con aparatos electrónicos para la comunicación o en su caso la mayoría no aprende nada.
Isabella Castoreno dice
Educación a distancia o presencial, ¿Cuál es mejor?, para muchos de nosotros como estudiantes nos resulta complejo responder aunque, cuando llegamos a analizarlo detalladamente, nos percatamos que ambas opciones tienen tanto sus pro como sus contra. Como seres humanos es coherente decir que tenemos ideas meramente diferentes, pues para muchos es más agradable asistir de manera presencial a la toma de sus clases pues les parece más conveniente el aprender así, en cambio a muchos otros les parece más viable la educación a distancia, ya que esta en realidad resulta mas flexible, ya que esta nos brinda múltiples beneficios, uno de los más destacables es el tiempo.
Es importante mencionar que en la actualidad nos estamos adaptando a esta nueva forma de prepáranos académicamente, actualizándonos constantemente para así no solo conseguir nuestro objetivo sino también nuestra adaptación, pues con el paso del tiempo nuevos descubrimientos vendrán y nuevas modalidades se presentaran y para ello hay que mantenerse siempre actualizados. Estamos en en siglo XXI y el uso de la tecnología se ha ido desarrollando de manera inimaginable, nuestra era esta evolucionando al igual que nuestra forma de aprender.