Herramientas tecnológicas y digitales
La innovación tecnológica y digital es clave para transformar el paradigma en la gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU). La incorporación de Tecnologías Inteligentes de Residuos – Smart Waste Technogolies (SWT), permite optimizar la recolección, el tratamiento y la valorización de los residuos, fomentando una gestión más eficiente y sostenible que acelera la transición hacia una economía circular.
Algunos prestadores de servicios en América Latina y el Caribe han comenzado a adoptar nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia de sus operaciones. Este es el caso del Consórcio Intermunicipal do Médio Vale do Itajaí (CIMVI) que, con apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), está desarrollando un piloto para implementar herramientas de inteligencia artificial (IA) en su planta de separación de residuos sólidos. El objetivo es mejorar la eficiencia en la clasificación de residuos municipales para su posterior reciclaje.
Desarrollada por Greyparrot, la tecnología utiliza un sistema de escaneo de imágenes basado en IA previamente entrenada y calibrada con más de 89 categorías de materiales (plásticos, fibras, metales, electrónicos, entre otros). Este sistema identifica de forma ágil, segura y precisa los tipos de residuos que pasan por la planta. Las imágenes se clasifican y categorizan al instante, proporcionando información detallada sobre la composición, masa, tamaño e incluso el SKU y las marcas de los residuos procesados diariamente. Esto permite a CIMVI optimizar y mejorar sus operaciones al obtener un conocimiento profundo de la efectividad de sus estrategias de clasificación.
El análisis de esta información ha permitido generar datos relacionados con el valor financiero de los materiales, emisiones de CO2eq evitadas, cantidad de material desviado de rellenos sanitarios, y reportes de eficiencia por turnos de trabajo en la planta. Con un nivel de precisión del 96%, el acceso a datos confiables y oportunos ha mejorado significativamente la toma de decisiones por parte del operador del servicio. Como resultado preliminar, se ha logrado aumentar la eficiencia en el proceso de selección y clasificación de materiales reciclables, además de identificar oportunidades de mejora en los turnos de trabajo dentro de la planta de separación.
Fuente: Greyparrot, 2024
Eficiencia e innovación en operadores de servicio
Según las Naciones Unidas, en 2020, el costo directo estimado para la gestión de residuos sólidos urbanos (RSU) a nivel global fue de US$252.3 billones. De ese total, el 59% correspondió a costos de recolección, 14% a la disposición final en rellenos sanitarios, 12% a valorización energética, 8% a reciclaje y 7% a botaderos a cielo abierto. En la región, los costos operativos básicos para la mayoría de los operadores equivalen al 81% del total, considerando las operaciones de recolección, manejo en rellenos sanitarios y sistemas de reciclaje.
Dado este panorama, se podría asumir que mejorar la eficiencia de los operadores se relaciona estrechamente con la reducción de costos operativos. Un estudio realizado por el BID en Colombia analizó la eficiencia de los principales operadores de gestión de residuos a nivel nacional. Los resultados mostraron que los operadores que atienden municipalidades con mayor densidad poblacional tienen niveles de eficiencia superiores al 70%.
El análisis técnico reveló que la densidad poblacional atendida por cada operador influye significativamente en los costos del servicio, demostrando la importancia de la economía de densidad y la economía de escala. Es decir, los operadores que gestionan residuos en áreas de alta densidad poblacional son más eficientes en términos de costos, lo que les permite adoptar herramientas y tecnologías innovadoras. En otras palabras, se crea una oportunidad para implementar estrategias hacia el escalamiento tecnológico y digital en los operadores con mayor eficiencia, y avanzar hacia la circularidad e innovación en la región.
La transición hacia la circularidad del sector de residuos en América Latina y el Caribe requiere de operadores de servicio con modelos de gestión eficientes e innovadores.
Por esta razón, el BID está desarrollando la herramienta GIRSU Rating, cuyo propósito es promover la mejora continua y sistemática de los sistemas de gestión de residuos sólidos.
Diseñada para fortalecer las capacidades institucionales, administrativas y operativas de los operadores, GIRSU Rating proporciona una metodología estandarizada para el levantamiento de datos. Esto permite un análisis más preciso y facilita la implementación de acciones para la mejora continua en la gestión de residuos sólidos.
La innovación es un componente esencial de esta herramienta para optimizar la eficiencia en la prestación de servicios. Actualmente, GIRSU Rating se encuentra en fase de pilotaje y representa un significativo avance hacia la sostenibilidad en la gestión de residuos sólidos municipales.
La innovación en el sector de residuos sólidos forma parte de la agenda sectorial del BID, cuyas acciones se enmarcan en fomentar y fortalecer las herramientas y tecnologías disponibles para mejorar la eficiencia de operadores de servicio, generar data oportuna y confiable, e impulsar la transición hacia un modelo circular inclusivo y sostenible.
Si quieres conocer más sobre innovación en el sector de residuos sólidos, te invitamos a ver la grabación del webinar en Innovación en el sector de Residuos Sólidos y esta Nota Técnica sobre digitalización en el sector de residuos sólidos.
Sobre Fuente de Innovación
Fuente de Innovación es una alianza estratégica del Grupo BID con socios externos para promover el desarrollo y la adopción de soluciones innovadoras en los sectores de agua, saneamiento y residuos sólidos, con el objetivo de lograr servicios inteligentes, inclusivos y sostenibles, con un enfoque en los proveedores de servicios en América Latina y el Caribe. Fuente de Innovación está financiada por el Gobierno de Suiza, a través de su Secretaría de Estado para Asuntos Económicos (SECO), la República de Corea, a través de su Ministerio del Medio Ambiente, el Gobierno de España, a través de su Ministerio de Economía Comercio y Empresa (MINECO), el Gobierno de Israel, a través de su Ministerio de Finanzas, la Fundación FEMSA y la Fundación Coca-Cola. La alianza también se beneficia de contribuciones directas de IDB Lab y de la División de Agua y Saneamiento del BID. Además, mantiene una estrecha coordinación con el Aquafund, creado con capital del BID y al cual contribuye una amplia gama de socios del sector público y privado.
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